Wisława Szymborska

Sin Título

Tanto se quedaron solos,

tanto sin una palabra,

en tal desamor, que merecen un milagro:

un rayo desde una nube alta, convertirse en piedra.

Dos millones de ejemplares de la mitología griega

y no hay salvación para ella ni tampoco para él.

 

Si cuando al menos alguien estuviera de pie junto a la puerta,

si cualquier cosa apareciera, cuando menos un momento,

y desapareciera:

algo triste, optimista, de donde sea, de ningún lado,

que provocara risa o miedo.

 

Pero no va a pasar nada. Ninguna espontánea

improbabilidad. Como en un drama burgués,

será una separación correcta hasta el final,

no honrada ni siquiera por un hoyo en el cielo.

 

En el fondo inconmovible de la pared,

deplorables el uno para el otro,

están de pie frente al espejo, en el que

no hay nada más que un consecuente reflejo.

 

Nada más que el reflejo de dos cuerpos.

La materia está todo el tiempo en guardia.

Que larga, amplia y alta,

en la tierra, en el cielo y a los lados

cuida de los destinos innatos,

como si por un corzo inesperados en este cuarto

tuviera que desplomarse el universo.


Wislawa Szymborska de Sal [1962]

Trad.  Gerardo Beltrán y Abel A. Murcia