Mazamorra de cochino (postre peruano)


Antigua

mazamorra

de cochino

Por: César COLOMA PORCARI

Presidente del Instituto Latinoamericano de Cultura y Desarrollo

Uno de los postres criollos más conocidos y apreciados es la “mazamorra de cochino”, que figura en una de las obras de la literatura peruana más notables de todos los tiempos.

Porque el genial Manuel Asencio Segura, en su famosa comedia “Ña Catita”, estrenada en el año 1865, burlándose de las personas improvisadas o falsas, se refiere a este apreciado postre, ofreciendo este festivo poema:

“Yo conozco cierta dama, / que con este siglo irá, / que dice que a su mamá / no la llamó nunca “mama”. / Y otra de aspecto cetrino, / que por mostrar gusto inglés, / diz que no sabe lo que es / mazamorra de cochino” (sic) (“Artículos, poesías y comedias de Manuel Asencio Segura”, Lima, Carlos Prince impresor y librero-editor, 1885, página 162).

Este gracioso poema también lo recoge Ricardo Palma (con algunas variantes), indicando que lo “dijo mi inolvidable amigo el festivo y popular poeta...”, agregando él, por su parte, que “Impulso de blandir la cachiporra / nunca a nadie inspiró la mazamorra / ...” (“Tradiciones peruanas”, Espasa-Calpe, 1983, tomo 2, página 183).

Hay que tener en cuenta que en la enciclopedia Espasa se indica que la mazamorra es una “Comida compuesta de harina de maíz con azúcar o miel, semejante a las poleadas, de que se usa mucho en el Perú”, y que en otros países la llaman “atole”, “gachas”, “puches” o “poleadas” (tomo 33, página 1370).

El Dr. Alberto Tauro del Pino en su “Enciclopedia ilustrada del Perú” (Lima, Peisa, Empresa Editora “El Comercio” S.A., 2001, tomo 10, página 1633), nos ofrece la receta, indicando que “la mazamorra de cochino... es hecha a base de clavos de olor, manteca, anís y una tapa de chancaca, la cual es hervida hasta diluirse; luego se agrega harina de maíz diluida y se deja cocinar hasta que tome punto”.

A disfrutar entonces de la sabrosa “mazamorra de cochino” que tanto gustó a Segura y a Palma, aunque una famosa huachafa cetrina no la quería recordar, por “mostrar gusto inglés”.

(Publicado en “El Comercio”, Lima, 19 de julio de 2004, página b-2).