Ingeborg Bachmann
Sólo cosas sombrías

Como Orfeo, toco

en las cuerdas de la vida la muerte,

y ante la belleza de la tierra

y de tus ojos, que administran el cielo,

sólo sé decir cosas sombrías.


No olvides que también tú, de pronto,

aquella mañana, cuando tu lecho

todavía estaba húmedo de rocío y el clavel

dormía junto a tu corazón,

viste el río oscuro

pasar a tu lado.


La cuerda del silencio,

tensada sobre la ola de sangre,

puso manos en tu corazón sonante.

Transformado quedó tu rizo

en la cabellera de sombras de la noche,

los copos negros de las tinieblas

nevaron tu semblante.


Y mi lugar no está a tu lado.

Ahora nos lamentamos los dos.


Pero como Orfeo, sé

junto a las cuerdas de la muerte la vida,

y en mí reverbera el azulado

de tu ojo por siempre cerrado.


Ingeborg Bachmann de El tiempo postergado [1991]

Trad. Arturo Parada