Solemnidad de Pentecostés

Mayo 19, 2024

De los Manuscritos de la Divina Voluntad


"El Fiat Voluntad Tua se atribuirá al Espíritu Santo; y es propiamente en el Fiat Voluntas Tua que el Divino Espíritu hará desahogo de su obra"

Vol. 17-43


Hemos completado 30 días de preparación en Honor a Tí, Espíritu Divino, junto con la Novena para profundizar Tus Dones en el Pentecostés anhelado en la plenitud de Tu Don de la Divina Voluntad.


Para hoy traemos 4 citas con 1 audio: 

El Amor del Padre genera al Hijo, éste al Espíritu Santo 


Ven Espíritu Santo, haz viva morada en esta Tu alma.  

Fiat

ORACIÓN 

AL ESPÍRITU SANTO

En Virtud de la Divina Voluntad, con la Palabra de Jesús en el vol. 17, cap. 43 (5) 


Me Fundo en Ti, Espíritu Santo:


Giro de oración con reparación al Espíritu Santo 

Estamos en la Era del Tercer Fiat!   La Era Celestial y Trina de la Divina Voluntad



Unidos a Nuestra Madre María Santísima y a Luisa, la pequeña hija de la Divina Voluntad, en el Cenáculo del Monte Sión (1era. Iglesia Cristiana), oramos por la Gran Efusión del Espíritu Santo para un Segundo Pentecostés para toda la humanidad, se extienda el Reino de Tu Divina Voluntad y triunfe en todos la Era del Tercer Fiat!





Oramos al Espíritu Santo por Este Pentecostés Divino

 

por el Don del Ser Divino en posesión,

el don de la divina voluntad



Continúa Espíritu Santo infundiendo en todos tu aliento Divino.

Jesús, queremos Tu Mismo Querer, que envíes sobre todos nosotros los pequeños hijos de tu Divina Voluntad, al Espíritu Santificador con Su Potencia del Don Altísimo de Tu Divina Voluntad! que contiene todos los dones y atributos Divinos.

Donados en Vuestra Voluntad, nos inclinamos a Ti, Madre y Reina Nuestra para recibir y ser sellados con el Gran Don de Tu Divina Voluntad, y que seamos todos Luz del mundo como Hostias vivas, en correspondencia y Gloria a Ti, Padre Nuestro.

Espíritu Divino, haznos conocer el primer acto que haces, de llevar Vuestra Voluntad como acto completo de tu Santificación a todos los Santificantes y que seamos colmados de Tu Presencia Divina.  


Con la Gran Efusión de este Gran Don de la Divina Voluntad, Tú, Espíritu Santo, vendrás y renovarás la faz de la tierra. 

Amado Jesús, que esta humilde oración sea Tu Gran Mandato. 

Fiat Divina Voluntad

Citas que atendimos en los 30 días de preparación, para la Solemnidad de Pentecostés:

Espíritu Santo


Novena con los Dones del Espíritu Santo

El Amor del Padre genera al Hijo, éste al Espíritu Santo 


Libro de Cielo

Del volumen 36, 

Cuatro Revelaciones Divinas Sobre el Espíritu Santo


Vol. 36-18,  Vol. 36-20, 

Vol. 36-44,  Vol. 36-45


AUDIO

Con las 4 enseñanzas



Vol. 36, cap.18  Julio 6, 1938 


 

"...  ‘¿Qué otra cosa podía hacer y no hice? ¿Podía tal vez amarte de más y no te he amado?’ Tú debes saber que mi amor llega al exceso; conforme la criatura hace sus actos en mi Querer, Yo llamo en aquél acto a todos nuestros actos que hemos hecho, posibles e imaginables, también mi misma Generación del Verbo, de la cual procedió el Espíritu Santo, toda la Creación, mi Encarnación en el tiempo, todo, todo lo encierro en aquel acto para poder decir: 

‘Es acto nuestro, es acto completo’. Nada debe faltar, y la criatura debe podernos decir: 

‘En tu Voluntad todo es mío y todo puedo daros, aun a Ustedes mismos’. 

Así que nuestra gloria, nuestro amor, se difunden en todas nuestras obras, y reuniendo todo se vierte hasta nuestro seno divino. ¡Oh! cómo es dulce oír resonar en todas las cosas: 

‘Gloria, amor a nuestro Creador!’ 

¿Pero quién nos ha dado la ocasión de recibir tanta gloria nuestra? Quien vive en nuestro Querer”

 🕊️

2. Yo Genero continuamente, y del arrebato e ímpetu de nuestro amor de Padre e Hijo Procedió el Espíritu Santo

Vol. 36-20 (5) Julio 18, 1938 


Ahora, tú debes saber que mi amor no está contento si no hago y doy nuevas sorpresas de amor a quien vive en mi Querer, si no agrego cosas nuevas para hacerlas conocer, así que escucha hija mía cuánto te he amado: Mi Padre Celestial me generaba, y Yo lo amaba, y en aquél amor te amaba también a ti, porque mi Voluntad te llevaba siempre presente. 

Yo Genero continuamente, y del arrebato e ímpetu de nuestro amor de Padre e Hijo Procedió el Espíritu Santo, y en aquel arrebato te amé también a ti con amor continuo. Creé toda la Creación, y en cada cosa que creaba, primero te amaba a ti y después la creaba y la extendía a tu servicio. También en el amor entre Yo y mi Mamá Celestial te amé, y ¡oh, cuánto te amé al encarnarme en su seno virginal! Te amé en cada respiro, en cada movimiento, en cada lágrima, mi Voluntad te hacía presente para que te amase, y tú recibieras como don mío mi respiro, mis lágrimas, mi movimiento. Ha llegado a tanto mi amor por quien debía vivir en mi Querer, que también cuando hacía gracias a mis santos y los amaba, en aquel amor ella venía encerrada. Puedo decir: ‘Te he amado siempre, te he amado en todos y en todo, te he amado en todos los tiempos, en todo lugar, te he amado dondequiera y por todas partes’. 

🕊️

3. El alimento divino: ‘El amor’ que genera al Hijo y al Espíritu Santo

Vol. 36-44   Diciembre 18, 1938 


El don más grande es cuando la vemos llevada en los brazos de nuestra Voluntad, entonces nos sentimos de tal manera atraídos, que no podemos hacer menos que hablar de nuestro Ente Supremo; decirle un conocimiento de más de lo que somos es el don más grande que podemos hacer, éste supera a toda la Creación; conocer nuestras obras es don, hacerle conoce a Nosotros mismos es Vida nuestra que damos, es admitirla a nuestros secretos, es fiarse el Creador de la criatura. 

Vivir en nuestro Querer, ser amados, es todo para Nosotros, mucho más que el amor de Nosotros mismos forma nuestro alimento continuo

Mi Padre Celestial genera sin cesar jamás a su Hijo, porque ama; con el generarme forma el alimento para alimentarnos. 

Yo, su Hijo, amo con su mismo amor y procede el Espíritu Santo, con esto formamos otro alimento para alimentarnos. 

Si creamos la Creación fue porque amamos, y si la sostenemos con nuestro acto creante y conservante, es porque amamos; este amor nos sirve de alimento. Si queremos que la criatura nos conozca en nuestras obras y en Nosotros mismos, es porque queremos ser amados, y de este amor nos servimos para alimentarnos. 

🕊️

4. Somos inseparables, y aunque Nosotros mismos lo quisiéramos, no podemos separarnos, a lo más nos bilocamos, y mientras tenemos nuestro trono en el Cielo, formamos nuestro trono en la tierra, pero separarnos jamás. 

Vol. 36-45 (1, 2)  Diciembre 25, 1938 


Me he detenido en el descendimiento del Verbo a la tierra, y yo lo compadecía al verlo solo. Y mi dulce Jesús, con una ternura indecible, sorprendiéndome me ha dicho: 

“Hija mía amadísima, tú te equivocas, la soledad fue por parte de la ingratitud humana, pero por la parte Divina y de nuestras obras, todas me acompañaron, no me dejaron jamás solo, es más, debes saber que junto Conmigo descendieron el Padre y el Espíritu Santo; mientras Yo quedé con Ellos en el Cielo, Ellos descendieron Conmigo a la tierra. 

Somos inseparables, y aunque Nosotros mismos lo quisiéramos, no podemos separarnos, a lo más nos bilocamos, y mientras tenemos nuestro trono en el Cielo, formamos nuestro trono en la tierra, pero separarnos jamás. 

En el descendimiento sobre la tierra el Verbo tomó la parte actuante, pero siempre concurrentes el Padre y el Espíritu. 


Fiat Divina Voluntad

Secuencia de Pentecostés

Oración al Espíritu Santo



Ven Espíritu Divino,

manda tu luz desde el cielo,

Padre amoroso del pobre;

don en tus dones espléndido;

luz que penetra las almas;

fuente del mayor consuelo.


Ven, dulce huésped del alma,

descanso de nuestro esfuerzo,

tregua en el duro trabajo,

brisa en las horas de fuego,

gozo que enjuga las lágrimas

y reconforta en los duelos.


Entra hasta el fondo del alma,

divina luz y enriquécenos.

Mira el vacío del hombre

si Tú le faltas por dentro;

mira el poder del pecado

cuando no envías tu aliento.


Riega la tierra en sequía,

sana el corazón enfermo,

lava las manchas, infunde

calor de vida en el hielo,

doma el espíritu indómito,

guía al que tuerce el sendero.


Reparte tus Siete Dones

según la fe de tus siervos.

Por tu bondad y tu gracia

dale al esfuerzo su mérito;

salva al que busca salvarse

y danos tu gozo eterno. Amén