CLAUDIA MATA MARTÍNEZ, MARTA REY SUÁREZ E NICOLÁS VÁZQUEZ RODRÍGUEZ | A Coruña-Vigo- Santiago de Compostela

SOS Racismo Galicia es una organización sin ánimo de lucro con diferentes sedes por España, destinada a ayudar a las personas que sufren o sufrieron actos racistas. Esta asociación fue constituida en el año 1992. En su web se puede observar un apartado exclusivo para denuncias. Esther Lora, abogada con una trayectoria de más de 20 años de profesión, trabaja en la Oficina de Información y Denuncias desde el año 2019 en SOS RACISMO GALICIA, en la oficina física de Vigo. Sonia Mendes es psicóloga y técnica de la Oficina de Información y Denuncias desde el año 2019 en la misma entidad.

Esther y Sonia explican su experiencia en primera persona del proceso de dar a conocer la asociación: “Es cierto que normalmente lo que se hace es una detección de las necesidades de cada territorio”. Tienen varias sedes a lo largo de España, todas con el mismo objetivo. Cada una de ellas realiza unas funciones teniendo en cuenta las necesidades del territorio en el que se encuentra. También se dedican a dar a conocer este problema y explican su concepto de raza y racismo: “La raza como tal es una construcción social, pero realmente se basa en una construcción de normas y costumbres que neste momento día de hoy siguen marcando unas líneas muy claras: de que ciertas cualidades físicas como el color de piel, unos trazos, la textura de el pelo es superior o inferior. Vemos como, realmente, aunque no se tenga esa base biológica, se tiene muchísimo poder porque, aunque no lo reconozcamos, a día de hoy en la sociedad todos somos conscientes de quen las razas también clasifican a las personas. Hay personas que parecen ser de segunda o tercera clase. Y normalmente a persoa branca, a nivel universal, sempre está na primeira clase”, argumenta Sonia Mendes.

—¿Cómo se les ocurrió la idea de crear una asociación que lucha contra el racismo y da a conocer este tema?

[Sonia]—Cuando yo llegué, ya estaba andando la asociación, pero justamente llegué a SOS Racismo Galicia para luchar contra todas las vulneraciones que suceden todos los días. Después del primer asesinato racista que hubo en España foi cando se empezaron a crear el resto de SOS Racismo en el resto del Estado, y creo que fue una manera de ver lo que pasaba en Galicia y cómo son tratadas las personas racializadas. A partir de ahí empezó la asociación.

—Podrían describirnos un poco el proceso de cómo fue dar a coñecer a su asociación?

[Sonia]—Como comentamos, ninguna de las dos estuvimos en el proceso de creación de la asociación, pero yo sí que estuve en la junta directiva durante unos años, aunque ninguna de las dos estuvo en ese momento. Hay que decir que SOS Racismo Galicia lleva varios años ya. Es cierto que normalmente lo que se hace es una detección de las necesidades de cada territorio, necesidades en el sentido de cuáles son los mayores problemas que se encuentran las personas migrantes y racializadas, o su acceso al ámbito sanitario, educativo, en el ámbito también de las prestaciones o de las viviendas. Así fue surgiendo un poco esa fortaleza de crear una asociación que pudiese apoyar este tipo de cuestións e denunciar públicamente todos os casos de racismo y discriminación que existen en Galicia.

—Cal cren que é a orixe e por que hay discriminación racista e xenófoba?

[Esther]—No es solo una actitud personal que podemos encontrar, si no que el racismo es una construcción o un sistema que atraviesa toda la sociedad, todos los países en todo el planeta.

Existe porque está construído así desde siempre, porque es la forma de garantizar que unas personas tienen o poder absoluto sobre otras es porque es la forma de supervivencia de algunas otras. O que hoy lo somos nosotros depende de lo que en el pasado hiciera gente como nosotros. Es muy profundo, muy transversal y cuesta muchísimo derribarlo por esas actitudes racistas y xenófobas.

El tema de la xenofobia es otra cosa, pero al mismo tiempo está ligado al tema del racismo. El miedo a lo diferente está en nuestra cabeza europea de pensar que lo nuestro es lo bueno y el resto no, de ver lo demás como diferente, a lo que hay que tenerle miedo y del que hay que desconfiar. Es complicado.

—Hay muchas personas que les preocupa este tema pero no saben cómo ayudar. ¿Cómo creen que podría un individuo desde su ámbito personal contribuir a reducir el racismo?

[Esther]—Todos tenemos una responsabilidad personal, y después podemos ir a la parte más activa para asociarnos. En SOS Racismo tenemos una opción si la gente quiere colaborar: puede hacerse socia para ayudar a financiar tasaciones, las formaciones que se hacen e incluso pueden postularse como persona activista o voluntaria para participar en las actividades.

Por eso, sobre todo, a nivel personal qué es lo que preguntabais es muy importante la formación. Tiene mucho peso que las personas se formen para saber reconocer o detectar estos comportamientos racistas, xenófobos o discriminatorios. Por lo que es importante leer mucho, formarse, tener interés, escuchar o participar en los ámbitos o en aquellos espacios en los que se hablan de estas cosas y se forma a las personas para poder ir deconstruyendo poco a poco nuestra actitud racista.

—Podrían describirnos algunos de los logros que más los marcaron como asociación hasta el momento?

[Esther]—Tenemos una oficina de denuncias y llevamos la acusación por actos racistas y xenófobos. Yo personalmente pienso que uno de los logros es conseguir que las personas sean conscientes de lo que está pasando y consigan denunciar y tener la fortaleza de seguir durante todo el proceso; porque no siempre es fácil. Luego los logros son también cuando conseguimos nuestros objetivos: cuando ponemos una denuncia en un centro educativo para que retiren un contenido racista y efectivamente se hace; cuando notamos una actitud racista en una inmobiliaria y ganamos la pelea; o cuando hacemos unas jornadas de formación y actividad pública y la gente responde bien; pero también cuando vemos que nuestro trabajo día a día y nuestras campañas van dando frutos.

—Estuvimos observando la página web, y vimos que hay un apartado para denunciar los actos racistas que sufren ciertas personas. ¿Cómo es el proceso de ayuda a las personas que denuncian?

[Sonia]—Ese formulario se puso en la página web para las personas que quisieran denunciar por sufrir racismo o también para las testigos o la gente que presenció actos racistas. Cuando una persona se acerca por la oficina, intentamos asesorarle, acompañarle o esperar a que nos cuente un poco lo que ha pasado y ver lo que quiere hacer esa víctima. Lo primero que hay que hacer es acompañar a la persona sin presión para ver lo que quiere hacer. Si quiere escribir una reclamación, la ayudamos a escribir ese texto, le asesoramos y, sobre todo, intentamos reparar un poco ese daño. Una de las cosas más importantes que hacemos en la oficina es dar formación. Impartimos formación antirracista para el público. Cuando recibimos muchas denuncias, lo que hacemos es valorar lo que supone esa experiencia traumática racista para la persona.

—Entonces, el consejo que le daríais a una persona que sufre o vió algún acto racista sería denunciar?

[Sonia]—Siempre, aunque sean colegas o familiares. El primer paso sería llamar la atención para parar ese tipo de comportamientos o actitudes racistas. Y, en segundo lugar, habría que denunciarlo para ponerlo en conocimiento de que algunas instituciones están especializadas en ese tema.

—Alguén de vostedes podería contarnos a súa experiencia entrando na asociación e o por que decidiron facelo?

[Esther]—Yo entré en SOS Racismo Galicia en 2018 porque estaban buscando un abogado o abogada que se encargará de la oficina de información y denuncias. El trabajo me pareció muy útil y el contenido del proyecto es súper interesante, porque al final la abogacía es una profesión bastante técnica, bastante fría y, por experiencia personal, siempre me gustó utilizar mi profesión como herramienta para ayudar a las personas dentro de lo poco que podemos hacer cada uno.

Por lo que la oferta de SOS Racismo, que es donde estoy yo a trabajar, me pareció una experiencia estupenda.

Empecé a trabajar en la oficina de información y denuncias, pero sobre todo empecé a aprender muchísimo, ya que en el proceso del trabajo no solo damos información, sino que también aprendemos cosas que yo no sabía y cosas que pretendía saber y que luego no sabía. Mi valoración es muy positiva no sólo porque el trabajo me encanta, sino porque como persona estoy aprendiendo mucho.

—Le dedicáis todo el tiempo a la asociación o tenéis un trabajo a parte?

[Sonia]—En mi caso estoy a media jornada en la asociación y también hago otras cosas por fuera. Hay compañeras que se dedican exclusivamente a la asociación y a todas las cosas que hay que hacer en ella. Luego hay gente también voluntaria.

—En nuestro estudio hablamos sobre las razas y sobre si son una cuestión sólo social o tienen base biológica. ¿Qué opinan ustedes al respecto?

[Sonia]—Si, es cierto que la raza como tal es una construcción social, pero realmente se basa en una construcción de normas y costumbres que en su intre es a día de hoy, siguen marcando unas líneas muy claras: de que ciertas cualidades físicas como la color de piel, unos trazos, la textura de cabello es superior o inferior. Vemos como, realmente, aún que no tengan esa base biológica, tienen muchísimo poder porque, aunque no lo reconozcamos, a día de hoy en la sociedad todos somos conscientes de que las razas también clasifica las personas. Hay personas que parece como si fueran de segunda o tercera clase. Normalmente una persona blanca, a nivel universal, siempre está en primera clase. Creéis que no es algo tan influyente en la vida de las personas? Yo creo que sí, aunque sea una construcción social.

—Podrían contarnos una denuncia que las hiciera reflexionar particularmente sobre el racismo y la xenofobia?

[Sonia]—Yo creo que todas. Como comentaba antes mi compañera Esther, los dos puntos fuertes de SOS Racismo es que exista una oficina de información y denuncias, que es la única que existe a nivel gallego.

—¿De qué maneras dan a conocer la asociación y qué función creen que hacen en la sociedad?

[Esther]—Hay una parte más pública, como las redes sociales o la página web, pareciendo más importante estar visibles y presentes. Luego, la parte más real, que es el trabajo en redes. En Vigo y la Coruña, que es donde tenemos las oficinas físicas, y donde se hace el esfuerzo de trabajo en redes: con entidades, con grupos, con movimientos, con coordinadoras… Que están en el ámbito de lo social y que nos ayudan, primero a darnos a conocer y, sobre todo, a garantizar que las personas puedan acabar una atención integral y, así, trabajar todas juntas.

—Ya sabemos que la organización a la que pertenecen fue fundada en 1995. Queríamos saber si desde su fundación a nivel de rexeitamento de las personas de otro color de piel disminuyó o aumentó y cuáles fueron las razones de este cambio.

[Esther]Yo y mi compañera en el año 1995 no estábamos aquí, pero sí que podemos hablar de la evolución en estos últimos años. Nosotros hacemos un recuento de las denuncias que recibimos todos los años y hacemos un informe anual para saber cuáles fueron las denuncias, en qué ámbitos y, sobre todo, cantas, e a verdade, é que ano trás ano o número de denuncias aumenta.

En los últimos tiempos el avance de ciertos partidos políticos y también el relajamiento de los discursos racistas y xenófobos, sobre todo en las redes sociales, estamos viendo que la polarización y la impunidad de la gente que mantiene estos discursos cada vez es maior. Entonces, si yo tuviera que hacer un resumen de esto, diría que el rexeitamento, los discursos fanáticos, la xenofobia y el racismo aumentaron y siguen aumentando a día de hoy en Galicia.

—¿Cuáles son los principales objetivos que tiene su asociación este año 2022 en lo que se refiere a la lucha contra el racismo y la xenofobia?

[Sonia]—Seguir trabajando y poder convertirnos en la referencia a nivel gallego para que las personas se apeguen para formarse, para asesorarse y para denunciar casos de racismo y xenofobia que existen, a seguir trabajando y poder atender más casos en la comunidad gallega.

—Si por algún motivo no consiguen los objetivos marcados para este año, cuáles serían los más urgentes en estos ámbitos para ustedes de aquí en adelante ¿ y por que?

[Sonia]—Seguir siendo una referencia a nivel gallego en entidades con perspectiva antirracista y seguir ofreciendo y compartiendo mucha información antirracista, pues vemos que es necesario en todos los ámbitos educativos, a nivel civil y en el ámbito institucional. Porque creo que es sumamente necesario ser conscientes de que todas las personas aprendemos actitudes y comportamientos racistas, entonces el primer paso es formarse y reconocer que esto lleva muchos años dentro de nosotros. Pensamos que es un proceso largo y que hay que formarse para poder tener una sociedad antirracista.

—¿Cómo les gustaría que avanzara la asociación en el futuro en el referente a esta lucha contra la xenofobia y el racismo?

[Esther]—Lo ideal o el tópico sería que ya no hiciéramos falta, pero lo que nos gustaría es tener la oportunidad tanto personal como de recursos para poder seguir trabajando y, decía antes Sonia, seguir siendo un referente para que si alguien tiene un problema cunha actitud racista o xenófoba que sepa que puede acudir aquí y tener redes por todo el territorio gallego para poder trabajar arreo y hacer miles de formaciones en los centros educativos y en la rúa también. En principio, nos gustaría poder seguir trabajando y que nuestro trabajo tenga buena acogida.

—De que hecho creen que en el futuro continuará el problema de la discriminación racista o xenófoba? Se verá reducida o completamente acabada?

[Sonia]—Yo creo que es una problemática que llevamos arrastrando muchísimos años y está en la base de la construcción de muchas sociedades y muchos países. Si os fijáis un poco en el ámbito de esta entrevista, en el ámbito educativo, y si os fijáis en la historia de Galicia y en la historia de España, hay muchísimos hechos o experiencias racistas que no son incluídas na historia. Entón, estudamos a parte que interesa. No momento no que se empiecen a reconocer todas las masacres, todas las explotaciones y todos los asesinatos, podremos ir caminando cara un futuro en el que exista menos discriminación racial, pero no creo que se elimine de todo.