La mina y el mar. Mieres y Salinas al encuentro

Con motivo del Día del libro, los alumnos de 4º de ESO participaron en este proyecto intercentros con el que queríamos simbolizar el hermanamiento entre la mina y el mar. Sin ayuda de ningún medio electrónico, se logró que la comunicación entre los adolescentes fuera intensa y fructífera.

El trabajo se realizó de forma paralela en los dos centros: todos los alumnos fotografiaron un lugar de su entorno, y las imágenes fueron enviadas por correo ordinario acompañadas de una breve explicación anónima. A partir de ahí, comenzó la fase de creación literaria: cada uno escribió un relato inspirándose en la fotografía recibida de su pareja desconocida.

Por fin, el 21 de abril, pudieron verse las caras y poner nombre a fotos y relatos en una experiencia que les reveló que podemos comunicarnos sin redes sociales, y que la relación en persona es más real y gratificante que las relaciones virtuales. Toda una lección.


FASE 1.

Fotografía un lugar especial para ti, en el concejo de Mieres, y envía la imagen a tu profesora ANTES DEL 16 DE MARZO contestando a estas preguntas:

a.- ¿De qué lugar se trata? Haz una breve descripción

b.- ¿Por qué lo has escogido?

c.- ¿Lo asocias a algún recuerdo especial?

d.- ¿Cuándo fue la última vez que estuviste allí? ¿Sueles ir a menudo?

e.- ¿Recordarás este sitio cuando seas adulto, si te encuentras lejos?

f.- Firma con tu nombre (sin apellidos)

FASE 2.

Recibirás una fotografía de un alumno del IES de Salinas, con la misma información sobre su imagen.

Escribe un relato en el que el protagonista sea el otro alumno/a, inspirándote en la imagen y en la información que te ha escrito. El estilo es libre (romántico, misterioso, humorístico…) y el narrador también (en primera persona, en tercera…). La extensión mínima son 40 líneas y la extensión máxima una cara, en letra Arial 12.

Entrega el relato, junto con la fotografía, a tu profesora ANTES DEL 16 DE ABRIL.

FASE 3.

Encuentro en Mieres en torno a la semana del 21 DE ABRIL entre el alumnado del IES Bernaldo de Quirós y el IES de Salinas:

-Cada alumno/a conocerá a su “pareja” literaria e intercambiarán impresiones sobre sus relatos y sus fotografías

-Se realizará una lectura en voz alta y una muestra de las imágenes

-Se realizará una visita por el Museo del centro

Isabel Fulgueiras envió a Pedro una foto de un castillete minero y recibió esta de un acantilado.

Aquí tenéis el relato que surgió al inspirarse en la imagen:

Hola, me llamo Pedro y me gusta pasear por el acantilado, desde donde veo la playa de Salinas. Suelo ir allí con mis padres en verano o con mis amigos para hacer rutas en bicicleta. Allí me siento libre, alejado del ruido del pueblo y siempre con la compañía de una extraña presencia.

Una tarde de agosto, ya casi oscureciendo salí solo a pasear junto a los acantilados y pude observar una pequeña barca que se mecía a la deriva.

Bajé a la orilla, hacia donde la corriente la había llevado y no había nada, solo una botella. La historia hasta aquí puede parecer poco emocionante pero todo cambió cuando pude observar que en el interior se encontraba un pequeño pergamino escrito, no cabe duda que algún mensaje contenía.

Y así fue, era un mensaje de despedida, seguramente del último pasajero de esta barca, que viendo que no le quedaba mucho de vida, quiso dejar un testimonio final.

Se llamaba Jhon, un aventurero que había decidido salir solo a navegar por el Océano y seguramente sorprendido por alguna tormenta lo llevó a la deriva y no consiguió que nadie lo rescatase.

Me decidí a abrir la botella y leer su mensaje, que eran sin duda, sus últimas palabras aunque me resultaba difícil comprender su letra. Estaba claro que no era de esta época y que me encontraba ante algo grandioso. Este era más o menos su contenido:

“Ante la situación en la que me encuentro quiero despedirme de todo aquello que amo, creed que no me resulta fácil y que os echaré siempre de menos.

Esta experiencia me ha enseñado mucho sobre la vida, de la necesidad de vivir cada minuto y de que este mundo está lleno de maravillas. Aquí estoy en medio del océano, hermoso y aterrador al mismo tiempo. No dejo de pensar en todo aquello que tengo lejos: mis esposa, mis hijos y mi querida Venecia, cuidad de mi niñez y juventud.

Me gustaría compartir con todos muchas cosas que he visto; con mis hijos Sebastián, Luigi y Santo y especialmente contigo, Mattea (su esposa), quiero que sepas, que esté donde esté, siempre te querré y nunca te olvidaré. Y pensad que cada vez que miréis al mar, allí estaré”

Me decidí a investigar quién podría ser Jhon y descubrí que fue un comerciante, navegante y explorador genovés, llamado Giovanni Caboto, uno de los primeros en llegar en el siglo XV a la parte continental de Norteamérica y que desapareció en torno a 1499 en una de sus expediciones.

Esta experiencia cambió mi vida y mi forma de ver el mar, ya que cada vez que me acerco a este lugar, algo de John parece estar presente.