Memoria a largo plazo (MLP)
Memoria a largo plazo (MLP)
La memoria a largo plazo (MLP), memoria inactiva o memoria secundaria permite almacenar recuerdos por un periodo de tiempo amplio y, en ocasiones, esos recuerdos se mantendrán intactos durante toda la vida salvo enfermedad degenerativa o accidente. Por lo tanto la memoria a largo plazo es un sistema de almacenamiento de la información a largo plazo, es un conjunto complejo de sistemas especializado en adquirir distintos tipos de información. Estos sistemas interactúan para producir una conducta integrada y unitaria.
Las disminuciones con la edad en la ejecución en tareas de memoria episódica es uno de los fenómenos más evidentes asociado al envejecimiento. En general, las diferencias relacionadas con la edad son mayores cuanto más difíciles sean las tareas episódicas y cuando éstas implican procesamiento más deliberado, ya sea en la codificación o en la recuperación.
A veces nos inventamos la información porque estamos, siempre construyendo la información
La memoria a largo plazo se divide dependiendo de los conocimientos que hemos adquirido en dos grandes grupos, atendiendo a si el hipocampo es la región del cerebro de la que dependen esos recuerdos, en cuyo caso estamos antes la memoria explícita, o hablamos de memoria implícita en el caso contrario. La memoria explícita o memoria declarativa hace referencia a todos aquellos recuerdos que pueden ser evocados de forma consciente, como hechos o eventos específicos. La memoria implícita o memoria procedimental se basa en experiencias previas de aprendizaje que consiguen que accedemos a los recuerdos necesarios para repetirlas de forma inconsciente.Por ejemplo montar en bicicleta. García. (2020)
Existen dos grandes subtipos de memoria declarativa: episódica y semántica
Conocimiento semántico : La memoria semántica es la que permite el razonamiento abstracto-lógico y este a su vez ayuda a resolver problemas y crear nuevo conocimiento. No es exclusiva del ser humano, pero sí un rasgo distintivo que no comparten todas las especies animales y se puede decir que es una de las variables imprescindibles en la comunicación interpersonal y en el avance científico-tecnológico. Montenegro (2021)
Conocimiento del que disponemos y utilizamos sin saber en que contexto o situación de aprendizaje fue adquirido. Está almacenado si referencia al episodio de aprendizaje.
Se ocupa de los conocimientos generales sobre el mundo. Por ejemplo, poder realizar una sencilla operación matemática o recordar cómo funciona un mechero, o podemos saber que un bolígrafo sirve para escribir y es muy probable que no recordemos quién nos lo explicó, ni cómo nos sentimos en aquel momento conocimiento del que disponemos y utilizamos sin saber en qué contexto o situación de aprendizaje fue adquirido. Está almacenado si referencia al episodio de aprendizaje. García (2020)
La memoria semántica se puede definir como un tipo de memoria de significados y conocimientos generales en la que no intervienen nuestras experiencias concretas, ni el recuerdo de sucesos puntuales.
Por ejemplo, para responder a la pregunta “cuantas horas tiene un día” no es necesario evocar ningún momento concreto de nuestra vida en el que hayamos aprendido ese conocimiento. La memoria semántica nos permite recordar “automáticamente” que un día tiene 24 horas, sin necesidad de evocar sucesos concretos que nos recuerden ese conocimiento. Nos permite almacenar recuerdos durante días, décadas o años.
No tiene límite de capacidad ni duración. La memoria semántica es tan extensa como los conocimientos que podamos tener. Por ejemplo, si queremos recordar que el león es un animal mamífero y tiene 4 patas, no será necesario relacionarlo con ningún acontecimiento específico que nos haya ocurrido con leones, nuestra cabeza va mucho más rápido. Rodríguez (2018).
a) Multitud de situaciones de aprendizajes independientes, de las que se abstraen los contenidos centrales.
La memoria semántica es fundamental para nuestro día a día. Por ejemplo, la memoria semántica, nos permite saber “automáticamente” que un león es un mamífero, sin necesidad de que tengamos que repasar mentalmente todos los leones que hemos visto en nuestra vida, ni pensar en los tipos de leones que existen.
Nuestra memoria semántica nos permite proporcionar un significado general a la palabra “león”: Animal mamífero de cuatro patas, grande, con mucho pelo rodeando su cabeza...
Si tuviéramos que pensar en todos los leones que existen en el mundo para poder recordarlos y describirlos, sería imposible. Por tanto, la memoria semántica es la mayor garantía de que podamos englobar múltiples conceptos concretos (animales, personas, objetos…) en un solo con concepto general. Esto se organizará mediante infinidad de categorías (animales, objetos, seres vivos, seres no vivos, mamíferos, reptiles, etc). Rodríguez (2018).
b) Mediante el lenguaje transmitiendo directamente las abstracciones.
La memoria semántica es necesaria para recordar los conceptos que tenemos sobre el mundo, y también, es necesaria para hacer un uso adecuado del lenguaje. Rodríguez (2018).
Es un conocimiento altamente integrado. Los conocimientos nuevos se relacionan con los anteriores conduciendo a una visión global. Nos permite utilizarlo para razonar y extraer conclusiones.
Por ejemplo en el colegio, cuando avanzamos en una asignatura de materia, tenemos que entender lo anterior para poder entender lo siguiente, pues en danza pasa lo mismo sino sabemos el conocimiento de como se hace una preparación de pirueta a la hora de pasar al centro para hacer piruetas no vamos a saber realizarlas ya que no tenemos el conocimiento anterior, también un ejemplo claro es que primero tenemos que saber andar para luego poder correr ya que si no sabes andar te caes y si te caes no puedes correr.
Esta visión integrada constituye el objetivo principal de la educación formal, pero no el conocimiento semántico no se adquiere solo mediante la educación formal.
DIFERENCIA ENTRE LA MEMORIA EPISÓDICA Y LA MEMORIA SEMÁNTICA:
La memoria episódica es la encargada de proporcionarnos recuerdos autobiográficos, como por ejemplo, “¿qué he desayunado hoy?” o “¿Qué hice el fin de semana?”. Por tanto, la gran diferencia entre estos dos tipos de memoria, es que la memoria semántica, es un diccionario de palabras y sucesos del mundo sin necesidad de recurrir a nuestra experiencia, y la memoria episódica es como un diario personal, formado por nuestras experiencias. Rodríguez (2018).
Fuente: Piquero (2021).
Conocimiento procedimentales : (Aprender cómo se hacen las cosas). Tiene la función de almacenar el conocimiento adquirido frente a nuestras habilidades y destrezas, es decir, permite recordar nuestros hábitos y habilidades ya aprendidos, como ir en bicicleta o conducir. Se aprende gradualmente a base de repeticiones y retroalimentación, de modo que se convierten en acciones automatizadas gracias a la práctica. Thomen (2019).
Se basa en experiencias previas de aprendizaje que consiguen que accedemos a los recuerdos necesarios para repetirlas de forma inconsciente. El ejemplo típico de memoria implícita es montar en bicicleta. García (2020)
Conocimiento práctico acerca de cómo se hacen los movimientos que se necesitan en una tarea y como se utiliza la información sensorial para controlar esos movimientos en esa tarea. Es muy importante en la danza. Por ejemplo cuando aprendimos a montar en bici.
Se refiere a todo el conjunto de habilidades perceptivo motoras. Por ejemplo cuando aprendimos a hacer una pirueta, no lo sabemos ya que lo tenemos tan dentro que lo realizamos ya, sin saber que se hace primero y sin acordarnos de cómo o aprendimos.
Se parece al conocimiento semántico en que es un conocimiento almacenado sin referencia al episodio concreto de aprendizaje. Y se diferencia en que no se puede transmitir de manera efectiva mediante el lenguaje, es decir no se ve a simple vista.
Por ejemplo cuando queremos aprendernos una coreografía, tenemos que repetir los pasos muchas a veces hasta que nos salgan y nuestro cuerpo los asimile.
El aprendizaje procedimental es la adquisición de nuevas habilidades de procedimiento, que luego pueden ser recordadas por la memoria cuando sea necesario. La adquisición de nuevas habilidades requiere sobre todo práctica, aunque la práctica no garantiza por sí misma la adquisición de una habilidad. Piénsese en una lección de conducción: mientras no se adquiera la habilidad, es necesario un esfuerzo cognitivo para poner en práctica los gestos y comportamientos individuales que sirven para conducir un coche. Una vez adquirida la habilidad, se puede invocar a la memoria de forma automática y sin esfuerzo consciente.
Se dice que los músicos, bailarines y los atletas profesionales sobresalen, en parte, por su capacidad superior de formar memorias procedimentales. La memoria procedimental también es importante en el desarrollo del lenguaje, ya que permite a una persona hablar sin tener que pensar mucho en la gramática y la sintaxis correctas. Algunos ejemplos de actividades que dependen del procedimiento: Tocar el piano, bailar, esquí, patinaje sobre hielo, jugar al fútbol, nada… Francia (2021).
Conocimiento Episodio o autobiográfico : Almacena los recuerdos que hacen referencia a los sucesos biográficos y personales de cada uno. Nos permite recordar qué cenamos anoche o cómo fue nuestro primer día en la universidad. Thomen (2019)
Es la relacionada con sucesos específicos vividos. En algunas enfermedades neurodegenerativas que afectan a la memoria episódica se observa que los recuerdos afectados comienzan siendo los más próximos en el tiempo y son los recuerdos de la infancia los últimos que se pierden.
Constituye el conocimiento que todos sabemos adquirimos y recordamos: Que pasó en una situación concreta de aprendizaje y cuando esta tuvo lugar.
Seguramente, recuerdas algunos momentos de tu pasado: un cumpleaños, una conversación con alguien especial, el día de tu boda... y también recordarás distintos momentos dolorosos como una ruptura amorosa o el día en el que falleció un ser querido. Todo ello son ejemplos de memoria episódica. Todos estos momentos son "episodios" de tu vida, partes de tu biografía, y puedes recordarlos gracias a la labor que hace, a través del lóbulo temporal medial y de la corteza prefrontal, la memoria episódica. En el momento en el que te estaba ocurriendo ese suceso tan importante, tu cerebro estaba trabajando para guardarlo y que días, meses, e incluso años después, puedas recordarlo. Silgado (2021).
Fuente: elaboración propia
Los podemos clasificar a partir de dos procesos mentales:
Procesos de codificación(entrada de la información)
Es el proceso mediante el que incluimos nueva información en la MLP:
Convierten la información en códigos que son estables en el tiempo. Por ejemplo cuando pasamos los apuntes a limpio nos vamos quedando con parte de la información y entendiéndola.
Grado de aprendizaje depende del grado de riqueza, elaboración y organización de la huella de memoria: estructura interna de la huella. El grado de aprendizaje depende del grado de vinculación de la huella de memoria con el conocimiento ya existente, del que nos dispone la persona previamente al episodio de aprendizaje: estructura externa de la huella, es decir el conocimiento anterior ya lo tenemos asimilado o no.
Obtenemos información en nuestros cerebros a través de un proceso llamado codificación, que es la entrada de información en el sistema de memoria. Una vez que recibimos información sensorial del entorno, nuestros cerebros la etiquetan o codifican. Organizamos esa información con otra información similar y conectamos nuevos conceptos a conceptos existentes. La información de codificación ocurre a través del procesamiento automático y el procesamiento intensional. Por ejemplo, si alguien te pregunta qué comiste hoy, es muy probable que puedas recordar esta información con bastante facilidad. Esto se conoce como procesamiento automático la codificación de detalles como el tiempo, el espacio, la frecuencia y el significado de las palabras. El procesamiento automático generalmente se realiza sin ningún esfuerzo consciente.
Recordar la última vez que estudiaste para un examen es otro ejemplo de procesamiento automático. Pero ¿qué pasa con el material que estudiaste para ese examen? Probablemente requirió mucho trabajo y atención de tu parte para codificar esa información; esto se conoce como procesamiento con esfuerzo. Cuando alguien aprende nuevas habilidades, como conducir un automóvil, debe esforzarse y prestar atención para codificar información sobre cómo arrancar un automóvil, cómo frenar, cómo girar, etc. Una vez que sepa conducir, podrá codificar información adicional sobre esta habilidad de manera automática. Paris(2021)
Procesos de recuperación
Son los procesos mentales que aceden a la información que necesitamos, aquellos que acceden a los contenidos almacenados, la no accesibilidad no implica que esta haya desaparecido. A veces no encontramos la pista que nos conduce a la información deseada.
Es muy importante en la efectividad de una pista que haya sido relacionada con la información adquirida en el momento de aprendizaje: clave de recuperación.
Así que trabajaste arduamente para codificar mediante un procedimiento laborioso y almacenar información importante para tu próximo examen final. ¿Cómo recuperar esa información del almacenamiento cuando la necesitas? El acto de sacar información del almacenamiento de la memoria y volver a la conciencia se conoce como recuperación. Esto sería parecido a encontrar y abrir un documento guardado en el disco duro de un ordenador. Ahora está de vuelta en su escritorio, y puede trabajar con él nuevamente. Nuestra capacidad de recuperar información de la memoria a largo plazo es vital para nuestro funcionamiento diario. Uno debe ser capaz de recuperar información de la memoria para hacer todo, desde cómo cepillarse el pelo y los dientes, hasta conducir al trabajo y saber cómo realizar su trabajo una vez que llegue allí. Paris, J. (2021)
Por lo tanto el olvido es un problema de recuperación y no de pérdida de información.
---- Estrategias de recuperación ---
Disponibilidad vs accesibilidad / recuerdo vs reconocimiento: En los test de recuerdo la persona debe generar por ella sola los contenidos almacenados en su MLP. A diferencia de los test de reconocimiento, estos contenidos se presentan mezclados con otros que no estuvieron presentes en el episodio de aprendizaje y la persona debe distinguir unos de otros, estos son mejores que la de los test de recuerdo.
Claves de recuperación: Información relacionada con un material ya dado y este permite su acceso. Son efectivas si los contenidos fueron relacionados con ese material en el momento de aprendizaje. Son importantes para cuando hacemos un esfuerzo por recordar.
Recuperación de memoria a largo plazo (Sistema de almacenamiento) Recordar, reconocimiento, reaprendizaje y olvido.
Hay tres formas de recuperar información del sistema de almacenamiento de memoria a largo plazo: recuperación, reconocimiento y reaprendizaje.
Recordar es lo que pensamos con mayor frecuencia cuando hablamos de recuperación de memoria: significa que puede acceder a la información sin señales. Por ejemplo, recordaría que tiene un examen.
El reconocimiento ocurre cuando identifica información que ha aprendido previamente después de encontrarla nuevamente. Implica un proceso de comparación. Cuando realiza un examen de opción múltiple, confía en el reconocimiento para ayudarlo a elegir la respuesta correcta.
La tercera forma de recuperación es el reaprendizaje, y es exactamente lo que parece, implica aprender información que se aprendió previamente. Whitney tomó español en la escuela secundaria, pero después de la escuela secundaria no tuvo la oportunidad de hablar español. Whitney ahora tiene 31 años, y su compañía le ha ofrecido la oportunidad de trabajar en su oficina de Ciudad de México. Para prepararse, se matricula en un curso de español en el colegio comunitario local. Está sorprendida de lo rápido que puede aprender el idioma después de no hablarlo durante 13 años; Este es un ejemplo de reaprendizaje.
Olvido (lo que no se quedó grabado) Como acabamos de aprender, el cerebro debe trabajar (procesamiento con esfuerzo) para codificar la información y moverla a la memoria a corto plazo y, en última instancia, a largo plazo. Esto tiene fuertes implicaciones para un estudiante, ya que puede afectar su aprendizaje: si uno no se esfuerza para codificar y almacenar información, es probable que se olvide. Investigaciones indican que las personas olvidan el 80 por ciento de lo que aprenden solo un día después. Esta estadística puede parecer no muy alentadora, dado que se espera que aprenda y recuerde todo lo que estudia como alumno universitario.
Sin embargo, señala la importancia de una estrategia de estudio que no sea esperar hasta la noche anterior a un examen final para revisar las lecturas y notas de un semestre. Cuando aprende algo nuevo, el objetivo es grabarlo, mientras más pronto, mejor, y moverlo de la memoria a corto plazo a la memoria a largo plazo, donde se puede acceder a él cuando lo necesite (como al final del semestre para su examen final o tal vez en los siguientes años). La siguiente sección explorará una variedad de estrategias que pueden usarse para procesar información de manera más profunda y ayudar a mejorar la recuperación Paris, J. (2021).
---Fases de funcionamiento de la memoria a largo plazo---
Según Thomen (2019) la memoria cumple diferentes funciones siguiendo tres fases determinadas, la codificación, el almacenamiento y la recuperación. Estas tres fases permiten que un aprendizaje pueda consolidarse, sostenerse en el tiempo a partir de su almacenamiento y finalmente ser recuperado en el caso de ser necesario. Las fases de funcionamiento de la memoria a largo plazo son las siguientes:
Codificación: los inputs externos recibidos del exterior son procesados por la persona que los percibe. Posteriormente, se les atribuye un significado a partir de la transformación de los distintos códigos verbales, visuales y/o sensoriales que se perciben.
Almacenamiento: los distintos significados elaborados en la codificación se retienen en el cerebro. La retención será distinta en función del tipo de memoria que entre en juego, en la memoria a largo plazo el mensaje guardará almacenado durante un período más extenso que la memoria a corto plazo.
Recuperación: cuando la persona necesita evocar la información almacenada, da lugar a la fase de recuperación, en la cual se recupera la información que había sido gravada en los recuerdos.
Cómo mejorar la memoria a largo plazo
Cada tipo de memoria, como la memoria a largo plazo o a corto plazo, pueden estimularse, desarrollarse y activarse, si se invierte tiempo en trabajarlas y se potencia un estilo de vida con hábitos saludables. Hay diferentes recursos que pueden contribuir a una mejor estimulación de los sistemas de memoria. ¿Cómo mejorar la memoria a largo plazo? Para mejorar la memoria a largo plazo es importante:
Estimular el cuerpo: muchos estudios defienden la correlación entre la realización de ejercicio físico y una mejor productividad en los sistemas de memoria.
Una correcta alimentación: además de una alimentación saludable, existen determinados alimentos que se relacionan con un incremento de la actividad de la memoria. Algunos de los alimentos para la memoria son el pescado azul, los frutos secos, las verduras verdes y las frutas (sobre todo las frutas rojas y las manzanas). No obstante, del mismo modo que nos encontramos alimentos que ayudan a estimular la memoria, hay un conjunto de alimentos que dañan nuestro cerebro, afectando con ello a la productividad de la memoria, como alimentos con altos contenidos de grasas saturadas, la carne roja, los alimentos fritos y la comida basura, los dulces y los pasteles, los quesos grasos y los alimentos con elevados contenidos en azucares o sal.
Descanso: del mismo modo que la estimulación física es muy importante para la activación de la memoria, las horas de descanso también son imprescindibles para su correcto funcionamiento, recomendando un sueño de 8 horas diarias.
Ejercicios para mejorar la memoria a largo plazo: para poder reforzar la memoria y darle un uso más productivo, el único modo no es a partir del estudio, existen muchos juegos que permiten la mejora de la memoria. Las dos tipologías de ejercicios que fomentan más el desarrollo, la estimulación y activación de la memoria a largo plazo son los ejercicios de concentración y los ejercicios de fluidez verbal.
Thomen (2019)