3.1 Automatismo de Cuerpo y Mente 3.2 Los sistemas 3.3 Triple proceso
3.4 Acción subconsciente 3.5 ¿Libre albedrío, Voluntad?
Poderes invisibles
LA MECANICIDAD PSICOLÓGICA
Parte V
¿Libre albedrío, Voluntad?
¿Los humanos, tenemos libre albedrío, o condicionamiento impositivo, mecanicidad, automatismo…?
Nos mueven y conducen, nos hacen hacer, las rutinas, los deseos, interés, preferencia..., siempre condicionados. No una Voluntad real, libre, incondicionada.
Nos mueve el automatismo, la compulsividad, la mecanicidad de nuestra Mente.
Ejemplos de actos que se manifiestan automáticamente (que no precisan de voluntad):
- La necesidad que siento, el deseo, gusto, interés, preferencia... ¿Producto de "mi" libre albedrío?
Comer, beber, respirar.., ¿Se ejecuta gracias al libre albedrío?
¿Realizo por “libre albedrío" ir al trabajo, pagar con dinero, acudir a las citas sociales...?
¿Voy envejeciendo por libre albedrío?
- Cuando estamos alegres vemos la parte grata de las impresiones que nos llegan, de las cosas, de las personas. Pero si estamos de mal humor, o tristes, vemos lo negativo, lo oscuro.
La persona no está en el estado de ánimo o humor que quiere sino en el que concurren las circunstancias de su Sistema Mental.
Placer o dolor, pena o alegría, felicidad o sufrimiento... ¿Se producen por libre albedrío?
Mi cansancio, euforia, desaliento, ganas, desganas, gustos, disgustos… ¿son por libre albedrío?
- Las emociones, todas, se producen por propio impulso, automáticamente, al margen de la voluntad.
- El pensamiento y el sentimiento se producen quiera o no quiera el pensador, y aun en contra de "su" deseo.
El propio proceso de pensar, tanto el compulsivo como el racional, depende de la memoria, rutinas, deseos, estado de ánimo... del pensador, es un movimiento sistemático.
¿Puedo parar el pensamiento, al menos por un minuto, voluntariamente, por libre albedrío?
- Según el ego en el que nos encontremos así el deseo o voluntad psicológica que predominará.
-¿Quién quiere sufrir? Y sin embargo se sufre.
Cada persona puede verificar todos estos ejemplos -y si aspira a evolución es conveniente los realice-.
Para saber qué es la voluntad hay que desechar todo aquello que no es voluntad.
Para entender qué es la voluntad hay que diferenciarla de necesidad y deseo.
La necesidad es física, del Cuerpo, el deseo es psicológico, de la Mente.
¿Con qué querer quiero, con la necesidad, el deseo o la Voluntad?
La voluntad del Cuerpo físico (necesidad) y de la Mente psicológica (deseo) no es la Voluntad del Ser Consciente.
El Cuerpo no precisa para realizar sus movimientos de la voluntad, si de la necesidad (comer, beber, procesar los alimentos, respirar...). La Mente tampoco, si del deseo (preferencia, curiosidad, aspiración, capricho...).
Así como la Consciencia que actúa en el Cuerpo son las sensaciones y en la Mente son las percepciones (consciencia limitada).
Así como el Deleite que actúa en el Cuerpo es el placer y el dolor, y en la Mente la felicidad y el sufrimiento (Deleite limitado).
Observamos que la Voluntad que actúa en el Cuerpo es la necesidad, de obligado cumplimiento, y en la Mente el deseo, siempre condicionado, ambos limitados.
La Consciencia, el Deleite y la Voluntad reales, auténticos, incondicionados, libres... sólo pueden actuar desde el plano del Ser.
Cuando lo hace a través del Cuerpo o de la Mente son sucedáneos, derivados, digamos, no verdaderos, no auténticos.
Generalmente vivimos identificados con el Cuerpo y con la Mente, lejos de nuestro Ser y por tanto carecemos de la auténtica Consciencia, del verdadero Deleite y de la incondicionada y libre Voluntad.
Necesidad en el Cuerpo, deseo en la Mente, pero NO Voluntad.
También hay un amor físico, del Cuerpo, un amor psicológico, de la Mente y un Amor (real, verdadero) del Ser, Consciente (al que no tenemos acceso por estar dormidos).
Necesidad y deseo no es acción, es reacción. Los sistemas no hacen ni pueden hacer, siempre reaccionan.
Mientras continuemos identificados con el Cuerpo y la Mente no hay posibilidad de que el Ser se manifieste, la Consciencia se manifieste, la Voluntad se manifieste, el Deleite de la Existencia se manifieste, el Amor se manifieste.
Cualquier movimiento, y todo movimiento, que se produce en la Mente (pensamiento, deseo...) inhibe la Consciencia, la Voluntad, el Deleite, el Amor, la presencia del Ser.
Tanto las sensaciones como las percepciones, el placer y el dolor, la felicidad y el sufrimiento, la necesidad y el deseo pueden transformarse en Consciencia, Voluntad y Deleite, así como el amor físico y el amor mental. Pero eso será cuando despertemos del sueño de la Mente y entremos en la realidad del Ser. Una vez que el Ser se separe de la Naturaleza y se unifique con el Todo Uno. Esto no se realiza ni puede realizarse hasta que la Mente consiga una mínima evolución.
La necesidad del físico y el deseo del mental son la antesala, los precursores de la Voluntad real del Ser Consciente
Así como necesidad y deseo son pobre sombra de Voluntad, así felicidad de Deleite, sensación de Consciencia.
La necesidad y el deseo se imponen, nos arrastran, nos obligan..., la Voluntad es libre
Nos mueve el deseo, la necesidad.., usamos, erróneamente, el nombre de voluntad.
La voluntad queda condicionada cuando interfiere necesidad o deseo.
¿Y cuáles serían actos voluntarios?
Aquellos en los que esté presente, en alguna medida, el Ser
Será imprescindible que la Mente esté en silencio.
Sin este requisito, sin esta capacidad, no hay posibilidad de Voluntad.
También es importante contar con una Consciencia de Si
Contener el área física y el área mental -desidentificado el Ser de cuerpo, mundo y vida física y psicológica, los ve, los contiene, pero no se adhiere a estos instrumentos-
Veamos algunos ejemplos de actos voluntarios:
Suprimir hasta extinguir el sufrimiento inútil
Ahí interviene la Consciencia, el Ser, no el ego -elemento- sobre la Mente -sistema- que no sabría ni podría suprimirlo.
Suspender o contrariar alguna de nuestros cientos de rutinas
Desinhibirnos o negar alguno de nuestros continuos deseos (interés, preferencia, pasión, curiosidad, esperanza, aspiración, ambición, codicia, ganas, gusto, vicio, virtud, anhelo, desazón, afán, ardor, capricho, manía, enamoramiento, afición, envidia, apetencia...)
Transformar sensaciones físicas (del Cuerpo) en sensaciones conscientes
Transformar percepciones psicológicas (de la Mente) en percepciones conscientes.
Esta opción es extremadamente difícil -debido a que nuestra capacidad de "percepción" es altamente compulsiva -podemos hacernos conscientes de que estamos pensando pero difícilmente de la chispa que origina ese pensamiento (la chispa es la percepción propiamente dicha)-.
Sustraerse del poder que ejercen las emociones, comenzando por la nocivas.
Situarse y permanecer en un estado ecuánime, de igualdad, trascendiendo las dualidades (me gusta, no me gusta, bueno, malo, positivo, negativo...).
Transformar un estado de ánimo
Persistir en estado de calma, armonía, paz...
Cuando estamos dichosos, sin condiciones (Deleite consciente), aceptamos lo que es (Voluntad consciente)
Cualquier acto de atención voluntaria implica cierto grado de Voluntad consciente (no está incluida la atención común ni la atención atraída -motivada por una emoción, sensación, persona, evento...-)
Diferenciar entre el mero entender o conocer y el comprender (En 5 segundos se lee, se entiende, se conoce... En 5 segundos NO se comprende -aveces se precisan años-).
Lo que es,
lo que se realiza en cada momento,
AHORA,
es la Voluntad del UNO
Si estamos identificados con el Cuerpo y con la Mente,
y lo estamos,
es la Naturaleza quien se mueve
no la voluntad de algún yo (ego-mental)
Como la semilla crece y desarrolla lo que es,
así acaece al humano,
a pesar de voluntad e inconsciencia.
Parte I - Cuerpo y Mente son sistemas automáticos
Parte III - El ineludible triple proceso psicológico
Parte IV - La acción del subconsciente o rutinas
Originado: 13:07 del 6 Septiembre 2013
aurguki@hotmail.com