La pensada clásica

Se dice que la pensada es la única seña válida en el dominó. Pero, ¿qué es la pensada?. Se puede definir como pensada el tiempo que utiliza el jugador para pensar la ficha que tiene que poner. Y ¿qué importancia tiene la pensada?, pues bien, lo vamos aclarar de forma simple.

Imaginemos un jugador que solo tiene una ficha para poner. En principio parece claro que tardará poco en colocar la ficha pues solo tiene una opción y no tiene mucho que pensar. Sin embargo a medida que tenga más opciones tardará lógicamente más tiempo en decidirse. Pues bien esta es la base de la pensada. Así, de acuerdo al sistema clásico, podemos decir que durante la partida, “tardaremos poco en poner una ficha cuando solo tenemos esa opción (hemos jugado obligados), tardaremos más en poner cuando tengamos dos, y haremos una pensada larga para aclarar al compañero que tenemos tres o más fichas de la pinta que tapamos (tenemos fuerza en ese palo)”.

Ahora coloquémonos en el lugar del salidor. Si tenemos un levante (las siete fichas iniciales) con una jugada clara, por ejemplo tres fichas de la misma pinta y el doble, tardaremos poco en jugar el doble. Si por el contrario tenemos una salida difícil, donde tenemos que pensar por cual ficha salir, pues la situación no es clara, tardaremos tiempo en salir. Por tanto la interpretación en la salida es la siguiente: “si salimos sin pensar tendremos una salida clara e iniciamos con una pinta fuerte, y por el contrario haremos una pensada larga si tenemos una mala salida”.

Estas son las reglas de la pensada clásica, y así las debe interpretar el compañero.