Propias palabras del diseñador:
El refrigerador termodinámico es una transferencia y optimización de la tecnología básica utilizada principalmente en los países emergentes para la cocina de alta tecnología. La comida se conserva por el efecto de enfriamiento de evaporar el agua sin electricidad. El sistema está diseñado para ser apilable, se puede utilizar como una alternativa para una despensa, un segundo frigorífico o un tazón de fruta avanzada. El diseño podría ayudar a reducir el consumo de energía doméstica sin comprometer radicalmente la comodidad.
El enfriador consta de dos ollas, una colocada dentro de la otra. El espacio entre las dos ollas está lleno de espuma de vidrio húmedo, un producto de desecho del proceso de reciclaje de vidrio. He utilizado este material en lugar de arena en la versión original, ya que empapa en el agua más rápido y dejar que el recipiente entero se vuelve mucho más ligero. El bote de arcilla más pequeño, Se cubre con un paño húmedo que se estira sobre la tapa. El agua contenida en la espuma de vidrio entre las dos ollas empieza a evaporarse. En virtud de las leyes de la termodinámica, el proceso de evaporación provoca automáticamente una caída de la temperatura de varios grados, enfriando la olla de arcilla interna, destruyendo los microorganismos dañinos y preservando los alimentos perecederos en su interior.
Para mantener el proceso de enfriamiento hay que añadir agua activa cada dos días, un indicador verde resalta esto para el usuario. Se realizó un prototipo de trabajo completo, trabajando con profesores de física, utilizando materiales reciclables como espuma de vidrio, arcilla y bioplásticos. El proceso de evaporación provoca automáticamente una caída de temperatura de varios grados, enfriando la olla de arcilla interna, destruyendo microorganismos nocivos y preservando los alimentos perecederos dentro. Para mantener el proceso de enfriamiento hay que añadir agua activa cada dos días, un indicador verde resalta esto para el usuario. Se realizó un prototipo de trabajo completo, trabajando con profesores de física, utilizando materiales reciclables como espuma de vidrio, arcilla y bioplásticos.
El proceso de evaporación provoca automáticamente una caída de temperatura de varios grados, enfriando la olla de arcilla interna, destruyendo microorganismos nocivos y preservando los alimentos perecederos dentro. Para mantener el proceso de enfriamiento hay que añadir agua activa cada dos días, un indicador verde resalta esto para el usuario. Se realizó un prototipo de trabajo completo, trabajando con profesores de física, utilizando materiales reciclables como espuma de vidrio, arcilla y bioplásticos.
Termodinámica enfriador diseño final