Parte 1

La cosecha de almas

El planeta Tierra tuvo una explosión demográfica con el “descubrimiento” de la agricultura y el fin de la vida nómada, bien dijo un dios del pasado después del diluvio: “Creced, multiplicaos, llenad la tierra y sometedla…” (Gn 1,28). Este mandato fue creado para que todos los rincones del planeta se llenaran del único ser consciente de su individualidad (a diferencia de los animales). La explosión demográfica se hizo exponencial después de la Revolución Industrial con la invención de las máquinas que dieron granos por montones con poca mano de obra. Este problema se hizo todavía más grave en estas ultimas décadas cuando se dijo por medio de la ciencia que debíamos comer más granos para ser personas saludables, lo que tuvo como consecuencia que la gente pudiera mantener a muchos hijos con poco presupuesto.

Este plan no es algo que hayan inventado los Illuminati, o las fuerzas obscuras del SGS, sino que es un plan de miles de años donde los Dioses antiguos vinieron a sembrar la vida, y a volver para recibir una cosecha de esta humanidad. Existen muchas razas de extraterrestres que tienen diferentes agendas y planes con los seres humanos del planeta. El ser humano no es un animal, no proviene del mono como tal, tenemos genética de homínidos antropoides ancestrales en un porcentaje mínimo, pero somos una copia en miniatura de esos Dioses del pasado. El nombre de Dioses se aplica para dar un entendimiento a la mitología del pasado ya que en todas las culturas del mundo se manejo de esta manera.

Al humano se le diseño para que fuera genéticamente sumiso a los dioses, se le dejó solamente el 5% de su capacidad cerebral, se le quitó la genética para ser vegetariano y por el contrario se le hizo dependiente de la carne ya que los dioses controlaban la cantidad de animales y el clima (como hasta la fecha), también se le dio el pecado original que involucra los contratos y chip astrales con estas razas. También se le dio una corta cantidad de vida, de menos de 100 años, para que no pudieran nunca llegar a hacerse sabios y descubrir la verdad, se le introdujeron enfermedades de control y dolencias ligadas a los portales que los chips astrales causan. Por último al ser humano se le conectó a la malla de frecuencia que impide el recuerdo de vidas pasadas.

Todo este proceso no es para algo puramente físico, pues las teorías principales fueron que los Annunakis nos crearon para ser mineros y extraer oro, y si quizás esa fue una de las actividades que se realizaron en el pasado (hace más de 600,000 años), pero la finalidad máxima era la de ser un lugar de extracción genética y de vampirización de emociones por parte de los seres extraterrestres que son capaces de sentir este tipo de sentimientos. La extracción de adrenocromo, ectoplasma, sangre, carne y de hibridación genética son parte de la agenda de estos seres, que no son capaces de conectar con el Cristo Cósmico, ya que ellos provienen de un ramal muy diferente al de Micah (Arcángel Miguel) que fue el diseñador y aportador de la raza humana en miles de sistemas de este Universo de universos llamado Nebadón.