Privacidad en el ciberespacio

¿Existe realmente la privacidad en la Red?

Mucha de la información que se encuentra hoy en internet es sumamente vulnerable. Es habitual compartir por medio de redes sociales lo que estamos haciendo, nuestra ubicación, amigos, lugares a los que frecuentemente asistimos, etc. Podemos ingenuamente suponer que estas imágenes son sólo vistas por amigos o seguidores.

¿Qué uso hacen otros de mis fotografías? Cuando publicamos algo en la red deja de ser íntimo. ¿Deja de pertenecernos? ¿Podemos recuperarlo y borrarlo?

Como habitantes del ciberespacio y usuarios de redes sociales, es indispensable ser conscientes de que la privacidad es algo personal que no debe exponerse a todo el mundo. Antes de publicar una imagen que consideramos inofensiva, evaluemos el impacto presente y futuro que puede tener la misma bajo circunstancias diferentes. El mismo cuidado, reparo y análisis es necesario para con la información que compartimos y los comentarios que realizamos. Es un hecho constatado que la Red ha comprometido la privacidad de sus usuarios.

¿Cómo proteger la privacidad en el ciberespacio?

1. Establecer y usar adecuadamente las contraseñas.

Toda contraseña segura:

  • debe tener al menos 8 caracteres

  • no puede ser un dato fácil de adivinar (nombre, fecha de nacimiento, etc.)

  • tiene que incluir letras mayúsculas y minúsculas

  • debe incluir números y letras

  • no debe dejarse guardada en los equipos sino introducirse cada vez que se use

  • es un secreto que no debería compartirse con nadie

  • debe ser cambiada de vez en cuando

  • tiene que ser diferente para cada servicio, red social o app.

Contraseña segura

2. Conocer y configurar de manera precisa opciones de privacidad.

3. Proteger datos personales.

Información precisa como direcciones, ubicaciones, horarios, teléfonos, números de identificación personal, nombres de usuarios y contraseñas deben preservarse.

4. Proteger personalmente los datos.

Los datos, aunque en muy diferentes formas (imágenes, informaciones…), suelen tener origen en uno mismo. Ese es el primer filtro. Decimos demasiadas cosas de nosotros mismos sin reflexionar sobre su efecto en diferentes momentos o contextos.

La cita

Caperucita 2.0

Adivino Dave

5. Mantener una actitud proactiva en defensa de los datos propios.

En las redes sociales son demasiados los datos que algunas personas aportan sobre las demás, incluso de manera compulsiva y negligente. Puede ser útil informar sobre nuestro criterio al respecto, supervisar lo que se publica de nosotros y ejercer, si es necesario, nuestro derecho a eliminarlos. El etiquetado en las fotografías es un ejemplo muy ilustrativo.


Etiquetas sin permiso