Feroico xusticiero

Faquella doncella fera muy fermosa. 

Mas su fermosura festaba a dos maravedíes de fer mancillada al fallarse en festado de sitio por jrandes fuestes de jerreros que ya apuntalaban sus fescalas para subirse a la torre más alta del castillo, que no venta, a cuya ventana la fermosa dama profería los más fangustiosos jritos de aujilio que mis foídos fubiesen foido nunca.

-Non corredos, vella señora, que éste fumilde caballero de vos, librará singular batalla con aquesta baxa ralea y dexará vuestra fonra a todo punto de ser maculada.

Y, encomendándome a mi Señor, a mi señora y a mis padres que me festarán auscultando, acometí como uno sólo que era a aquellas malditas fuestes de jerreros que ya las fescalas fallábanse puxando.

-¡Non fuyades, mentecatos, pues voto a bríos que lamentaréis el faberme conocido!

Y, mientras las farmaduras del primero aún resonaban en el suelo, non uno ni dos, sino ciento, caían a los suelos rebanados por mi espada "Thundersound".

Y de aquesta manera encaraméme a la ventana y, con gran arroxo y osadía, derribé las fescalas que subían hasta la torre y dexé a aquellos necios que corriesen al descampado por el prado del castillo.

Mas, "aquí fuele a fumo", díxeme yo y, xusto cuando dime la vuelta y contemplé el vasto incendio, comprendí que los que intentaban fescalar la felevada torre no eran un jrupo de jerreros, sino miembros de un equipo de bomberos que intentaban rescatar a la señora del huego.

Y, mientras fella fenecía desfanecida en mis fuertes y robustos brazos, fasoméme a la ventana y ejfalé con toda la fuerza de mis pulmones:

-FELP! I NEED SOMEFODY! FELP! NOT JUST ANYFODY! FELP! YOU KNOW I NEED SOMEFONE! FEEEEELP!

Y fif dieftes refonaron.

 

(Publicado en Aquí, 5/1/1991)

Ilustración: Machado. Maratón de cuentos de Guadalajara 2006