¿Por qué integrar el lenguaje audiovisual en el aprendizaje?

El lenguaje audiovisual es fundamental en nuestra sociedad contemporánea y forma parte de los mensajes que diariamente intercambiamos. La interconexión ocupa un lugar central en nuestra vida e incide fuertemente en los vínculos; la línea difusa entre real y virtual define gran parte de nuestras actitudes y constituye territorios y roles en esta cultura atravesada por la multiplicación exponencial de las miradas en constante movimiento mientras se transforman el adentro y el entorno al mismo tiempo. La construcción de las subjetividades usa diversos soportes y formatos que se vuelven códigos y definen pertenencias.


Ya no está en duda cómo se relacionan las nuevas generaciones con las tecnologías de la comunicación. Profusamente, gran cantidad de horas diarias, poca presencia de adultos, como entretenimiento, consumiendo materiales realizados por otros a quienes no confiaríamos la responsabilidad de educar.

A través de esta metodología asumimos la tarea de realizar un aporte pedagógico acerca de estas temáticas que aún no cuentan con un desarrollo curricular propio en el sistema formal.

Estos saberes que están en construcción, nos permiten visibilizar y compartir lo que hacemos en las aulas, fortalecen nuestros lazos como comunidad educativa y ponen en valor nuestras producciones. En entornos cuidados se promueve y ejercita, de esta manera, la ciudadanía digital.


Los consumos culturales de niños, niñas, adolescentes y jóvenes están intrínsecamente ligados a lo audiovisual en el contexto de la cultura digital de la que son parte. El ciberespacio es también un lugar que ellos habitan como ciudadanos en busca de diversión, desarrollo y autonomía.

La implementación de una transformación en el espacio escolar supone un cambio significativo en los procesos de enseñanza y aprendizaje promoviendo el diálogo de saberes, la interdisciplinariedad y los múltiples lenguajes.

El razonamiento lineal, la información textual y el pensamiento analítico dejan de ser predominantes a la hora de aprender en la escuela. El paradigma científico no es la única fuente válida en la construcción de conocimiento.

El cuerpo, los sentidos, la experiencia y las percepciones se ponen en juego para llevar adelante aprendizajes que contemplan la complejidad de lo social potenciando el pensamiento crítico y teniendo como propósito fundamental la emancipación, esto es la transformación de la sociedad y de los propios sujetos escolares que aprenden y que enseñan mientras ejercitan su autonomía. De esta manera se propician nuevas y mejores condiciones para el logro de aprendizajes relevantes y significativos.

Diagnóstico y objetivos

Dado que los niños, niñas, adolescentes y jóvenes consumen gran variedad de imágenes, palabras y sonidos a través de distintos formatos, medios y soportes, y que este consumo se produce muchas veces sin la presencia de adultos y alejado de fines pedagógicos, se propuso integrar esta realidad a una propuesta articulada que incorpore metodologías, abordajes y lógicas propias del lenguaje audiovisual con intencionalidad, progresión y sistematicidad.


Promover calidad educativa y garantizar también la inclusión social requiere, sin dudas, de integrar las prácticas contemporáneas de la cultura audiovisual a las escuelas. Los cambios socioculturales que necesita integrar la escuela están relacionados con las TIC en la cultura de la imagen y también con prácticas comunicacionales que definen los modos de construcción del conocimiento y la circulación de saberes.


Las innovaciones educativas suponen llevar adelante prácticas que perforen el formato escolar a través del despliegue de otros tiempos, espacios, agrupamientos, modos de conocer, transitar y construir saberes. Suponen la implementación de una transformación, de un cambio significativo en los procesos de enseñanza y de aprendizaje promoviendo el diálogo de saberes, la interdisciplinariedad y los múltiples lenguajes.


Elaborar propuestas de aprendizaje debe contemplar también como objetivo integrar el ciberespacio en las prácticas de enseñanza y aprendizaje, en tanto sitio fundamental de encuentro, colaboración y creación de redes.

Afrontar el desafío de habitar y ser parte de la cultura digital implica desarrollar habilidades para ser ciudadanos plenos en la sociedad actual.

Esta propuesta pedagógica plantea intervenir con acciones referidas y focalizadas en las potencialidades de los lenguajes y soportes digitales para el aprendizaje:

  • Estimular los usos socialmente positivos de la Red. Percibir al medio como una herramienta de encuentro, empoderamiento, participación e intervención enriquecedora tanto en el plano individual como colectivo.

  • Crear dinámicas que canalicen el sentimiento de pertenencia al grupo y la colaboración en torno a estos usos.

  • Situar a los estudiantes como miembros reflexivos y activos de las dinámicas con las que conviven. Deben ser y sentirse motores del proceso de construcción de su propia voz como ciudadanos digitales.

  • Aumentar entre los adultos el conocimiento de la cultura digital, de los usos actuales de la Red por parte de los jóvenes, así como de las aplicaciones más populares. Para educar ciudadanos digitales responsables y con voz propia no es imprescindible saber de tecnología. Es imprescindible conocer los usos sociales y la propia realidad digital.

  • Apropiarse del lenguaje en su dimensión expresiva y como herramienta pedagógica de diversas áreas disciplinares.

  • Ubicar a la escuela en su rol de espacio de diálogo social no disociado de los modos de representación con el cual los niños, niñas y jóvenes construyen subjetividades.

  • Asumir una reflexión crítica sobre las imágenes y realizaciones audiovisuales que consumen día a día, en nuestra sociedad (en todos los formatos y soportes, desde la televisión a internet).

  • Adquirir habilidades necesarias para que los estudiantes sean usuarios reflexivos, responsables y protagonistas en los entornos tecnológicos actuales.

  • Realizar sus propios contenidos audiovisuales transformándose en prosumidores.

  • Sociabilizar las producciones audiovisuales tanto entre los propios protagonistas del sistema educativo (estudiantes y docentes), como con la sociedad en general, a través de las redes sociales e institucionales que den cuenta de estos procesos en construcción.

Cada una de estas acciones integran la propuesta metodológica Alfabetización Audiovisual buscando desmontar la mirada ingenua sobre los consumos culturales y promover la reflexión crítica, desocultando las posibilidades que brinda el lenguaje audiovisual como recurso pedagógico.