18 de Noviembre del 2022
18 de Noviembre del 2022
El consumismo siempre ha existido en nuestra sociedad y afecta de a la gran mayoría de las personas, especialmente cuando se trata de rebajas o dias especiales como Navidad. Sin embargo, cuando nos enfrentamos a un problema de adicción al consumo debemos prestar atención a la distinción.
Consumir no es malo, pues lo hacemos para cubrir nuestras necesidades o de manera lúdica, el problema es cuando hay una pérdida de control sobre el impulso de comprar, llegando a convertirse enn una obsesión que ocupa gran parte del pensamiento de quien lo padece. Existe un alto componente de ansiedad; por lo tanto es un Problema de origen emocional o psicológico en el que se proyectan fallas emocionales o insatisfacción con los bienes adquiridos.
“La locura del consumismo son fin, nos envia en un ganso salvaje a la persecusión de la felicidad a través del materialismo”.
Bryant McGill
Pasar demasiado tiempo pensando en productos o servicios que se desean.
Sentir el deseo irrefrenable de comprar cada vez que se tiene una mala experiencia, cuando se tiene el ánimo bajo o se sienten emociones negativas.
Experimentar una gratificación inmediata al comprar que da paso a un sentimiento de insatisfacción.
Sentir culpabilidad por gastar más dinero del que se debe.
Debes contactar con un profesional y prestar la adecuada atención a esta patología para identificar su origen, estas son algunas acciones que pueden ayudarte:
Llevar siempre el dinero justo cuando se sale de casa.
Tener establecido un presupuesto.
Saber de antemano lo que se va a comprar y por qué.
Delegar la propia tarjeta de crédito a alguien cercano cuando se es consiente de que existe una pérdida de control importante frente a las compras.