¿Cómo está Bucaramanga de cicloparqueaderos?

Fecha de publicación: Aug 09, 2013 9:55:20 PM

Utilizar la bicicleta como medio de transporte en Bucaramanga es una odisea. La ausencia total de ciclorrutas o ciclocarriles, aún cuando sí existen en el papel, y el sinnúmero de señales de tránsito que prohíben la circulación de bicicletas por las principales vías, es parte del panorama en la otrora ‘Ciudad bonita’ y por estos días ‘Bucaramanga sostenible’.

Bicicletas aparcadas en las afueras de la sede UIS Bucarica.

Pero estas no son las únicas adversidades que en materia de infraestructura tienen que enfrentar los que prefieren la bicicleta, el otro dilema que deben resolver es dónde dejarla parqueada mientras realizan sus actividades.

Ante esta situación, nos dimos a la tarea de averiguar, cámara en mano, con qué opciones cuenta la ciudad a la hora de parquear una cicla. Esto fue lo que encontramos.

Pocos cicloparqueaderos

Son contados los lugares que ofrecen a los visitantes un espacio adecuado, seguro y gratuito para guardar bicicletas. En su mayoría son centros comerciales y universidades los que ofrecen este tipo de servicio. Los hay de todo estilo y en una amplia variedad: desde el más estético y antifuncional, hasta el más abandonado, pero seguro.

También algunos establecimientos privados, como edificios, cafés y restaurantes, ofrecen a sus clientes la posibilidad de llegar en bicicleta. Algo verdaderamente excepcional, considerando que no están obligados a hacerlo. Sin embargo, se les reconoce el aprecio por un público que tradicionalmente no ha sido tenido en cuenta.

Encontrar en Bucaramanga un cicloparqueadero (también llamados 'bicicleteros') que reúna las condiciones anteriormente mencionadas (adecuado, seguro y gratuito) es prácticamente imposible. En la mayoría de los casos, los ciclo-usuarios tienen que arreglárselas como puedan para dejar su bicicleta amarrada mientras hacen las diligencias. El riesgo de encontrarla maltratada, desvalijada y, en el peor de los casos, no hallarla es permanente.

Brillan por su ausencia

Algunos lugares que sorprendentemente no cuentan con espacios adecuados para llegar en bicicleta, pese a la cantidad de personas que a diario llegan a sus instalaciones en este tipo de vehículo, son el Instituto Municipal de Cultura y Turismo, y uno de los gimnasios ubicados al aire libre en el Parque San Pío, entre otros.

El edificio La Recoleta, ubicado en la Calle 42 entre las carreras 27ª y 28, destaca entre los demás del sector por ofrecer un cicloparqueadero funcional, público y gratuito.

Sobre el andén que rodea el C.C. Cacique, fueron instalados varios ciclo-parqueaderos de diseño novedoso.

Bioparque (Eco Gym) San Pío. “Algo está mal en una sociedad que va en carro al gimnasio”.

La solución

Ofrecer una red de cicloparqueaderos públicos sería un gesto importante de la municipalidad hacia los amantes de la bicicleta. Mientras se construyen las ciclorrutas que están trazadas en los planes de desarrollo, de movilidad y demás megaproyectos, una manera sencilla de favorecer el uso de la bicicleta en Bucaramanga sería construir espacios adecuados para quienes se atreven a hacerlo, como ocurre con naturalidad en otros lugares del mundo.

Un restaurante que ofrece parqueo a los clientes que llegan en bicicleta, y que además les brinda un descuento especial en el consumo, es Chips & Chips, ubicado en la Cra. 35 # 48-21. También el Restaurante 11’s de la Calle 41 # 37-02 tiene cicloparqueadero para sus clientes.

Escena cotidiana en el centro de la ciudad. A lo largo de la calle 36, es común encontrar bicicletas amarradas a postes, señales de tránsito y demás barandas ubicadas dentro del separador.

El Parque de los Deseos, en Medellín, es un buen ejemplo de integración

arquitectónica entre espacio público y bicicultura.

Lugares a tener en cuenta

Si va a salir en bicicleta, tenga en cuenta la siguiente información para llegar a su destino:

*No reciben bicicletas

Cómo están las universidades

También hicimos un sondeo por los principales centros de educación superior de Bucaramanga, para ver cómo atienden a la comunidad que utiliza la bicicleta para transportarse. Algunas pasaron el examen, otras simplemente se 'rajaron'.

UIS. Posee en ambos campus una buena cantidad de cicloparqueaderos aptos y en buenas condiciones, distribuidos en todas las facultades.

UNAB. Tanto en el campus de El Jardín como en el CSU, los estudiantes encuentran en los parqueaderos de la universidad un espacio apropiado donde dejar su bicicleta.

UPB. No tiene cicloparqueaderos. No es común que estudiantes o profesores lleguen en bicicleta.

UDI. Las ciclas se pueden dejar en el parqueadero del edificio, bajo el cuidado del vigilante, pero no cuenta con un biciparqueadero adecuado.

UCC. En el parqueadero que administra una empresa privada, y está a disposición de la comunidad universitaria, no se admiten bicicletas.

UNIDADES TECNOLÓGICAS. No cuenta con zona de parqueo para bicicletas. Quienes llegan en cicla la deben dejar amarrada a las rejas del centro educativo, bajo su propia responsabilidad.

En la entrada principal del IMCTB hace falta un cicloparqueadero

que atienda las necesidades de los visitantes.

La universidad EAFIT de Medellín no solo posee en su campus varios módulos para parquear las ciclas, también cuenta con un sistema de bicicletas gratuitas para uso de visitantes y la comunidad universitaria.

Fotografías: Alvaro Méndez, Diego Moreno, Tirso Tabares.

Investigación y textos: Ciclaramanga. 2013