Perdonar a mamá

Perdonar a mamá

Dejo unos tacones encima de la mesa de la cocina, una nota pegada en la nevera y una fotografía de un Gato -libertad y traición-. Sabia que el peso de la culpa colgaría para siempre como una losa sobre sus hombros, y los juicios de una sociedad inclemente la perseguirían allá donde quisiera escapar. -Pero no le importó- la madre, ama de casa y esposa a tiempo completo recogió su maleta del recibidor y se fue de casa sin mirar atrás.



Autora: Raquel Rozada Tiscar