Wisława Szymborska

Cayendo del cielo

Pasa la magia, aunque las grandes fuerzas

tal como eran, siguen siendo. En las noches más bellas

no sabes si es una estrella u otra cosa lo que cae.

No sabes si es eso lo que tiene que caer.

Y no sabes si es oportuno entretenerse en deseos,

¿adivinar? ¿Por un malentendido estelar?

¿Cómo si constantemente nuestro siglo fuera el no-veinte?

Qué brillo te juramenta: soy una chispa, una chispa auténtica,

una chispa de la cola de un cometa,

nada salvo una chispa, que suavemente desaparece,

no soy yo la que cae en los periódicos de mañana,

es esa otra, justo a mi lado, que tiene su motor estropeado.