Maldito Dylan Thomas

Y la muerte no tendrá dominio

No vencerá la muerte

cuando todos los hombres hayan muerto

y todos sean ya un solo hombre,

que habitará en el viento y en la luz de la noche,

y los huesos, deshechos en ceniza,

sean polvo de estrellas;

cuando las tinieblas

y del fondo del mar asciendan a la luz;

cuando ya, sin amantes, sea eterno el amor,

no vencerá la muerte.


No temerán la muerte

los que yacen, hundidos en el mar,

mecidos en su fondo y su calma;

angustiados, exhaustos,

martirizados, pero no vencidos.

Y si tuvieron fe y también dudas,

y su pureza fue manchada por el mal,

en el final de todo tendrán paz,

y no les vencerá la muerte.


No vencerá la muerte,

aunque ya no se escuchen los gritos de gaviotas,

ni el rumor de las olas en la playa;

aunque mueran las flores y sea inútil la lluvia,

en la tierra aún fértil de los muertos

alentarán pequeñas margaritas

hasta que el Sol sucumba.

Y nunca vencerá la muerte.


Dylan Thomas  en Muertes y entradas [1946]