Hernán Bravo Varela

Poética

«Eras la piedra,

aunque me parecías

llamar como una boca:

seguidilla

tu círculo cerrado,

aparición del agua

que te gritaba esposa.

Sin ser guijarra,

te creí encinta.

A pleno sol,

entre palomas

que salen al campo,

la piedra —tú—

había estado sola,

solamente.

Fácil el día en que el cielo

sea azul

(decirlo, decir algo)

con levantar el vuelo

de la vista.

Quien camina tu ruta

debajo de la nieve

no ve claro;

el silencio que bate

cardinal,

sin centro, todavía.

El alma de lo dicho

no es un pájaro.

Apenas frío, busco

tu dicha, enmudecer.

¿Cómo llegar a ti

sino callando?

Pero si dirigiera

mis pasos a tu inicio

dejándote de hablar,

me mentiría.

Quiero decir ahora,

destemplado,

el bosque al que me invierno.

En la nevada tanta

se hizo noche,

oscura la blancura.

Parvaba alrededor,

de blanco, como nieve.

Adidía».

Hernán Bravo Varela en Sobrenaturaleza [2010]