Las gotas de lluvia tienen forma de lágrima

Antes de que pongas el grito en el cielo, tengo que decirte que la Falacia de hoy está vivita y coleando. Puede que a algunos lectores les parezca algo básico, pero no creo que esta sección de El Tamiz estuviera completa sin una referencia a las gotas de lluvia, que siguen siendo representadas igual. El mito a destruir hoy es: Las gotas de lluvia, cuando están cayendo, tienen forma de lágrima (redondeada por abajo, alargada por arriba).

Como digo, esta mala concepción no sólo no ha desaparecido, sino que se ve en muchos sitios. Acabo de mirar imágenes en la red y, de hecho, hay pocas que muestren las gotas como son. Casi todos los libros de niños (y no tan niños) muestran las gotas de lluvia de la misma manera. ¡Tanto que a esa forma muchos llaman “forma de gota“!

Gotas en forma de lágrima. Mentira.

Pero no sólo las publicaciones hechas por gente que tal vez no sabe lo suficiente cometen el error. Los meteorólogos también. Uno de los primeros enlaces que he encontrado con las mismas “gotas de lluvia” es la Met Office británica (el Instituto Nacional de Meteorología del Reino Unido), donde puedes ver una animación que “explica” cómo caen las gotas de lluvia. ¿Falacia básica? Pues parece que no tanto.

El origen de esta idea falsa se encuentra, sin duda, en que cuando observas una gota colgando de algún objeto, indudablemente tiene forma de lágrima:

Gota colgando de un trozo de hielo.

Por razones que no entiendo, parece que mucha gente piensa que cuando la gota está en el aire tiene la misma forma. Pero no es así en absoluto, pues las condiciones no tienen nada que ver. La gota que cuelga en la fotografía tiene un alargamiento en la parte de arriba porque está sujeta por el hielo, lo mismo que las que cuelgan de un grifo o la hoja de un árbol. ¿Qué “sujeta” la parte de arriba de una gota que cae en el aire en caída libre?

De hecho, ya hemos hablado en una entrada reciente acerca de lo que pasa si estás en caída libre: para ti “no hay gravedad“. De hecho, si una gota cayese en el vacío (si no hubiera atmósfera) sería perfectamente esférica. Esto hace que a veces la gente que quiere ser “correcta” dibuje las gotas de agua como esferas – pero sólo las más pequeñas son esferas. En cualquier caso, es muchísimo más correcto decir que las gotas de lluvia tienen forma esférica que decir que tienen forma de lágrima. “Las gotas de lluvia son esféricas” es una aproximación razonable. “Las gotas de lluvia son lágrimas” es una mentira como un piano de cola.

Pero como cuando una gota cae sí que hay aire, y el aire la frena, la parte inferior de la gota (que recibe el impacto del aire según va bajando), si la gota tiene un tamaño decente, se “achata”, de manera que la gota no tiene forma de esfera. La forma de una gota típica (ni muy grande ni muy pequeña) cuando está cayendo es algo así:

Gota de agua cayendo (Crédito: Max Planck Institut für Chemie).

Si te fijas, tiene una forma parecida a la de una gota de mercurio sobre una mesa: porque las fuerzas son similares, una hacia abajo (el peso de la gota) y otra hacia arriba que la “sujeta” (la creada por la mesa en el primer caso, la fuerza del aire en el segundo). De modo que cuando las gotas reales no son esferas (que es en cuanto tienen un cierto tamaño) no se alargan como una lágrima sino que se achatan como una hamburguesa. Justo lo contrario de lo que dice laFalacia.

¿Por qué no vemos esto cuando miramos la lluvia? Porque las gotas caen demasiado rápido: cuando miras llover ves una especie de “líneas” o trazas, porque tu ojo no es capaz de “parar” la gota, sino que la ve a lo largo de una décima de segundo, de modo que a ti te parece que es una línea cuando en realidad es la gota moviéndose por el aire (puedes ver las gotas “de verdad” si utilizas, por ejemplo, una luz estroboscópica). Dibujar la lluvia como un conjunto de líneas verticales es realista, en el sentido de que es lo que ve nuestro ojo. Lo que nunca, jamás, habrás visto es una gota de lluvia cayendo en forma de lágrima. Desterremos esta idea absurda que no acaba de desaparecer.

Pero bueno, Pedro, puedes decir, ¿no eres tú el que siempre dices “antes simplista que incomprensible”? ¿No es ésta una simplificación aceptable para mostrar un símbolo que todo el mundo entiende, y para enseñar a los niños?

No. La “gota en forma de lágrima” no simplifica nada – lo cambia gratuitamente. En todo caso, lo complica: una esfera es muchísimo más simple que una lágrima. Es cierto que todo el mundo ya lo tiene como “símbolo de la lluvia”, pero la única razón es que nos bombardean con él todo el tiempo en la televisión y los periódicos (y los libros de texto). Si estos medios pusieran una imagen más real (y hay algunos, pocos, que lo hacen) la gente se acostumbraría a ver gotas redondas y no habría ningún problema.