Textos encerrados

Escribir para escapar...

Este es el truco que te ofrecemos las Albas de Lengua para salir de casa.

Mira los vídeos, lee e inspírate.

DIARIO DE ANNE FRANK

Fragmento

Viernes, 12 de junio de 1942

Espero poder confiártelo todo como aún no lo he podido hacer con nadie, y espero que seas para mí un gran apoyo.

Domingo, 14 de junio de 1942

Lo mejor será que empiece desde el momento en que te recibí, o sea, cuando te vi en la mesa de los regalos de cumpleaños (porque también presencié el momento de la compra, pero eso no cuenta).

El viernes 12 de junio, a las seis de la mañana ya me había despertado, lo que se entiende, ya que era mi cumpleaños. Pero a las seis todavía no me dejan levantarme, de modo que tuve que contener mi curiosidad hasta las siete menos cuarto. Entonces ya no pude más: me levanté y me fui al comedor, donde Moortje,1 el gato, me recibió haciéndome carantoñas.

Poco después de las siete fui a saludar a papá y mamá, y luego al salón, a desenvolver los regalos; lo primero que vi fuiste tú, y quizá hayas sido uno de mis regalos más bonitos. Luego un ramo de rosas y dos ramas de peonías. Papá y mamá me regalaron una blusa azul, un juego de mesa, una botella de zumo de uva que a mi entender sabe un poco a vino (¿acaso el vino no se hace con uvas?), un rompecabezas, un tarro de crema, un billete de 2,50 florines y un vale para comprarme dos libros. Luego me regalaron otro libro, La cámara oscura, de Hildebrand (pero como Margot ya lo tiene he ido a cambiarlo), una bandeja de galletas caseras (hechas por mí misma, porque últimamente se me da muy bien eso de hacer galletas), muchos dulces y una tarta de fresas hecha por mamá. También una carta de la abuela, que ha llegado justo a tiempo; pero eso, naturalmente, ha sido casualidad.

FASE 1 DEL PROYECTO. ENTREGA: 30 DE ABRIL

A.- CONTESTA A ESTAS PREGUNTAS DESPUÉS DE VER LOS VÍDEOS Y LEER EL FRAGMENTO

  1. ¿Cuándo y dónde ocurre la historia de Ana Frank?
  2. ¿Por qué empieza a escribir un diario?
  3. ¿Qué problema ocurre después, por qué está encerrada Ana?
  4. ¿Qué hace durante su encierro?
  5. ¿Se soluciona el problema?
  6. ¿Qué problema tenemos en la actualidad, por qué estamos en casa?
  7. ¿Cómo crees que se va a solucionar esta situación?

B.- CREACIÓN LITERARIA ¿TE ANIMAS CON EL DIARIO?

Lee el texto de ejemplo y escribe una página de tu diario* con estilo literario en la que cuentes cómo estás viviendo la experiencia de no poder salir de casa (que sensación tienes, qué haces para entretenerte, qué echas de menos...).

*RECUERDA: en el libro de texto (unidad 5, página 103) está la teoría sobre el diario.

CUIDA LA PRESENTACIÓN, USA UN VOCABULARIO RICO Y REVISA LA ORTOGRAFÍA.

¿Te apetece leer el libro entero?

Busca en el apartado de Lecturas en el confinamiento en este blog para acceder al texto completo.

VIERNES 24 DE ABRIL DE 2020

Querido diario:

Hoy me he enterado que el domingo podremos empezar a salir a dar un paseo durante una hora diaria, estoy muy contenta, ya tengo ganas de respirar aire fresco. Durante todos estos días que hemos estado en casa, sin poder salir, pensaba cuando podría volver a salir a la calle, a jugar al balón y visitar a mi familia. Normalmente mi día está bastante organizado porque así no me da tiempo a aburrirme. Todas las mañana hago tareas de clase y estudio hasta la hora de comer, después de comer veo un poco la tele, leo un libro, juego con el teléfono o la consola y para finalizar la tarde jugamos en familia a juegos de mesa o vemos una película todos juntos. Después de cenar hay días que vemos un poco la tele, o una película y otros que me voy a la cama a escuchar música. Se que ya queda menos para que todo esto termine.

Jimena

FASE 2 DEL PROYECTO


ENTREGA 8 DE MAYO

La casa de Bernarda Alba, Federico García Lorca.

Fragmento del Acto I:

ADELA.- Tome usted. (Le da un abanico redondo con flores rojas y verdes.)

BERNARDA.- (Arrojando el abanico al suelo.) ¿Es éste el abanico que se da a una viuda? Dame uno negro y aprende a respetar el luto de tu padre.

MARTIRIO.- Tome usted el mío.

BERNARDA.- ¿Y tú?

MARTIRIO.- Yo no tengo calor.

BERNARDA.- Pues busca otro, que te hará falta. En ocho años que dure el luto no ha de entrar en esta casa el viento de la calle. Hacemos cuenta que hemos tapiado con ladrillos puertas y ventanas. Así pasó en casa de mi padre y en casa de mi abuelo. Mientras, podéis empezar a bordar el ajuar. En el arca tengo veinte piezas de hilo con el que podréis cortar sábanas y embozos. Magdalena puede bordarlas.

MAGDALENA.- Lo mismo me da.

ADELA.- (Agria.) Si no quieres bordarlas, irán sin bordados. Así las tuyas lucirán más.

MAGDALENA.- Ni las mías ni las vuestras. Sé que yo no me voy a casar. Prefiero llevar sacos al molino. Todo menos estar sentada días y días dentro de esta sala oscura.

BERNARDA.- Eso tiene ser mujer.

MAGDALENA.- Malditas sean las mujeres.

BERNARDA.- Aquí se hace lo que yo mando. Ya no puedes ir con el cuento a tu padre. Hilo y aguja para las hembras. Látigo y mula para el varón. Eso tiene la gente que nace con posibles.

(Sale ADELA.)

VOZ.- ¡Bernarda! ¡Déjame salir!

BERNARDA.- (En voz alta.) ¡Dejadla ya!

(Sale la CRIADA.)

CRIADA.- Me ha costado mucho sujetarla. A pesar de sus ochenta años, tu madre es fuerte como un roble.

BERNARDA.- Tiene a quién parecerse. Mi abuelo fue igual.

CRIADA.- Tuve durante el duelo que taparle varias veces la boca con un costal vacío porque quería llamarte para que le dieras agua de fregar siquiera, para beber, y carne de perro, que es lo que ella dice que tú le das.

MARTIRIO.- ¡Tiene mala intención!

BERNARDA.- (A la CRIADA.) Dejadla que se desahogue en el patio.

CRIADA.- Ha sacado del cofre sus anillos y los pendientes de amatista; se los ha puesto, y me ha dicho que se quiere casar.

(Las HIJAS ríen.)

BERNARDA.- Ve con ella y ten cuidado que no se acerque al pozo.

CRIADA.- No tengas miedo que se tire.

BERNARDA.- No es por eso... Pero desde aquel sitio las vecinas pueden verla desde su ventana.

¿CÓMO SERÍA ESTA CASA EN EL SIGLO XXI?

Clara se la imagina así:

(En la casa está BERNARDA con sus cinco hijas y la CRIADA). BERNARDA: A partir de hoy vamos a hacer un luto de ocho años por la muerte de vuestro padre.

MARTIRIO: ¿Qué? ¡No! Lo siento mamá pero tengo que trabajar.

BERNARDA: ¿Trabajar? ¡Qué locura! Pero podemos hacer el luto sin ti.

ADELA: ¡Ya pero yo tengo que dar de comer a las mulas! BERNARDA: ¿Dar de comer a las mulas? ¡Eso es trabajo de varones!

ADELA: No, ya no. (Se va con MARTIRIO) BERNARDA: Bueno, vosotras iros pero yo me quedo aquí. Así que MAGDALENA, ANGUSTIAS y AMELIA vosotras os quedáis.

ANGUSTIAS: Lo siento mamá, ya tengo 39 años. Ya puedo decidir por mi sola. (Se va)

BERNARDA: ¡Vete! Pero la próxima solo se irá cuando tenga un marido de clase alta.

AMELIA: ¿Qué? ¡Yo no me voy a casar!

BERNARDA: (Riéndose) ¿Qué vas a hacer tú sin marido?

AMELIA: Muchas más cosas de las que haría casada. (Se va de la casa)

BERNARDA: Solo me quedas tú. Ve a tejer algo que eso es lo que hacemos las mujeres.

MAGDALENA: (Horrorizada) ¡¿Tejer?! ¡Yo no se tejer! Y tampoco quiero aprender.(Se va)

BERNARDA: (A su CRIADA) ¿Qué está pasando?

CRIADA: Los estereotipos han cambiado. ¡Y para bien! A sí que te recomiendo que no hagas un luto de ocho años y dejes respirar a tus hijas. (Se va)

(Queda BERNARDA sola en la casa, pensativa)


A.- CONTESTA LAS PREGUNTAS después de ver el vídeo y leer el texto.

1. ¿Cuándo fue escrita esta obra?

2. ¿Cuál es el motivo del encierro durante ocho años en la casa de Bernarda Alba?

3. ¿Cuál es el ambiente que reina en la casa? ¿Cómo se sienten las mujeres?

4. ¿Crees que esta casa es un lugar seguro para quienes viven en ellas? ¿Bernarda protege a sus hijas?

5. ¿Consideras que el silencio de la casa es sinónimo de calma y tranquilidad? ¿Por qué?

6. ¿A Bernarda le interesa el bienestar de su familia o guardar las apariencias según las normas de la época? ¿Por qué? Explica tu opinión.

7. ¿Qué crees que harían estas mujeres para soportar el encierro durante ocho años? ¿Qué haces tú para entretenerte y divertirte?

B. CREACIÓN LITERARIA

En este fragmento del primer acto pueden apreciarse varios rasgos que caracterizan la casa de Bernarda Alba y las personas que la habitan: la autoridad de la madre, los estereotipos* en relación al papel del hombre y la mujer en la sociedad (Hilo y aguja para las hembras. Látigo y mula para el varón) y la necesidad de la mujer de guardar las apariencias ante el resto de la sociedad.

Afortunadamente, desde que Federico García Lorca escribió esta obra muchas cosas han cambiado. Por eso, te proponemos que inventes una escena donde los personajes tengan una conversación y en ella se muestre cómo estos estereotipos han cambiado. Puedes inspirarte en la obra de Lorca (es decir, reescribir la escena) o crear una totalmente nueva.

Recuerda que en cada intervención debes indicar el nombre del personaje y debes utilizar las acotaciones para que el lector conozca sus gestos o cómo es la escenografía.

PUEDES ENTREGAR LAS TAREAS ESCRITAS A MANO O EN WORD

Para recordar cómo se debe presentar un escrito en Word, puedes mirar este sencillo vídeo con las principales funciones del programa.


Para recordar cómo se debe presentar un escrito a mano, mira el apartado del blog que está colgado en 1º ESO. MATERIALES. CÓMO SE PRESENTA UN ESCRITO.

¿TE ANIMAS A REPRESENTAR TU ESCENA?

Si alguien en casa quiere colaborar, podéis grabar un vídeo y enviarlo para colgarlo en el blog.

¿TE ANIMAS A LEER LA OBRA COMPLETA?

La tienes en un enlace en el apartado LECTURAS EN EL COFINAMIENTO en este blog.

FASE 3 DEL PROYECTO

CREA UN MICRORRELATO ENCERRADO.

ENTREGA: 15 DE MAYO

Ahora que ya has leído diferentes ejemplos de literatura encerrada, te toca ser el protagonista. Para ello, hemos elegido un subgénero narrativo breve: el microrrelato.

¿Qué tengo que hacer?

              1. REPASA LA PÁGINA 78 DEL LIBRO DE TEXTO: LOS ELEMENTOS DE LA NARRACIÓN Y TEN EN CUENTA ESTA INFORMACIÓN PARA ESCRIBIR TU CUENTO.
              2. CONTESTA ESTAS PREGUNTAS SOBRE EL VÍDEO "PETER PAN", EL MICRORRELATO DE FERNANDO IWASAKI:
                    1. ¿Qué problema tiene el niño protagonista del cuento?
                    2. ¿Crees que la solución que decide es la adecuada? Razona tu respuesta.
                    3. Explica el título del cuento
                    4. Enumera los elementos de la narración (los tienes en la página 78 de libro de texto.
              3. ESCRIBE UN MICRORRELATO FICTICIO basado en la experiencia del confinamiento, pero dándole un toque humorístico, ya que, como decía Anna Frank, el humor nos ayuda a sobrellevar mejor las cosas y, además, nos ayuda a combatir el miedo. Recuerda: no se trata de escribir tu experiencia en el confinamiento, sino de inspirarte en ella para crear un microrrelato ficticio. Piensa en lo que ves por la ventana, en la manera de afrontar la soledad, el aburrimiento, en noticias curiosas que hayas escuchado, en las personas que se saltan el confinamiento, etc…

¿Cómo lo tengo que hacer?

Para escribirlo, debes tener en cuenta las siguientes características:

· SÉ BREVE. Condensa tu historia en pocas palabras: es un texto completo pero breve (tiene acción, personajes, tiempo, espacio y narrador, pero todo ello recogido en pocas palabras). La extensión mínima es una línea y la extensión máxima serían 10 líneas.

· EMPIEZA CON BUEN PIE. Selecciona muy bien el primer enunciado: debes comenzar intrigando al lector.

· VETE AL GRANO. Elimina los detalles, no des rodeos en la acción.

· TITULA CON IMPACTO. No olvides que el título debe dar sentido a tu historia.

· ACABA CON UN GOLPE DE EFECTO. Elige un final impactante. También puede ser un final abierto.

· Revisa tu texto y cuida la presentación, usa un vocabulario rico y fíjate en la ortografía.

Puedes presentarlo en el formato que quieras: a mano, en Word, montado en Power point, con un dibujo, grabado en vídeo, plegado como el de la foto...

Un microrrelato es un cuento llevado a su mínima expresión.

LEE ESTOS RELATOS COMO INSPIRACIÓN Y NO LOS PIERDAS DE VISTA, PORQUE HABLAREMOS SOBRE ELLOS...

Amenazas

-Te devoraré -dijo la pantera.

-Peor para ti -contestó la espada.

William Ospina

Herencia

Antes de ponerse el pendiente frotó el metal que rodeaba el zafiro con un bastoncito impregnado en líquido para limpiar plata. Cientos de estratos de tiempo levantaron el vuelo dejando la superficie luminosa y desnuda. Se acercó, curiosa, y la joya le devolvió el rosto adolescente de su abuela probándose el pendiente ante un espejo.

Paz Monserrat Revillo, en su blog.

Cuento de arena

Un día la ciudad desapareció. De cara al desierto y con los pies hundidos en la arena, todos comprendieron que durante treinta largo años habían estado viviendo un espejismo.

Jairo Aníbal Niño

Cubo y pala

Con los soles de finales de marzo mamá se animó a bajar de los altillos las maletas con ropa de verano. Sacó camisetas, gorras, shorts, sandalias..., y aferrado a su cubo y su pala, también sacó a mi hermano pequeño, Jaime, que se nos había olvidado.

Llovió todo abril y todo mayo.

Carmela Greciet, en Ciempiés, los microrrelatos de Quimera,

Damero

Los arquitectos de Uff, llevados por un escrupuloso afán de simetría, construyeron una ciudad reticulada de casas idénticas y rectas avenidas que nadie puede distinguir entre sí. A esto se debe la espectacular incidencia de la mendicidad en Uff. Los miles de vagabundos que merodean por las calles son, en realidad, honrados ciudadanos que una mañana salieron a trabajar y que, desde entonces, nunca han vuelto a encontrar su hogar.

Manuel Moyano, en Teatro de ceniza.

El tiovivo

El niño que no tenía perras gordas merodeaba por la feria con las manos en los bolsillos, buscando por el suelo. El niño que no tenía perras gordas no quería mirar al tiro en blanco, ni a la noria, ni, sobre todo, al tiovivo de los caballos amarillos, encarnados y verdes, ensartados en barras de oro. El niño que no tenía perras gordas, cuando miraba con el rabillo del ojo, decía: “Eso es una tontería que no lleva a ninguna parte. Sólo da vueltas y vueltas y no lleva a ninguna parte”. Un día de lluvia, el niño encontró en el suelo una chapa redonda de hojalata; la mejor chapa de la mejor botella de cerveza que viera nunca. La chapa brillaba tanto que el niño la cogió y se fue corriendo al tiovivo, para comprar todas las vueltas. Y aunque llovía y el tiovivo estaba tapado con la lona, en silencio y quieto, subió en un caballo de oro que tenía grandes alas. Y el tiovivo empezó a dar vueltas, vueltas, y la música se puso a dar gritos entre la gente, como él no vio nunca. Pero aquel tiovivo era tan grande, tan grande, que nunca terminaba su vuelta, y los rostros de la feria, y los tolditos, y la lluvia, se alejaron de él. “Qué hermoso es no ir a ninguna parte”, pensó el niño, que nunca estuvo tan alegre. Cuando el sol secó la tierra mojada, y el hombre levantó la lona, todo el mundo huyó, gritando. Y ningún niño quiso volver a montar en aquel tiovivo.

Ana María Matute, en Los niños tontos.

Este es el excelente resultado de la Fase 3