Cástulo

Linares

María del Mar Jurado Jiménez, IEDA, 2020-21

Castulo era la antigua capital de la Oretania, la región ibérica que comprendía territorios de Ciudad Real, Jaén y Albacete. Las ruinas de la ciudad íbera se encuentran situadas en el Alto Guadalquivir, en la provincia de Jaén, en las estribaciones de Sierra Morena, a unos 5 km de la ciudad de Linares y sobre la meseta superior del Cerro de la Muela. La zona fue habitada en el Paleolítico Superior y tuvo un núcleo de población estable y permanente desde el comienzo de la Edad del Cobre, a mediados del tercer milenio a.n.e., la conocida como Cultura de los Silos. Durante el Bronce Medio la ciudad y las minas cercanas estuvieron bajo la influencia tartesia. Posteriormente, los íberos, con el nombre de Kastilo, la convirtieron en uno de los oppidum más importantes de Andalucía y el más extenso de la Península que llegó a emitir moneda propia. Era un recinto amurallado que ocupaba toda la meseta del cerro. En el 208 a.n.e. fue ocupada por los cartagineses. Se cuenta que Aníbal se casó allí con la princesa íbera Himilce (Silio Itálico, Púnica 3; Tito Livio, Desde la fundación de la ciudad 24.41.7); en el 206 se alió con los romanos al mando de Publio Cornelio Escipión, durante la Segunda Guerra Púnica. Polibio la llama Κασταλῶν en Historias 10.38.7.

Como municipium romano, libre e inmune, se convirtió en un importante nudo de comunicaciones que controlaba el comercio de los metales extraídos de Sierra Morena (cobre, plomo, plata), tanto a través de la vía Augusta como por el río Guadalimar; existía un embarcadero al pie de la ciudad. Pertenecía a la provincia Baetica hasta la reforma de Augusto, cuando pasó a la Tarraconensis. La ciudad se adecuó al modelo urbanístico romano y se construyeron termas, templos, acueductos, foro, teatro y anfiteatro. La romanización culmina cuando en época imperial se convierte en municipio de derecho latino. Durante la época visigoda fue sede episcopal hasta que en el siglo VII se trasladó a Baeza, momento en que empezó su decadencia. A la llegada de los musulmanes en el siglo VIII era una aldea con muy pocas casas y habitantes, protegida por una endeble muralla; recibió el nombre de Qastuluna. En el año 1227 fue tomada definitivamente por Fernando III. Cástulo estuvo habitada de forma continuada durante 4000 años hasta su abandono en el siglo XIV.

Puerta Argentaria y necrópolis: situada al norte antes de entrar en la ciudad, es una de las más importantes, sus 50.000 metros cuadrados se han utilizado desde el s. IV a.n.e. hasta el VI n.e. Se observan dos tumbas de planta cuadrada, una tumba ibérica del siglo IV a.n.e., y una cristiana de los siglos V-VI.

Acrópolis: tras atravesar la muralla entramos en la meseta donde se levantó Cástulo, un promontorio en torno al que se levantaron el teatro y los edificios públicos. Fue una zona de carácter sagrado desde la Prehistoria hasta la Edad Media.

  • Torre Alba: construida en torno al siglo III a.n.e. en el extremo Noroeste, simbolizaba el poder de Cartago; se conserva la escalera que llevaba a la plataforma superior de la torre. Los hallazgos de mosaicos, aras romanas y ofrendas prueban el carácter sagrado del lugar.

  • castellum aquae: las cisternas sin excavar tienen gruesos muros de hormigón; el abastecimiento de agua para los depósitos y su distribución a la ciudad se hacía a través de un acueducto cuyos restos se conservan entre el olivar.

  • cisternas de agua: junto al Cortijo del Guarda hay un brocal de pozo de mediados del s. XX levantado sobre una cisterna romana; cercana hay otra ovalada y cubierta con sillares apoyados sobre tres columnas de 5 metros.

Cerro de la Muela:

  • Muralla Norte: monumento funerario con dos leones que flanquean la portada de 3 metros que daba acceso a un pequeño recinto; la escultura de un león se guarda en el Museo Arqueológico de Linares.

  • Pórtico de Trajano: edificio público de forma cuadrangular del siglo II n.e.; destaca la puerta central con varios escalones que dan acceso al patio de grandes losas de pavimento. Se desconoce su uso concreto.

  • Termas mayores: de época Alto Imperial, se puede ver el hypocaustum de las salas templadas y calientes y un pasillo subterráneo hacia los hornos; la superficie conocida es de 600 metros cuadrados, con piscinas, letrinas y conducciones de agua.

  • Sinagoga: edificio religioso de planta cuadrada con un ábside semicircular situado al este; se ha identificado su uso gracias al descubrimiento de lucernas decoradas con la menorá y de un fragmento de cerámica con escritura en hebreo.

Ciudad baja:

  • Templo de Domiciano: demolido a finales del siglo I n.e. como consecuencia de una damnatio memoriae (castigo decretado por la mala actuación de un gobernante).

    • En él se encuentra el Mosaico de los Amores, ocupa una superficie de 70 metros cuadrados, está formado por más de 750.000 teselas de piedra y pasta de vidrio: en dos círculos centrales y seis lunetas se representan las alegorías de las estaciones; cuatro erotes o amorcillos que ofrecen racimos a perdices y faisanes; y dos escenas míticas: el Juicio de Paris y el mito de Selene y Endimión. Las paredes de la sala están construidas con zócalos de mampostería y muros de adobe y tapial de casi 4 metros de altura.

  • Templo cristiano: fechado en el s. IV cuenta con un pequeño baptisterio en el centro de la pared norte del patio semicubierto y varios enterramientos; es uno de los edificios de culto cristiano más antiguos de la Península. En él se localizó la Patena de Cristo en Majestad, traída desde Roma.

Detalle: Juicio de Paris

Detalle: Selene y Endimión

Castillo de Santa Eufemia: del siglo XIII se enclava en el extremo sur, sobre una meseta independiente de la principal; destaca un gran torreón construido con tapial. El acceso estaba al norte y conserva huellas de un foso defensivo.

Otros hallazgos arqueológicos

Destaca en el extremo oriental del foro la villa urbana del Olivar con habitaciones de uso público relacionadas con unas termas. Uno de ellos tiene una fuente central que conserva el pavimento. En época tardorromana la villa fue remodelada, quizás por cuestiones religiosas. La existencia de inhumaciones intramuros anuncia la despoblación y abandono de la ciudad.

En las inmediaciones se encuentra la villa de Torrubia, junto a la vía Augusta, principal eje de comunicación de la Hispania romana.

El Museo Arqueológico de Linares cuenta con salas destinadas a los íberos, al yacimiento de Cástulo, a materiales de minería y construcción y una tercera a la epigrafía.

Semis de Cástulo: reverso con toro y caracteres ibéricos

Bibliografía


  • Imágenes enlazadas o tomadas de las web y artículos citados.

Castulo_Jurado_Jimenez_Mar_2021.pdf