Las disfunciones atencionales ocurren si la atención falla sistemáticamente. La disfunción atencional está presente en múltiples trastornos neurológicos y psiquiátricos como el traumatismo craneoencefálico, depresión, ansiedad, esquizofrenia, trastorno por déficit de atención con hiperactividad, retraso mental. Batlle y Tomàs (2007).
Las difunciones atencionales más importantes son:
Ensanchamiento de la atención : El foco atencional es demasiado grande. por lo que se produce una sobrecarga de información.
Estrechamiento de la atención :El foco de atención es demasiado pequeño, por lo que no se procesa la información necesaria.
Laguna mental o lapsus atencional : No se recuerda lo que ha hecho en un pasado reciente. Por ejemplo cuando nos preguntan que hemos comido y no nos acordamos.
Fallos en la rapidez de las oscilaciones de la atención : La persona es muy lento para desplazar su atención de un objeto a otro.
Falta de intensidad : Si los estímulos que se presentan no son muy intensos no llegan al umbral de foco atencional.
Indiferencia : No muestra interés por los estímulos que le rodean. Por ejemplo cuando estas en una conversación y no prestas atención a lo que te están diciendo.
Curiosidad excesiva : Muestra demasiado interés por los estímulos, esto desemboca en una atención dispersa. Por ejemplo si tenemos muchas cosas que hacer pretendemos hacer todas, pero al final no llegamos a prestar atención a ninguna.
Hiperconcentración : Es una concentración excesiva en algún aspecto del ambiente. El sujeto no responde a otros estímulos del entorno que debería de atender.
Falta de concentración : Los niveles de concentración escasos. Se puede producir cuando hay poca motivación o el arousal es muy alto o bajo.
Distraibilidad o labilidad atencional : Falta de agudeza atencional por la incapacidad para no atender a estímulos irrelevantes o por una atención dispersa.
Fatigabilidad : Aparecen altos niveles de fatiga muy pronto.
Falta de recursos : No tiene suficientes recursos atencionales ( arousal bajo).
Fallo en los mecanismos de distribución : Tiene suficientes recursos pero no sabe organizarlos.
Esto puede conllevar a que aparezcan enfermedades mentales como el Trastorno por Déficit de la Atención (TDA) que se caracteriza por la presencia de impulsividad y falta de atención. Se trata de un síndrome o conjunto de características temperamentales, conductuales, de funcionamiento cognitivo, afectivo y biológico. Este trastorno aparece en personas desde los primeros años de vida incluso hasta la adultez. Se caracteriza por una dificultad o incapacidad para mantener la atención voluntaria frente a determinadas actividades.
Las personas que tenga hiperactividad reciben demasiados estímulos, sin embargo las que tienen déficit de atención tienen falta de recursos.
Jofre (2009).
Estos son algunos trucos para captar la atención de una persona, sobre todo en su niñez:
Utilizar menos palabras y más lenguaje corporal
Posiciónarte de frente y a su altura de la persona a la que nos dirigimos.
Hacer ver a la otra persona que estás disfrutando y sonríes.
Exagerar nuestra mímica facial y corporal, variando el tono de voz.
Navarro (2019).