La Salvación de tu alma es un proceso. Este proceso también se llama "arrepentimiento". Tiene un inicio, un desarrollo y un final.
Inicia cuando escuchas, crees y aceptas el evangelio.
Continúa cuando vives la vida cristiana, sirves en una iglesia y desarrollas tu espíritu.
Termina con la muerte y resurrección.
En el inicio o durante el desarrollo, tu proceso se puede detener o incluso revertir. Cuando el proceso se detiene se llama "Adormecimiento Espiritual". Cuando el proceso se revierte se llama "Apostasía"
Es tu sola y única responsabilidad hacer que tu proceso de salvación y arrepentimiento llegue a su final de manera satisfactoria. Los líderes espirituales y la iglesia son solamente ayudas en tu proceso pero no son responsables de tu avance.
Te presentamos 7 puntos que debes revisar, cumplir y recordar tanto para ti mismo, como para amigos, familiares y personas que estás guiando a Cristo:
2.- Creer y aceptar el Evangelio
3.- Arrepentirte de tus pecados (dejar de pecar)
6.- Mantener una lectura diaria de la Biblia
7.- Asistir a una Iglesia y ser un miembro activo en el servicio donde te necesiten.
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