Colombia ha apostado por la cultura como uno de los principales motores para conseguir tan ansiada paz. Uno de los tesoros nacionales que vino a Madrid hace tres años fue la custodia de la iglesia de San Ignacio de Bogotá, conocida como «La Lechuga» por el color verde que le proporcionan sus 1.485 esmeraldas. Considerada una de las joyas religiosas más ricas y hermosas de Hispanoamérica, se expuso en el Prado.