Rosario Castellanos
El despojo

Me arrebataron la razón del mundo

y me dijeron: gasta tus años componiendo

este rompecabezas sin sentido.


No hay más. Un acto es una estatua rota.

Una palabra es sólo

la imagen deformada en un espejo.


¿Qué vas a amar? ¿Un cuerpo que se pudre

─ese pantano lento en que te ahogas─

o un alma que no existe?


¿Qué puedes esperar? El tiempo es lo continuo

y si dices: «mañana» mientes, pues dices «hoy».


Ni siquiera se muere. Algo muy leve cambia

y sigues, dura, en piedra; creciendo en vegetal

y otra vez despertando en lo que eras.


Otra vez. Otra vez.


Me dijeron: no busques. Nada se te ha perdido.


Y los vi desde lejos

ocultar lo que roban y reír.