Células gliales

El Sistema Nervioso no sólo está formado de neuronas. Junto con las neuronas, que son la unidad funcional del SN, encontramos las células gliales , también conocidas como neuroglia o glía.

El tejido glial o neuroglia fue descrito por primera vez en 1859 por el patólogo Rudolf Virchow, quien lo caracterizó como un tipo de cola o pegamento nervioso funcional para las formas de vida; para él, las células gliales eran más bien elementos estáticos sin una función relevante. Fue Santiago Ramón y Cajal en 1891 quien descubrió las células gliales, diferenciándolas de las neuronas e identificándolas claramente como parte del tejido nervioso.

A pesar de ser consideradas básicamente células de sostén del tejido nervioso, existe una dependencia funcional muy importante entre neuronas y células gliales. De hecho, cumplen un rol fundamental durante el desarrollo del sistema nervioso, ya que ellas son el sustrato físico para la migración neuronal. También tienen una importante función trófica y metabólica activa, permitiendo la comunicación e integración de las redes neuronales. Cada neurona presenta un recubrimiento glial complementario a sus interacciones con otras neuronas, de manera que solo se rompe el entramado glial para dar paso a las sinapsis. De este modo, las células gliales parecen tener un rol fundamental en la comunicación neuronal.

Entre sus funciones principales podemos destacar:

  • Sostén y nutrición (en el sistema nervioso no existe tejido conjuntivo). Debido a que son menos diferenciadas que las neuronas, son las que se encargan de la reparación y regeneración de las lesiones del sistema nervioso.

  • Son, igualmente, fundamentales en el desarrollo de las redes neuronales desde las fases embrionarias, pues desempeñan el papel de guía y control de las migraciones neuronales en las primeras fases de desarrollo; asimismo, establecen la regulación bioquímica del crecimiento y desarrollo de los axones y dendritas.

  • También, son las encargadas de servir de aislante en los tejidos nerviosos, al conformar las vainas de mielina que protegen y aíslan los axones de las neuronas.

  • Mantienen las condiciones homeostáticas (oxígeno y nutrientes) y regulan las funciones metabólicas del tejido nervioso, además de proteger físicamente las neuronas del resto de tejidos y de posibles elementos patógenos.

Aunque por mucho tiempo se consideró a las células gliales como elementos pasivos en la actividad nerviosa, trabajos recientes demuestran que son participantes activas de la transmisión sináptica, actuando como reguladoras de los neurotransmisores (liberando factores como ATP y sus propios neurotransmisores). Además, las células gliales parecen conformar redes “paralelas” con conexiones sinápticas propias.

Tipos de células gliales.

Astrocitos

Son las células gliales más abundantes y se denominan de esta manera por su forma estrellada.

Se encuentran en el cerebro y la médula espinal. Forman la barrera hematoencefálica cuya función es restringir las sustancias que pueden ingresar al cerebro. Los astrocitos protoplasmáticos se encuentran en la sustancia gris de la corteza cerebral, mientras que los astrocitos fibrosos se encuentran en la sustancia blanca del cerebro. Otras funciones de los astrocitos incluyen el almacenamiento de glucógeno, la provisión de nutrientes, la regulación de la concentración de iones y la reparación de neuronas.

Células ependimarias

Las células ependimarias son células especializadas que recubren los ventrículos cerebrales y el canal central de la médula espinal. Se encuentran dentro del plexo coroideo de las meninges. Estas células ciliadas rodean los capilares del plexo coroideo y forman líquido cefalorraquídeo.

Forman el revestimiento epitelial de los ventrículos del cerebro y el canal central de la médula espinal. Influyen también en la dirección del flujo cerebroespinal, la distribución de neurotransmisores y otros mensajeros para las neuronas

Microglia

Las microglías son células extremadamente pequeñas del sistema nervioso central que eliminan los desechos celulares y protegen contra microorganismos (bacterias, virus, parásitos, etc.). Se piensa que las microglías son macrófagos, un tipo de glóbulo blanco que protege contra la materia extraña. También ayudan a reducir la inflamación mediante la liberación de citoquinas antiinflamatorias.

Oligodendrocitos

Los oligodendrocitos son estructuras del sistema nervioso central que envuelven algunos axones neuronales para formar una capa aislante conocida como vaina de mielina. La vaina de mielina, compuesta de lípidos y proteínas, funciona como un aislante eléctrico de los axones y promueve una conducción más eficiente de los impulsos nerviosos.

Células de Schwann

En el sistema nervioso periférico (SNP), las células de Schwann hacen las mismas funciones que las diferentes células gliales del SNC. Estas funciones son las siguientes:

  • Se sitúan entre las neuronas.

  • Fagocitan los restos en el caso de una lesión en los nervios periféricos.

  • Forman la mielina alrededor de los axones del SNP.