MAJESTUOSO CARRUAJE POR FANNY JEM WONG

"Lo inaccesible junto a lo impenetrable unido a lo inexplicable,

Lo inexplicable a par de lo inconmensurable; esto es el cielo"

Victor Hugo

MAJESTUOSO CARRUAJE

Nubarrones efímeros, agobiantes y efervescentes silencios

Carruaje revolcado en pendiente por mil bestias heridas

El reloj astronómico balancea furioso los extremos

Un final y un comienzo encuentran su centro en un pañuelo

El legado es la antitesis de palabra que jamás fue escrita

Silencios ensordecedores, la nada grita, la cosa se expande

Una lagrima de sangre tumbada sobre un cristal, sonríe

Cuando misteriosa la casa situada en la cumbre contrasta con el universo

Falsa es la simetría que distorsiona ventanales y puertas

Caen los techos, se abren los pisos, las luces oscilan, se apagan

Y en el pensamiento se añaden retratos de vacíos sobre los espejos rotos

Por las escaleras corren espesas las breas negras sin sentido

Y en los bordes de la cornisa canta un mutilado cuervo

Aplastante fuerza no destruyas el hogar ancestral

Hablar hoy no es lo justo, la historia estaba cantada

La dignidad de las palabras no se perderá entre vacíos

El pensamiento no fue lúcido las señales eran claras

Las advertencias no fueron escuchadas, ni vistas las luces rojas

El discurso no es posible ante una muerte siempre anunciada

Llovieron pestes horrendas de los cielos, no teníamos paraguas

Él que se atreve a actuar deberá ser responsable de sus acciones

Yo, lo fui, asumí errores, enfrenté el dolor y gané fortaleza

Llevó tiempo superar el legado de angustias y miedos, es cierto

Hablar de las miserias de la historia es un absurdo

Jamás un elefante disfrutaría de un concierto de violines

Necio fue el amoroso proyecto, dolorosos y confusos los resultados

El ciego tenía ojos sanos pero no deseaba ver

Y el tuerto incrédulamente tapo el único ojo de su gran ego

Voluptuosas y seductoras ecuaciones fueron las armas

De un homicidio voluntario siempre cantado

Silencios ensordecedores, la nada grita, pero mi yo sigue vivo

Las palabras nunca lograrán ser suficientes, no compensan el dolor

Durante siglos cargue sobre el pecho una lápida sin dirección precisa

La nación de mis sueños fue tantas veces devastada y olvidada

El enlace fantasmal siempre rompió lazos fugitivo

Hoy no temo a la vida, no temo a la muerte,

Ni a la roja cola del demonio, ni a las lenguas de fuego

No temo a las ideas, ni a las palabras, ni a los cuchillos

Mucho menos a los espejos, ni a corredores oscuros

Siempre fueron todos ellos los súbditos de reinos conocidos

Cara a cara logré comprender los hechos

y siempre encontré la exacta forma de enfrentarlos

Me libero finalmente de antiguos esquemas

Tomo las riendas del majestuoso carruaje

Recupero la dignidad de una dinastía ancestral

De la cual soy heredera y jamás volveré a olvidarlo

El derecho de ser feliz a pesar de los boquetes que engalanan el pecho

Y pinto mis sueños, mi nombre y hasta mi sombra

De azules y turquesas imágenes, de rubíes, diamantes y jades

Recupero el derecho de ser el cochero de mi propia existencia

FANNY JEM WONG

07.01.2007

1467 días de sueños moribundos entre locas carreteras

Aletargada el alma despierta sobre el pescante

No logra ver, pero por fin hoy sonríe

¡Dios salve a la reina!

JEM WONG