EL COCHERO POR JEM WONG.

EL COCHERO

¡Yo te conozco! Eres mejor...que nadie

Señor imponentedominas el mundo

Llevas en las manos riendas sueltas

de las yeguas que diriges hábilmente

Y ellas trotan locas por los caminos

que hoy les transitas.

Cochero elegante...Mi desleal lucero

Sonrisa afableVil embustero

Manos duras ¡Corazón de Malagua!

Mármol de carrara traicionero

Voz que acaricia como la Ibis

Una mirada que desnuda como el alacrán

Sonrisa que inspira paciencia

sometida por delicias angustiosas

en tus noches de triunfos de cristal.

Alforja de piel despojada de caricia

en imagen colorada inexistente

Afanes que aliviaron soledades

De absurdas añoranzas

Interrumpiéndome el presente

Condenándome en su fuego.

Señor de la palabra, intachable de día

antorcha desnuda enjaulada de noche

Forjador de las palabras calientes

en el fuego de las entrañas

que arremete las bóvedas.

Manos que dirigen las riendas

de las pasiones coloradas insaciables

Cerebro pensante que muerde con besos

Niño dominante jugueteando con

los pliegues de mi bajo vientre

¡Palabras prohibidas del confesionario!

Hoy emblema e insignia sagrada.

¡Miente! Que los muros oscuros

no se cuecen puros en el infierno

Reconoce que naciste acero fundido

y con corazón de piedra encendida.

Elévate hasta que no puedas olvidarme

se mío hasta marcarte en mil vidas

¡Negra, negra mía! Ebrio me decías

¡Devórame completo! ¡Negra!

Y hoy te mutilas león enfebrecido

Llevas en tus manos la paz compungida

del rojo demonio lujurioso.

De viernes prohibido y domingo monaguillo

Arrastra cochero el carruaje del deseo

y no detengas a tus bestias

no las exorcices, trágate el aire inmortal

cabalgándola en la noche de luna llena

en que los espantos de lo prohibido

han ido despidiendo los demonios

Yo te conozco cochero mutilado.

JEM WONG

18.02.2005

Las posiciones a ultranza no nos permiten ver la complejidad, ni la reflexión profunda.

Vivimos surfeando para no caer en el escenario tempestuoso de un mundo cambiante y caótico.

(Autor desconocido por todos menos por mí)

(Jemwong)