Búsqueda del saber

La Universidad es un lugar para hacerse preguntas… y dar respuestas. Preguntas de hondo calado como ¿cuál es el origen, la naturaleza y propósito del Universo? ¿por qué existe algo más bien que nada? y ¿por qué ese algo que existe es bello? Más aún, es un lugar para hacerse preguntas de la vida cotidiana y dar la respuesta más profunda, hasta llegar a la explicación última de las cosas. ¿Por qué?

La realidad está ahí, nos lanza preguntas y es necesario que haya una parte de la Humanidad que busque la respuesta. Y es gracias a esa gente que la Humanidad progresa. Ahora bien, aunque el hombre es un buscador y un buscador de la verdad, puede que la verdad no le interese, pues podemos estar frente a lo extraordinario y no darnos cuenta. Como recuerda en sus clases Ángel Sánchez-Palencia, el hombre es un animal racional que puede ser más animal que racional y vivir sin preguntarse nada… pero eso no significa que la Universidad no deje de ofrecer preguntas y respuestas.

¿Estamos capacitados para buscar el saber? ¿Necesitamos la verdad?

1. Todos los hombres tienen naturalmente deseo de saber (Aristóteles).

2. El deseo de saber es como el deseo de aprender: infinito.

  • La búsqueda del saber no se llena con respuestas parciales, soluciones aparentes u opiniones dominantes.

  • La búsqueda del saber culmina cuando alcanzamos la verdad, cuando conocemos las cosas por sus principios o causas últimas.

3. "El anhelo humano de saber es de saber verdadero (F. Ponz).

  • ¿Por qué y para qué podemos querer un saber que sea verdadero?

  • Quien sabe las cosas desde su fundamento sabe orientarse en el mundo.

4. La verdad es una necesidad humana.

5. ¿Cómo se busca la verdad?

  • Por sí misma, para encontrar el sentido de las cosas y con afán de comprender antes que de demostrar.

6. Apertura y limitación.

  • El hambre de verdad no tiene por qué ser hambre de todas las verdades, sino, más bien, de las verdades fundamentales para poder alcanzar la plenitud personal.

  • Cada carrera universitaria se centra en una parcela de realidad, sí, pero el universitario debe buscar las causas últimas de la realidad. Ser universitario, en este sentido, no es buscar el mero conocimiento "informativo" de la realidad sino vivir en las profundidades de la realidad y saborearla.