Por las
Almas del Purgatorio
En el Ejercicio de tu Voluntad
Muerte y purgatorio de los padres de Luisa
Parte 3/7
"Me has ofrecido continuamente lo que Yo merecí, hice y sufrí en el curso de mi Vida en su favor...
mi justicia, tomando de ti la satisfacción, no podía tomarla de las dos"
Muerte y purgatorio de los padres de Luisa
Parte 3/7
De los escritos de la S. D. Luisa PiccarretaVol. 7-83 mayo 9, 1907
Paraíso de la humanidad de Cristo
Para entrar al Paraíso de la Divinidad se debe pasar
por el Paraíso de La Humanidad de Cristo
"... Después de algunos días, viniendo el buen Jesús me ha dicho: “Hija mía, consuélate, porque quiero decirte y hacerte ver dónde está tu madre
y como tú, tanto antes como después de habérmela Yo traído me has ofrecido continuamente lo que Yo merecí, hice y sufrí en el curso de mi Vida (Paraíso de la Humanidad de Cristo) en su favor,
por esto ella ahora se encuentra tomando parte en todo lo que Yo hice y goza de mi Humanidad, quedándole aún oculta mi Divinidad, (Paraíso de la Divinidad) que en breve le será también develada,
y el fuego que tú sientes y tus oraciones han servido para exentarla de cualquier otra pena de sentido, que a todos corresponden, porque mi justicia, tomando de ti la satisfacción, no podía tomarla de las dos”.
En ese momento, me parecía ver a mi madre dentro de una inmensidad que no tenía confines, y en esta inmensidad había tantos gozos y alegrías por cuantas palabras, pensamientos, suspiros, obras y sufrimientos, latidos, en suma, todo lo que contenía la Humanidad Santísima de Jesucristo.
Comprendía que es un segundo paraíso para los bienaventurados, y que todos para entrar al paraíso de la Divinidad deben pasar por éste de la Humanidad de Cristo.
Así que para mi madre había sido un singularísimo privilegio reservado a poquísimos, el no haber tocado otro purgatorio; sin embargo comprendía que si bien no estaba en tormentos, sino más bien en gozos, su felicidad no era perfecta, sino casi a la mitad.
Sean dadas las gracias al Señor por esto.
Yo continué sufriendo durante doce días, tanto que me encontré al borde de la muerte, pero habiéndose interpuesto la obediencia para hacer que ese hilo de vida que me quedaba no se rompiera, he regresado a mi estado natural. Yo no sé, parece que esta obediencia tiene un arte mágico sobre mí, pero el Señor pronto la hará perder su autoridad para llevarme con Él. Yo sentía un descontento porque la obediencia se atraviesa para no dejarme ir al Cielo..."
En tu Voluntad, dale Señor el descanso Eterno. Brille para ellas la luz perpetua. Descansen en Paz. Amén
Las almas de los fieles difuntos por la misericordia de Dios descansen en Paz. Amén.
En síntesis
Iniciamos la tercera parte de siete, 3/7, anunciadas también en siete videos de nuestro canal en Youtube: Fiat Divina Voluntad, que nos dan a conocer:
La Muerte y Purgatorio de los padres de la S. D. Luisa Piccarreta
-En esta entrega, 3/7, Jesús dice:
"y como tú, tanto antes como después de habérmela Yo traído me has ofrecido continuamente (Las Horas de la Pasión, actos, obras, vida de Jesús en su Humanidad...giros) lo que Yo merecí, hice y sufrí en el curso de mi Vida (Paraíso de la Humanidad de Cristo) en su favor,"
-Y continua Jesús diciendo el Efecto, la Gracia, el Favor Divino... de estos actos que hizo Luisa (Horas de la Pasión, actos, obras, vida de Jesús en su Humanidad...) desde antes de la muerte de su madre, como después, en favor de ella. Jesús le dice:
"por esto ella ahora se encuentra tomando parte en todo lo que Yo hice y goza de mi Humanidad, quedándole aún oculta mi Divinidad, (Paraíso de la Divinidad) que en breve le será también develada,"
-Adicionalmente Jesús nos explica según algunas situaciones que vivimos o que viven nuestros familiares cómo podemos aplicarlas esperando exentar la justicia:
"y el fuego que tú sientes y tus oraciones han servido para exentarla de cualquier otra pena de sentido, que a todos corresponden, porque mi justicia, tomando de ti la satisfacción, no podía tomarla de las dos”.
-Para entrar al Paraíso de la Divinidad se debe pasar por el Paraíso de La Humanidad de Cristo. Luisa lo dice a continuación:
"me parecía ver a mi madre dentro de una inmensidad que no tenía confines, y en esta inmensidad había tantos gozos y alegrías por cuantas palabras, pensamientos, suspiros, obras y sufrimientos, latidos, en suma, todo lo que contenía la Humanidad Santísima de Jesucristo.
Comprendía que es un segundo paraíso para los bienaventurados, y que todos para entrar al paraíso de la Divinidad deben pasar por éste de la Humanidad de Cristo. Así que para mi madre había sido un singularísimo privilegio reservado a poquísimos, el no haber tocado otro purgatorio..."
Fiat Divina Voluntad
Paraíso de la Humanidad de Cristo