European Rally H.O.G. (Lago di Garda)

European Rally H.O.G. (Lago di Garda)

Fecha : 24-10-2008

Autor : Sergio, Sobakero

Cuando dije a Valentin que contase conmigo, fue a sabiendas de mi inapetencia por todos estos eventos de marca que con la ayuda de un sofisticado marketing consiguen crear hombres-anuncio autoconvencidos de poseer un autentico espíritu de libertad a golpe de tarjeta.

Tampoco era muy de mi apetencia visitar Italia, siempre me pareció un país simpático y muy parecido al nuestro, pero ya lo había visitado por trabajo o vacaciones.

Incluso una semana antes de emprender el viaje, estuve a punto de dejarlo, ya que un desafortunado encuentro con unos matones metidos a moteros de pacotilla, en una concentración, me dio que pensar sobre cual seria el futuro de los motoristas, estos integrantes de “Alien Vizcaya” consiguieron hacerme ver por un momento, lo peor del actual mundo de la moto, un comportamiento que supongo mas habitual en los afters, los clubs de alterne o Nápoles.

Pero el viaje es el viaje, y viajar por viajar, en moto, acompañado de amigos motoristas es algo que no se puede dejar escapar, así es que una vez mas nos pusimos en marcha utilizando el evento como excusa para emprender este fabuloso viaje.

En cuanto llegamos a Barcelona y entramos en el puerto, recogimos a Nacho, un asturiano que trabaja en Lanzarote recogiendo gente por las carreteras con una U.V.I. móvil, Nacho venia de Algeciras tras su travesía en ferry con su CBR600F limitada y con una mochila más grande que él.

En el muelle mismo ya conocimos a Lucca y su preciosa Sportster, un Veneciano tan despistado y buena persona como desastre cocinando.

Al rato aparecieron Francisco y Marcela. Este tarraconense traía una bonita Heritage y Marcela una baraja de cartas de su ciudad, México. Así que también nos liamos con ellos.

Aun no contábamos mas de 600 Km y ya teníamos un lió que durante la travesía no pudo mas que crecer, empezando por cambiar de camarote a dos camioneros por el veneciano y por mí.

La noche en el Mediterráneo, resultaba interesante, tomando orujos para el mareo mientras Marcela me echaba las cartas, y viendo como Lucca discutía de cocina y accidentes con Nacho en un disastrosso italiano. Mientras tanto, Francisco y Valentín hablaban de la puñetera crisis.

Seguir a Lucca desde Génova a Desenzano di Garda por la autostrada es lo más peligroso que se puede hacer en moto, así es que Francisco tuvo que tomar las riendas y coger ritmo a la italiana con lo que pronto perdimos al italiano. Mientras reapostábamos, lo vimos pasar “al corte”.

Después de despedirnos de Francisco y Marcela estábamos siguiendo el scooter de un taskero, que aburrido de intentar indicarnos, amablemente nos llevo al Hotel, allí nos volvimos a encontrar a Lucca que nos había visto salir del bar y nos siguió hasta el Hotel.

La noche había caído y por supuesto el veneciano no tenia hotel, así es que lo adoptamos y nos fuimos a agradecer al taskero la indicación, haciendo gasto de cerveza, pizza y carpaccio en abundancia.

Allí nos liamos con Claudio, amigo del taskero y recepcionista de algún hotel de Desenzano, tras invitarnos a unas cervezas y algún limocello le seguimos hasta la concentra, no sin antes tomar otra cosa en su casa.

Cuando llegamos, aquello parecía un velatorio, y tras encontrarnos con Francisco y Marcela pensamos que mejor nos tomábamos una copa én los bares que rodeaban el evento.

El balance no estaba mal, lo estábamos pasando muy bien y con motoristas a los que acabábamos de conocer, olvidando el mal trago de la semana anterior y dejando a los matones de “Alien-Vizcaya” como un anacronismo en la memoria.

Cuando salimos del hotel por la mañana me di cuenta de lo bonito que es aquello, realmente el lago de Garda merece el viaje. Encontramos una terraza para desayunar al lado de las motos de camino a Sirmione, que raro, recordaba Italia mas cara y es que el euro nos a hecho más pobres a todos.

Sirmione y su castillo en el centro del lago es visita obligada, así como comer pizza y un rico helado de postre, tome nota de unas termas con muy buen aspecto para algún romántico regalo. Comiendo pizza en el muelle de Sirmione convinimos en montar una cena, ya que teníamos chef italiano y nuestra habitación de hotel tenia dos habitaciones enormes, cocina y comedor en condiciones, organizamos una cena.

Pasamos la tarde viendo todo el montaje del H.O.G., tiendas, motos, bares, demasiado bonito, caro y aburrido, como un decorado, al menos para mi gusto. De esta manera llego el momento de ir al super a comprar provisiones para la cena y visto que nadie se fiaba de los spaghetti de Luca, me encargue del asunto preparando un cenon a base de pasta.

Tras los merecidos

s al chef, fuimos al concierto del evento por aquello de amortizar la entrada del H.O.G. y después a nuestro bar en Desenzano. ME VOY A DORMIR, CONTINUARA....

...Bueno continuo, porque esto hay que escribirlo con calma.

Domingo, 28 de septiembre de 2008.

Tras desayunar y pagar un suplemento por la limpieza de la cocina nos pusimos en marcha en dirección a Venecia, no di opción a Lucca y me puse a la cabeza del grupete, gracias a esto llegamos sin problemas. Allí Lucca nos recompenso y nos busco un hospedaje bueno, bonito, barato, con parking y a 20 metros del autobús a Venecia, así es que pasamos la tarde pateando y haciéndonos fotos con los gondoleros.

Cenando en una pizzería comentamos un encuentro anterior con un italiano que nos hizo saber su simpatía por la España y lo mal que estaba la italia, al salir nos encontramos con un americano con una GS1150 que se me antojo parecido a esos tipos de los documentales de animales para hechar la siesta. Estaba dando la vuelta al mundo y nos hablo la conveniencia de su doble nacionalidad por aquello de viajar por países no simpatizantes con su verdadera nacionalidad.

Lunes, 29 de septiembre de 2008.

Os aseguro que no somos mancos, pero viajar por la autostrada de Venecia a Florencia, sin arcenes, con unos guardarrailes de doble altura, llena de curvas, túneles, lloviendo y sin carril derecho, ya que va lleno de camiones que además no te dejan ver las indicaciones, es algo que hay que vivirlo para saber lo que es.

Hartos de dar vueltas por Florencia para encontrar hospedaje, me puse a preguntar y encontré un carrocero que me indico un piso sin ninguna publicidad, llame por teléfono y en 20 minutos llego Mateo para alquilarnos una habitación enorme en el centro de Florencia al módico precio de 100 euros los tres y parking al lado.

Tras patalear todo Florencia a pie, comprar pan y vino, montamos otro cenon en nuestra habitación.

A la pateada florentina post-cena, Nacho no quiso acompañarnos ya que habia tenido suficientes zapateados para una temporada, supongo que es lo que tiene vivir en una isla pequeña.

Martes, 30 de septiembre de 2008.

En el tramo Florencia-Pisa fue como la seda y no paramos hasta tocar la torre con el neumático delantero, habíamos aprendido incluso con mas velocidad, pitidos y juramentos que el personal local.

Tras la foto de rigor y comprar pan, emprendimos camino a La Specia Como nos cogió un chaparrón, aprovechamos para montar la comida en una gasolinera, una vez mas, creando expectación. Y es que ya son muchas comidas en la cuneta y vamos mas que resabiados.

En La Specia encontramos un hotel por 90 euros, los tres y con parking incluido. Tras el repataleo local, y perder el chuleton de la cena por esperar a Nacho, que se empeño en cortarse el pelo y cuando llegamos sé habia acabado la carne, fuimos a refrescarnos con unas cervezas, pero como en Florencia, la noche en Italia termina a las 22:00h.

Al fin dimos con un bar amablemente atendido por una italiana de unos setenta años que tambien nos comento lo mal que estaba Italia. Al salir nos asaltaron cuatro tipos que se identificaron como policía financiera, algo así coma hacienda.

ME VOY A DORMIR, CONTINUARA...

...SIGUE.

Nos interrogaron sobre las tres cervezas que habíamos tomado, cuanto dinero habíamos pagado, si habíamos cogido o no el ticket. No entendíamos nada de nada.

Parece ser que la anciana había tickado de menos y por ello la montaron un show, que al menos a mi se me antojaba surrealista. Allí dejamos a la señora con lagrimas en los ojos mientras uno de los policías la increpaba, otro redactaba una denuncia, otro vigilaba y el que había sido el cebo tomando un vino mientras estábamos dentro del bar, hablaba por el móvil.

Miércoles, 1 de octubre de 2008.

Tras discutir un rato con el dueño del taller de coches que nos sirvió de parking para las motos la noche anterior, sobre donde sé había fabricado mi 175TS, emprendimos viaje a Génova bajo la lluvia, a pesar de todo decidimos hacer el trayecto por la “strada”, sabiendo los pocos kilómetros separaban La Specia de Génova.

Resulta increíble la inversión en tiempo y esfuerzo que hace falta para moverse por carretera en Italia, con todo esto, el trayecto sembrado de montañas y curvas fue de lo mejor del viaje.

Repostamos en Portofino, allí nos abordo un harlysta de unos sesenta años que se intereso por nuestro viaje y nos indico que el concesionario H-D estaba a unos 50 mts, así es que decidimos hacer una visita y así quitarnos el traje de agua.

Cuando ya nos marchábamos, volvió a aparecer e insistió en invitarnos a un café en la maquina del concesionario, nos hablo de sus viajes por España en moto cuando era joven, de lo bien que le trataron, de lo mal que estaba Italia, fue un café muy interesante, nos despedimos y retomamos carretera hasta el puerto de Génova, en donde montamos la comida y la siesta mientras cargaban los contenedores y llegaban mas harlystas que también hacían tiempo para embarcar.

Después de acabar con el resto de provisiones, nos liamos a cervezas en popa con unos harlystas de Barcelona hasta altas horas, por aquello de evitar el mareo.

Jueves, 2 de octubre de 2008.

Tras tan entretenida travesía, llegamos a Barcelona sobre las 15:30, pero tuvimos que esperar a que descargasen todos los camiones antes de desembarcar las motos, con lo que perdimos mucho tiempo y tuvimos que hacer noche en Casetas, al lado de Zaragoza, donde recordaba un hostal en donde comimos en “Perros del Ebro 2001” y en donde nos trataron muy bien.

Estando en casa, no pudimos evitar él engullirnos unas costillas bien regadas con Rioja para terminar con unos merecidos cubatas y rememorar anécdotas de viajes pasados.

Viernes, 3 de octubre de 2008.

Nos despedimos en Haro, ya que el destino de mis compañeros era Gijón, quedando con Valentín en “Argüís 08” y con los dos, en la “Internacional Vulcan 2009” en Gales (GB). donde recordaremos este viaje, en el que conocimos algo de Italia, mas allá de sus monumentos y a algunos motoristas.

FIN