Contendientes durante la Guerra Civil

Se trata de sendos carteles de la Guerra Civil, cada uno de un bando diferente, el de la izquierda pertenece a los sublevados y el de la derecha a los republicanos. La propaganda gráfica se convirtió en un arma poderosísima de difusión de la ideología política en los años treinta, en la Gran Guerra ( I Guerra Mundial) fue utilizada con profusión, el régimen nazi haría también un uso intenso del recurso, pero sería en la Guerra Civil española donde adquirirá un desarrollo espectacular. 

Clasificación. Son sendas fuentes primarias, se elaboran en el mismo momento en que está desarrollándose la Guerra. Los dos tienen un carácter claramente político y propagandístico. El primero es del bando sublevado, pero no conocemos al autor, está editado por el Servicio Nacional de Propaganda y probablemente en 1939 o, incluso, 1940 cuando la contienda ya había acabado. El segundo fue publicado en 1937 y está firmado por Parrilla, un autor del que se conocen más de 13 carteles; pertenece al Sindicato de Profesionales de las Bellas Artes, adscrito a la UGT, por tanto, de ideología socialista. En los dos casos el destinatario es claro: la masa de población perteneciente a la zona en la que se publica, tiene, claro está un destinatario público. 

Las ideas principales. En el cartel del bando nacional se está justificando el alzamiento militar y posterior guerra como una cruzada y España se erige en “orientadora espiritual del mundo”. Para que un cartel sea eficaz debe haber poco texto y mucha imagen. Aquí el autor ha querido resaltar dos cosas: en primer lugar, como hemos dicho, que la guerra está justificada desde el punto de vista religioso, que tiene la legitimidad de una lucha justa en defensa de la religión católica, de ahí el término de “cruzada” que le da la Iglesia católica española a la contienda y que aparece en el cartel con letras grandes. En segundo lugar, España (se ve el mapa destacándose en el globo terrestre) es, además, la “orientadora espiritual del mundo”, trascendiendo esta lucha a la defensa de los valores de Occidente frente al enemigo de esos valores, suponemos que el marxismo, el ateísmo... que aparecen frecuentemente en los carteles nacionales. En la segunda imagen, editada por el bando republicano, vemos un llamamiento a la unidad -muy frecuente en este bando- en este caso entre las tropas de voluntarios de las Brigadas Internacionales con sede en Albacete, y los propios españoles contra el invasor, se refiere a las tropas italianas, alemanas y portuguesas que apoyan al bando franquista. El cartel se divide en varias partes, en la central aparecen dos soldados con fusiles en la mano y avanzando, como fondo y cerrando la composición triangular tenemos a una imagen femenina, es la alegoría de la República que asiste a estos soldados y porta la corona de laurel del triunfo. Entre los dos soldados aparece un círculo donde aparece la frase “Voluntarios internacionales de la libertad, 1936-1937”. Debajo está la leyenda, el mensaje principal: “Los internacionales, unidos a los españoles, luchamos contra el invasor”. El objetivo es suscitar apoyo a favor de esos voluntarios, principalmente comunistas que vienen a España a luchar contra el fascismo. En los dos casos encontramos dos documentos excepcionales para ver el soporte ideológico de los dos bandos contendientes. 

El marco histórico. Hay que considerar las causas, sobre todo ideológicas y políticas de la Guerra.  Citar el golpe de Estado y su fracaso y cómo se transformó en Guerra.  Ver brevemente cómo se internacionaliza el conflicto y los apoyos a ambos bandos a pesar del acuerdo de No Intervención. Importante alguna alusión al panorama internacional en un ambiente en el que la II Guerra Mundial se prevé inmediata.  Ver la justificación ideológica de la guerra en las dos partes: para los nacionales una cruzada contra el ateísmo, el marxismo y el anarquismo y una vuelta a la tradición; para los republicanos era la lucha contra el fascismo y la conservación de los logros de la República, para otros (anarquistas, POUM) la revolución obrera.  Aludir al final del conflicto y el triunfo de los sublevados. Más que nunca este contexto debe desarrollarse de manera sintética, resumida, y apoyarse en los dos documentos. 


Cita de referencia