Olmedas (en preparación)

Hábitat 92A0. Bosques de galería de Salix alba y Populus alba

El bosque de ribera

Las comunidades riparias menos exigentes en cuanto a la humedad freática son las olmedas de Ulmus minor. Se asientan sobre suelos profundos y a salvo de las inundaciones, a mayor altura y distancia de las láminas de agua que las alamedas. Estas comunidades también han sido incluidas en el Hábitat 92A0 bajo la asociación denominada Aro italici-Ulmetum minoris Rivas-Martínez ex G. López 1976.

A medida que nos elevamos, disminuye la humedad edáfica y solo pueden asentarse las formaciones esclerófilas mediterráneas que, pueden pasar el verano sin el aporte de las lluvias que, en el caso de las comunidades riparias, es compensado por la humedad edáfica. Para poder sobrevivir en años con condiciones hídricas especialmente desfavorables, los olmos, puede perder gran parte de sus hojas reduciendo notablemente la transpiración.

El olmo o negrillo, es fácilmente reconocible porque sus hojas son asimétricas (esto se da en todos los olmos y almez), mostrando una mitad del limbo, en la base, más desarrollada que la otra. Tienen el limbo muy áspero al tacto, debido a las rugosidades del mismo, pues carece de pilosidad. Hace tiempo que se viene plantando mucho el Olmo de siberia (Ulmus pumila), éste se asilvestra con facilidad y es fácil verle además de en calles, parques y jardines, en bordes de caminos y carreteras. Se distingue con facilidad del negrillo, porque tiene largas ramillas que se arquean hacia el suelo y por la disposición en un solo plano de sus hojas, por regla general no alcanza el porte de nuestro olmo.

Las olmedas ocupaban la franja de las vegas de tierras fértiles y profundas que, de sufrir inundaciones, lo hacían de tarde en tarde. Desgraciadamente para el negrillo estas son las mejores tierras para la agricultura, por lo que la mayor parte de las olmedas fueran sustituidas por los cultivos de vega. A la destrucción de las olmedas que quedaban, ha contribuido la galeruca (Galerucella, luteola), que excava en su tronco y come sus hojas dejándolo muy débil. Después es atacado por el hongo Ceratocistis ulmi que, ciega los vasos por los que corre la savia provocando la muerte del olmo.

Olmeda adehesada en Casa Eulogio, Rivas

Hoy quedan muy pocas olmedas, la mayor parte de los olmos que vemos son de la especie Ulmus pumila, cuando entran en contacto con el negrillo se hibridan con facilidad y tenemos individuos con caracteres intermedios. En el camino que va de Gózquez de Abajo a la Boyeriza, en Martín, tenemos una olmeda de negrillo, muchos de los olmos que están entre Gózquez y Martín son híbridos u olmos de Siberia, los menos. La olmeda de la que hablamos, está afectada por la grafiosis, cuando alcanzan cierto porte los árboles, son atacados y mueren, aunque alcanzan tallas que superan con facilidad los 10 m. La regeneración es buena y parece que se mantiene una olmeda muy cerrada de individuos relativamente jóvenes.

Tenemos otra olmeda en el municipio de Martín, en la Casa de compuertas, entre La Boyeriza y la Presa del Rey, esta de mayor extensión que la de Gózquez de Abajo, también afectada por la grafiosis, aunque muy cerrada y con buena regeneración.

En Casa Eulogio, en el término de Rivas, hay una olmeda adehesada. Por el porte de los árboles, parece inmune a la enfermedad que sufren el resto de los olmos, pero ha sufrido un pastoreo muy intenso con lo que el suelo está intensamente nitrifricado y compactado, debilitándose los árboles. Debido al pastoreo y a los factores anteriormente mencionados, no hay regeneración. Afortunadamente parece que han retirado las vacas.

Otro bosque de olmos lo tenemos en Perales del Río, en el término de Getafe, con numerosos individuos de la variedad vulgaris, además de la típica, también parecen resistir la enfermedad y está colonizando los suelos colindantes abandonados por la agricultura. Aquí parece haber buena regeneración de semilla por la distancia a la que están los individuos jóvenes de los padres.

Para la multiplicación en vivero, no utilizamos semillas de la olmeda de Gózquez, por la presencia en las proximidades de olmos de Siberia, que con toda probabilidad darán en gran medida individuos híbridos. Tampoco cogemos semillas de los olmos de la Casa de compuertas, pues parecen afectados por la grafiosis. Las semillas que empleamos son de Casa Eulogio y de Perales del Río. Proyectamos plantar algunos pies, procedentes de semilla de Rivas y Perales, en las olmedas del municipio de Martín, a ver si poco a poco conseguimos unas olmedas sanas.

Olmeda, en la Casa de Compuertas. Martín

Olmeda en Perales del Río, Getafe. Hay buena regeneración y se ven muchos pies jóvenes