La bicicleta es nuevamente protagonista de unas elecciones. Pero esta vez de una manera gris y sombría, pues el actual estado de cosas la ha vuelto un tema muy impopular de cara a las elecciones del próximo 29 de octubre, no solamente en Bucaramanga sino prácticamente en las principales ciudades de Colombia. ¿La razón? El rechazo que ha provocado en un sector de la población la implementación de vías ciclistas exclusivas o las llamadas ‘ciclorrutas’, en un esfuerzo de los gobiernos locales por promover la masificación de este medio de transporte.

En una sociedad excesivamente carro-dependiente y carro-centrista como la nuestra, hablar de ceder una porción del espacio público a la bicicleta se ha vuelto casi que una afrenta a los intereses particulares: el comerciante, el conductor del carro o de la moto, población con poco o nulo conocimiento en temas de sostenibilidad y transporte activo, etc., eclipsa los múltiples beneficios particulares y colectivos que trae la práctica del ciclismo urbano: mejoramiento de la calidad del aire, disminución de ruido, reducción de enfermedades no transmisibles, menos tiempo perdido en el trancón, mayor productividad, mejor calidad de vida, etc.

Sin embargo, que el tema se haya vuelto impopular e incómodo para algunos (en un debate nacional televisado el 100% de los candidatos invitados, anunció que quitarían las ciclorrutas ya existentes, acto seguido mostraron total laxitud y tolerancia cuando se les preguntó sobre el mototaxismo) no significa que se deba proscribir de las propuestas de campaña, de la agenda pública y de los planes de gobierno, al contrario, debemos encontrar en las alternativas de transporte amigables con el medio ambiente las soluciones que tanto requiere la traumatizada y caótica movilidad en la capital santandereana, pues las “soluciones” tradicionales en poco o nada han ayudado a mejorar el panorama.

Por esa razón, queremos que los candidatos (y candidata) a la alcaldía de Bucaramanga respondan un breve cuestionario que la comunidad ciclista urbana ha preparado con el fin de conocer cuál será su política en materia de bicicleta y, en general, de movilidad sostenible, al margen de la controversia y el revuelo que han generado las ciclorrutas en la opinión pública.

Esperamos que las campañas nos respondan y que vean el cuestionario #VotoBiciBga2023 como una oportunidad de profundizar en sus propuestas, aclarar dudas y desmentir rumores sobre el presente y el futuro de la apuesta por una cultura de la bicicleta en Bucaramanga, por una ciudad bici-amigable y sostenible. 

¡Los candidatos tienen, pues, la palabra!

Conozca el cuestionario completo en el siguiente enlace: https://bit.ly/VotoBiciBga2023