Por las

Almas del Purgatorio


En el Ejercicio de tu Voluntad

Busquemos 

el Fruto Querido por Jesús

 en esta Palabra

Aquí Está 

El Purgatorio


AUDIO

De los escritos de la S. D. Luisa PiccarretaVol. 3, cap. 15 noviembre 28, 1899 

Luisa acepta sufrir en el purgatorio para liberar algunas almas 


Mi amado Jesús ha venido todo afabilidad, me parecía como un íntimo amigo que tiene tantas formalidades para otro amigo para demostrarle su amor, y las primeras palabras que me ha dicho han sido: 

“Amada mía, si tú supieras cuánto te amo. Me siento atraído grandemente a amarte, mis mismas demoras en venir me fuerzan y son nuevas causas de hacerme venir y colmarte de nuevas gracias y carismas celestiales. Si tú pudieras comprender cuánto te amo; tu amor comparado con el mío apenas lo percibirías”. 

Y yo: “Mi dulce Jesús, es verdad lo que dices, pero también yo siento que te amo mucho, y si Tú dices que mi amor comparado con el tuyo apenas se percibe, esto es porque tu poder es sin límites y el mío es limitado, y por tanto, puedo hacer por cuanto de Ti mismo me viene dado; tan es verdad, que cuando tengo voluntad de sufrir más para demostrarte mayormente mi amor, si Tú no me concedes las penas, no está en mi poder el sufrir, y estoy obligada a resignarme aun en esto, y ser ese ser inútil que por mí he sido siempre. En cambio en Ti está en tu poder el mismo sufrir, y en cualquier modo que quieras manifestarme tu amor, lo puedes hacer. Amado mío, dame a mí el poder y te haré ver cuánto sé hacer por amor tuyo, porque en la medida que me das, en esa misma medida te daré”. 

Él escuchaba con sumo placer mi hablar disparatado, y casi queriéndome poner a prueba me ha transportado fuera de mí misma, cerca de un lugar profundo, lleno de fuego líquido y tenebroso, daba horror y espanto el sólo verlo. 

Jesús me ha dicho: 

“Aquí está el purgatorio, y muchas almas están concentradas en este fuego. 

Irás tú a ese lugar a sufrir para liberar a aquellas almas que me agradan, y esto lo harás por amor mío”. 

Yo inmediatamente, si bien temblando un poco le he dicho: “Todo por amor tuyo, estoy dispuesta, pero debes venir Tú junto conmigo, de otra manera, si me dejas, no te dejas encontrar más, y después me haces llorar mucho”. 

Y Él: “Si voy junto contigo, ¿cuál sería tu purgatorio? Esas penas con mi presencia, para ti se cambiarían en alegrías y en contentos”. 

Y yo: “Sola no quiero ir, y además, mientras estemos en ese fuego Tú estarás detrás de mis espaldas, así no te veo y aceptaré este sufrimiento”. 


Así he ido a ese lugar lleno de densas tinieblas, 

y Él me seguía por atrás, y yo por temor de que me dejase le he tomado las manos, teniéndolas estrechadas a mis hombros. Habiendo llegado abajo, 

¿quién puede decir las penas que sufrían aquellas almas? 

Ciertamente son inenarrables a personas vestidas de humana carne. Entonces, al ir yo a ese fuego, éste se apagaba y se despejaban las tinieblas, y muchas almas salían, otras quedaban aliviadas. 

Después de haber estado cerca de un cuarto de hora, hemos salido..."



En tu Voluntad, dale Señor el descanso Eterno. Brille para ellas la luz perpetua. Descansen en Paz. Amén

Las almas de los fieles difuntos por la misericordia de Dios descansen en Paz. Amén.

Ofrezcamos a diario


AUDIO: Un Bello Sufragio  por


las Benditas almas del Purgatorio

Un Bello Sufragio 

En Divina Voluntad

Sufragio para el alma de ______ 

y por todas las Benditas almas del Purgatorio


Jesús, entro en Tu Querer Divino; tomo tu Poder, la inmensidad de tu Amor, el valor inmenso de Tus penas y cualidades Divinas para derramar todo sobre el alma de tu hijo/a ________ y por todas las Benditas almas del Purgatorio; por quienes Te doy la Gloria, Honor, Honra y amor Divino que quizá te hubieran querido dar en su vida y no te dieron.


En tu Voluntad su alma reciba, este baño del amor que contiene Tu Poder Divino, Tu belleza, Tu Preciosísima Sangre y todas Tus cualidades Divinas.


Fiat Divina Voluntad

En Virtud de la Divina Voluntad Vol 12-93