Este proyecto surge como respuesta y desarrollo práctico a la charla impartida por la artista y arquitecta Guadalupe Cantarero, centrada en la influencia de la luz en la percepción del espacio. Su intervención nos permitió comprender cómo los fenómenos lumínicos, más allá de su función técnica, afectan a la experiencia sensorial y emocional de los lugares que habitamos.
A partir de esta inspiración, el alumnado de la asignatura de Volumen trabajó en un proyecto titulado “Luz, materia y percepción”, cuyo objetivo era diseñar y construir artefactos lumínicos capaces de generar reflejos, transparencias y proyecciones abstractas que transformaran el espacio a través de la luz. No se trataba de diseñar lámparas funcionales, sino de explorar las posibilidades expresivas de la luz y la sombra en diálogo con diferentes materiales.
Los estudiantes investigaron las propiedades de materiales translúcidos, opacos, texturados o reflectantes (como acetato, metacrilato, celofán, papel vegetal, espejos, mallas metálicas, entre otros) y su comportamiento ante distintas fuentes de luz. Posteriormente, idearon estructuras escultóricas o dispositivos abstractos que, al ser iluminados, generaran atmósferas cambiantes a través del juego entre luz, materia y forma.
Cada artefacto fue concebido como una pieza sensorial, pensada para provocar una reacción emocional, perceptiva o contemplativa en el espectador, explorando conceptos como la transparencia, la vibración lumínica, la proyección o la superposición de sombras. La dimensión abstracta de las piezas permitió que la luz se convirtiera en el auténtico protagonista, actuando como material escultórico intangible.
El proceso culminó en una instalación colectiva, en la que los artefactos fueron dispuestos en un espacio oscuro y activados con luces dirigidas, generando una experiencia envolvente. Esta práctica no solo permitió consolidar aprendizajes sobre el volumen, la composición espacial o la relación entre forma y función, sino que también conectó con los principios del proyecto TECMAA, fomentando una mirada consciente y crítica hacia el entorno, y explorando cómo las condiciones sensoriales de los espacios influyen en nuestro bienestar y creatividad.