Informe de gestión 2023

El 2023 fue un año particularmente difícil para la bici-cultura urbana de Bucaramanga. La eliminación de la ciclorruta de conectividad de la calle 55, la suspensión del sistema público de bicicleta (Clobi) y el anuncio de eliminación de más ciclorrutas por parte del nuevo alcalde Jaime Andrés Beltrán, dejan un aire de incertidumbre en el ambiente.

Si bien la alcaldía de Juan Carlos Cárdenas se caracterizó por hacer lo mínimo o casi nada para promocionar la bicicleta como medio de transporte, el cuatrenio 2019-2023 también denota un retroceso para la implementación de este medio de transporte en la ciudad de manera masiva. Algunos logros obtenidos durante más de una década, comienzan a ponerse en duda.

La pérdida de la calidad en el servicio de Clobi (que en 2023 únicamente funcionó entre mayo y diciembre), la falta de operativos de la Dirección de Tránsito de Bucaramanga para controlar la invasión de ciclorrutas por parte de motorizados, así como la ausencia de campañas pedagógicas e incentivos para que más ciudadanos se animaran a bajarse del carro y la moto particulares y subirse a la cicla, fueron determinantes en que el porcentaje de viajes en bicicleta así como la porción de la población que usa este medio de transporte haya disminuido.

No obstante, pese a estas dificultades y desafíos que supusieron para el movimiento pro-bici urbano, Ciclaramanga logró desarrollar con relativo éxito una serie de actividades encaminadas y orientadas a continuar promoviendo la movilidad sostenible y los hábitos y estilos de vida saludable dentro de la población bumanguesa.

Fue así como felizmente pudimos llevar a cabo 11 Cicladas libres (una mensual, únicamente la programada para junio no se pudo realizar por cuestiones climáticas) en las que pedaleamos más de 173 kilómetros, para un promedio de 15,7 Km por Ciclada. En cada una de ellas la asistencia promedio fue de 30 personas, visitando más de 60 barrios. Con estos recorridos en bicicleta se le evitaron al aire de Bucaramanga 14,28 toneladas de CO2.

De otro lado, el Bike and yoga en sus 11 ediciones (una mensual, únicamente la programada para abril no se pudo llevar a cabo por cuestiones climáticas) nos llevó a conocer 8 escenarios diferentes (en su mayoría parques) para la práctica de esta disciplina milenaria, bajo la guía de 11 instructores diferentes (en su gran mayoría mujeres), pedaleando un total de 78,54 Km (7,14 kilómetros en promedio). La participación promedio en cada Bike and yoga fue de 13 personas.

También, nuestro servicio de alquiler de bicicletas arrojó muy buenas cifras en el balance de fin de año. En 2023, hicimos 2.809 alquileres de bicicletas (un porcentaje de ellos gratuito en 41 presencias en la ciclovía dominical), lo que representó un incremento del 25% con respecto al 2022. La cantidad de nuevos usuarios fue de 945, lo que supuso un incremento del 23% con respecto al año inmediatamente anterior. Cerramos el año con una flota en óptimas condiciones integrada por 25 bicicletas variadas y 20 cascos de excelente calidad, para de esta manera continuar prestando un muy buen servicio a la comunidad.

El 2024 plantea unos desafíos enormes y deja grandes interrogantes para la bici-cultura urbana. Esperamos que el nuevo gobierno y la ciudadanía sepan afrontar e interpretar estos retos con altura para bien de la ciudad y todos sus habitantes. Desde Ciclaramanga, nuestro compromiso por mejorar las condiciones para la práctica del ciclismo urbano, permanece intacto. Seguiremos poniendo todo el esmero, la inteligencia y el talento en cada una de nuestras acciones.

Muchas gracias por pedalear y ser parte del cambio.