26 de abril del 2022
26 de abril del 2022
La ansiedad genera que la persona padezca síntomas de aprehensión, angustia por percibir un entorno de incertidumbre y poco control para manejar sus efectos nocivos y como consecuencia, se acompaña de tensión muscular y emocional por considerar que hay una amenaza latente, ya sea real o imaginaria.
La ansiedad laboral es un estado anímico de inquietud emocional que limita nuestras capacidad para trabajar y que se produce sólo en un entorno laboral.
Definición
La ansiedad laboral es un rasgo característico momentáneo de un reto laboral o cambio organizacional, pero si se da de forma permanente puede ser causa de que se trabaja en un entorno sumamente conflictivo, con un mal manejo estratégico y un liderazgo deficiente, por lo que es relevante que identifiques las causas, las cuales pueden tener su origen en diversos factores como lo son el tener un líder estresante, padecer de acoso laboral o abuso sexual en el trabajo, pasar por largas jornadas, tener alta carga de trabajo, percepción salarial baja que no alcanza a cubrir las necesidades básicas, miedo a perder el trabajo, mala relación entre compañeros, dificultad para jerarquizar tareas, tener muchos pendientes con poco tiempo para cumplirlos que obliga al trabajador a llevarse trabajo a casa, impidiendo con ello, que tenga tiempos de descanso para su recuperación física y mental.
Preocupación
Inseguridad
Miedo o temor a perder el trabajo
Miedo a equivocarse
Dificultad para concentrarse
Dolores de cabeza, estómago, colon irritable.
Dificultades respiratorias
Mareo y náuseas
Taquicardia
Cansancio o fatiga
Dificultad para dormir.
Se parte de la solución.
Analiza que factores dentro de desempeño puedes mejorar para reducir el nivel de ansiedad, como lo es el eliminar actividades que no aportan nada a tu trabajo y si te quitan el tiempo, cómo revisar redes sociales, escuchar chismes o comentarios sin sustento lógico, observar que hacen los demás, hacer juicios sobre situaciones que no tienes claro o imaginar situaciones catastróficas que sólo te alteran emocionalmente. Otra opción es el uso de herramientas como la agenda, jerarquizar tareas, asignar tiempos precisos para el desarrollo de las funciones o incluso analizar tu actitud ante la presión, porque quizá no sea el entorno laboral el que genere la ansiedad, sino que se deba a una respuesta inadecuada de tus creencias ante el trabajo.
Habla con tu jefe inmediato para que juntos prioricen tareas y lleguen a acuerdos, aclarando muy bien los objetivos de tu desempeño.
Si la cultura laboral es en sí tóxica y con poca posibilidad de externar puntos de vista para solucionar problemas, quizá sea necesario tomar la decisión de cambiar de trabajo antes de que los daños en tu salud física y emocional sean irreversibles.
Si por el momento no puedes contar con el apoyo de la organización para un cambio en el ambiente laboral y coordinar mejor los tiempos de las entregas y cumplimiento de objetivos, entonces prioriza que tareas darás cumplimiento en función de tu capacidad, de tus responsabilidades del puesto y de la urgencia de los retos a cumplir, tomando en cuenta que lo principal es tu salud, ya que si no estás bien, colapsarás y no podrás avanzar con tu trabajo, perdiendo no sólo tu salud y el trabajo, también perderás la posibilidad de salir adelante con tus compromisos de pago y apoyo a tus dependientes económicos. Así que sólo tú puedes decidir por lo mejor para ti y los tuyos.