Tema 1.  Origen e influencias

España es una de las naciones más antiguas de Europa. El concepto actual de nación es algo moderno, en la mayoría de los casos de muy pocos siglos, antes hay que hablar de los pueblos que formaban lo que es ahora una nación. Esos pueblos, esas culturas, esas civilizaciones, son el origen de lo que hoy somos, y debemos buscar en ellos la razón histórica de nuestro ser.

El término España viene del fenicio Hispania que es como los romanos llamaban a Iberia (griego). En ese sentido España debería referirse a toda la península pero la historia llevó a Portugal a no formar parte de esa unidad (salvo por 60 años, 1580-1640). Desde la unión de Castilla y Aragón con los Reyes Católicos se generaliza el término de España para referirse a la unión de ambos reinos.

En las páginas de Historiasiglo20.org y de arteHistoria podemos encontrar mucha más información y los videos de arteHistoria nos ofrecen un breve resumen de cada uno de los periodos de la historia de España.

A. Los primeros pobladores de la Península Ibérica

Las primeras muestras reales de la ocupación humana de la Península Ibérica las encontramos en las cuevas de Altamira, consideradas la "Capilla Sixtina del Arte Cuaternario". Aquí encontramos muestras del arte del hombre primitivo, en forma de grabados de figuras de los animales que cazaban. Las figuras, además del elemento estético, expresan muy fuertemente una intención religiosa o mágica, que tiene que ver con el culto a la caza. Se calcula que estos grabados fueron hechos hace unos 10.000 a 15.000 años.

a) Iberos y celtas 

Las tribus primitivas de la Península Ibérica fueron los iberos y los celtas.

Los iberos. No se sabe cuándo llegaron a la Península Ibérica, pero entre los siglos VI y II a.C. formaban una sociedad muy desarrollada. Provienen del norte de África y sobresalieron en la escultura, arquitectura, cerámica y orfebrería. La Dama de Elche, una escultura de busto de mujer de la primera mitad del siglo V a.C., es la obra de arte más importante de la cultura ibera.

En realidad no se trata de un pueblo único, sino de una serie de tribus, con lenguas diferentes y grados de civilización muy distintos. Entre estas tribus eran muy frecuentes las guerras y nunca lograron la unificación política.

Los celtas. Llegaron a España del norte de Europa alrededor del siglo VI a.C. Era un pueblo guerrero, con una cultura menos desarrollada que la de los iberos y se expandieron por toda la Península, excepto Levante y Andalucía. Más tarde fueron expulsados de la zona central de la Península por los iberos, y se refugiaron en Galicia y Portugal, donde los celtas dejaron su mayor influencia. Los romanos llamaron al los celtas, lusitanos, que es como todavía se conoce a los portugueses.

b) Fenicios, griegos y cartagineses

Los fenicios. (Siglos XI-V a.C.) Fueron los primeros en llegar a la Península desde las regiones más desarrolladas del Mediterráneo. Fundaron Gádir (actual Cádiz) alrededor del año 1100 a.C.  Los fenicios se dedicaron a la explotación de los metales preciosos y a la pesca.

Los griegos. (Siglos VII-III a.C.) Llegaron en el siglo VII a.C. y fundaron la ciudad de Emporion, (Ampurias). Al igual que los fenicios, colonizaron la zona del litoral de Levante, pero no penetraron el interior de la Península. Su objetivo primordial era el comercio, la industria y la agricultura. Introdujeron los cultivos de la uva y el olivo, y también las artes: teatro, poesía y filosofía.

Los cartagineses. (Siglos VI-III a.C.) En el siglo VI a.C., llegaron para proteger a los fenicios, y en el siglo III a.C. conquistaron toda la Península encontrando muy poca resistencia con la excepción de Sagunto, cuyos habitantes prefirieron morir antes que entregarse a los invasores.

Pero ninguno de estos pueblos tuvo una influencia definitiva en la Península Ibérica como la tendrían los romanos.

B. Hispania: la influencia romana (218 a.C.-409 d.C.)

Los romanos llegaron a la Península Ibérica el año 218 a.C., cuando un ejército del Imperio desembarca en Ampurias bajo el mando de Cneo Escipión. Sólo 200 años más tarde se puede hablar de un control total de Roma sobre el territorio de la Península.

Numancia, una pequeña ciudad en el norte de Castilla, es el símbolo principal de la resistencia a la conquista romana. Sus habitantes resistieron un sitio de 8 meses, y después de sufrir hambre y la pestilencia de sus propios muertos, prefirieron suicidarse antes que rendirse ante las fuerzas invasoras.

A los romanos se debe la unificación política de la Península Ibérica. Antes de su llegada, la Península era un simple concepto geográfico, habitado por un conjunto grande tribus de naturaleza muy heterogénea.

La unificación de Hispania, no solo política, fue la influencia principal de Roma. Podemos hablar de unificación:

Política: Establecieron una organización local en municipios por toda la Península con un carácter de democracia incipiente. En ellos, los hombres libres elegían por votación a sus magistrados y funcionarios, en cuyas manos recaía toda la administración local.

Jurídica: El Derecho romano constituye la contribución más efectiva y duradera de los romanos no sólo a España sino a todo el mundo occidental. El Derecho romano afirma los derechos del individuo, dentro de la familia y de la propiedad privada, con lo que se cambió radicalmente la vida pública de los pueblos indígenas, cuyo principio básico era el colectivismo.

Lingüística: El latín vulgar, que hablaban los soldados y colonos que llegaron a la península, se convirtió en la lengua común para todos. Este latín vulgar será más tarde la base de las lenguas románicas (Romance Languages) de Europa, entre las que se incluye el castellano o español.

Urbanística: Para que la unificación política fuera efectiva, los romanos construyeron una inmensa red de carreteras y puentes que permitía viajar por toda la Península. Además construyeron magníficos acueductos, como el de Segovia, que aún sigue en pie. También construyeron impresionantes templos, anfiteatros, circos y baños, en las principales ciudades de Hispania. De éstos últimos sólo quedan ruinas, pero ellas nos permiten tener una idea del gran progreso urbano que Hispania experimentó bajo el dominio de Roma.Literaria: Los romanos trajeron a Hispania no sólo su literatura, mitología y cosmogonía, sino también la de los griegos clásicos, considerados sus maestros. La literatura greco-latina ha jugado un papel vital en el desarrollo de toda Europa.

Religiosa: Durante la época romana se introduce en Hispania el cristianismo, que resultará más tarde en la religión católica, definidora de buena parte del carácter del pueblo español. Al principio, ya en el siglo I, las comunidades cristianas eran perseguidas y de ellas salieron un buen número de mártires y santos, cuya memoria aún forma parte de las tradiciones populares y religiosas del pueblo español. Después, cuando el Imperio acepte la religión cristiana oficialmente, su influencia será mucho más grande.

Pero España también tuvo influencia en Roma, como las riquezas de metales preciosos (oro y plata), lana, trigo, aceite y vinos. También hubo grandes escritores y filósofos nacidos en Hispania, como: Séneca (3-65 d.C.), nacido en Córdoba, escritor de teatro y filósofo; y su sobrino Lucano (39-65 d.C.), también de Córdoba, poeta de gran renombre. España dio también emperadores a Roma: Trajano, Adriano y Teodosio, nacieron en Hispania, y contribuyeron a la unificación geográfica, cultural y espiritual del Imperio.

C. El estado visigodo

Los visigodos llegaron a la Península Ibérica como "huéspedes" del Impero Romano pero con la decadencia y ruina del estado romano se convertirían en la clase dominante, estableciendo un nuevo estado nacional con el rey Eurico (466-484).

Los visigodos adoptaron la cultura de los romanos, para el funcionamiento de su estado, su lengua, sus leyes, etc. También adoptaron la religión católica, con la conversión del rey Recaredo en 589, durante el concilio III de Toledo, completando la unificación de España. La Iglesia alcanza un papel muy importante, más aún que con los romanos y estará desde entonces muy unida al poder político. Los reyes se conocerán como “católicos” y lucharán por la reconquista de España y la “conquista” del mundo en nombre de Dios y de la Iglesia Católica.

La figura cultural más importante de esta época es San Isidoro (570-636), arzobispo de Sevilla, cuya obra, Etimologías, resume enciclopédicamente el saber de los pueblos antiguos, a partir de autores clásicos griegos, latinos y hebreos.

D. Al Ándalus: la España musulmana

Los árabes llegaron a España en 711. La invasión musulmana fue rápida y fácil debido al estado de descomposición y división en que se encontraba el Estado Visigodo: sólo les llevó 8 años conquistar casi toda la Península. Tras conquistar España, los árabes atravesaron los Pirineos e intentaron la conquista de Francia, pero fueron derrotados por Carlos Martel, en Poitiers, en 732. Con esa derrota, los árabes decidieron retroceder tras los Pirineos y afianzar los territorios conquistados en la Península Ibérica, que se conocerá a partir de entonces como al-Ándalus (origen del nombre Andalucía).

El estado árabe tenían una política de tolerancia hacia los vencidos lo que facilitó su conquista, pero también sería causa de su destrucción al permitir que los hispanos cristianos se unieran en causa común contra ellos. Los árabes no impusieron en los vencidos la conversión obligatoria a su religión. Quien quería permanecer como cristiano podía hacerlo, sólo que tenía que pagar impuestos adicionales. Exigían obedecer su autoridad y no ofender la religión mahometana pero podían conservar su fe. Muchos campesinos eligieron la conversión a la religión musulmana para no tener que pagar más impuestos.

El estado musulmán. En 756, Abderrahmán I, un príncipe emigrado de Damasco, proclama el Emirato Independiente de Córdoba rompiendo los lazos con oriente. Pero las rivalidades internas debilitan el poder central hasta que Abderrahmán III, en 929, logra la creación del Califato de Córdoba, con control total de la Península, y que además se convierte en la primera potencia marítima del Mediterráneo y uno de los estados más poderosos de Europa. El último gran caudillo musulmán fue Almanzor, "el victorioso", quien usurpó el poder del Califa para mantener la autoridad del poder central, como dictador. Pero a su muerte en 1002, el poder central se desintegra.

Surgen entonces los pequeños reinos de Taifas (llegando a ser 26), que se establecen alrededor de las ciudades importantes de al-Ándalus, que se pasan el tiempo peleando y conspirando entre ellos, lo que facilitará la Reconquista de la Península por parte de los reinos cristianos del Norte. A mediados del siglo XIII los cristianos ya controlaban toda Andalucía, excepto Granada, que continuará bajo el poder musulmán hasta 1492 que será conquistada por los Reyes Católicos completándose la Reconquista y alcanzándose la unidad religiosa, cultural y política de España.

La cultura de al-Ándalus. Con el Califato de Córdoba en el siglo X, al-Ándalus alcanza un momento de brillantez política siendo además la civilización más avanzada del momento en todo el mundo occidental ya que permanece en contacto con los grandes centros culturales helénico y orientales, ahora bajo el dominio de los musulmanes, mientras que el resto de Europa ha quedado aislada completamente de los centros culturales de alrededor del Mediterráneo.

La capital del Califato, Córdoba, se convierte en la capital de la actividad intelectual para todo el Occidente y todos los europeos que querían obtener conocimientos científicos y técnicos debían acudir a Córdoba. Entre los conocimientos que se buscaban en Córdoba, se incluye las matemáticas y la medicina, así como las técnicas para producción de papel y vidrio.

Córdoba, que había sido la capital de la provincia Bética durante el Imperio Romano, se convierte ahora en la esplendorosa capital del estado musulmán en la Península Ibérica, y presenta un lujo que no existía en ninguna otra ciudad de Europa. En Córdoba se encontraban centenares de mezquitas, baños públicos y magníficas bibliotecas particulares, que demuestran el amor al conocimiento de los árabes.

Pero las luchas internas debilitaron el poder de al-Ándalus que se fraccionó en pequeños reinos de Taifas y con la conquista del último reino Nararí de Granada en 1492 terminaron los casi 8 siglos de presencia árabe en España.

La principal influencia musulmana fue la de transmitir los elementos de las culturas de los pueblos que ellos habían sometido anteriormente, dando vida nueva al entusiasmo intelectual por el conocimiento científico y las letras.

E. Otras influencias

Además de los pueblos que invadieron la península a lo largo de la historia hay que considerar otras tres grandes migraciones que también han dejado una profunda huella en España: los judíos, los gitanos e Hispanoamérica.

a) JudíosLa diáspora judía se esparció por todo el imperio romano y en España se estableció una importante comunidad, probablemente ya desde la llegada de los romanos. Se identifica España con la bíblica Sefarad, por lo que se conoce a los judíos españoles como sefardíes. Durante muchos siglos convivieron con cristianos y árabes llegando a producirse momentos de gran esplendor cultural gracias a la colaboración de las tres culturas, como la Escuela de traductores de Toledo, en los siglos XII y XIII. Pero la intransigencia de los católicos, empeñados en mantener la unidad religiosa y la pureza de sangre, unido al papel muy importante que los judíos ejercían en la economía del país, financiando las arcas del estado con préstamos que éste no podía devolver, propició el que fueran expulsados de España en 1492, si no se convertían al cristianismo. Algunos optaron por la conversión, real o fingida, pero muchos tuvieron que emigrar y todavía hoy es posible encontrar judíos sefardíes que han conservado el idioma y las costumbres de la España del siglo XV. Otras lecturas sobre este tema en la red: Los judíos en la España romana y visigoda, España judía, y La cultura judeo-española.

b) GitanosLos gitanos llegaron a España en el siglo XV y casi siempre han vivido como nómadas, conservando su identidad cultural sin mezclarse completamente con las otras capas sociales. La constitución española prohíbe toda discriminación por lo que no existe un censo oficial de los gitanos en España pero son más numerosos en Andalucía (un 5% de la población) donde han llegado a ejercer una gran influencia sobre todo en la música y el baile flamenco (a los gitanos se les llamaba también flamencos).

Puedes obtener más información en la red: gitanos.org;

En el video: Solo flamenco los mismos artistas, cantautores y guitarristas, nos dan su opinión sobre el orígen del flamenco.

c) HispanoaméricaEspaña cambió la historia de América pero no cabe duda que también América ha cambiado a España, tanto al ofrecer nuevas posibilidades a muchos españoles sin futuro en su país, como al dar asilo a miles de exiliados de la guerra. Pero en los últimos años, además, son muchos los latinoamericanos que buscan una vida mejor en España siendo ya más del 5% de la población total.

Lecturas en la red: Solidaridad y memoria con la inmigración latinoamericana y Lengua y migraciones.

F. Diversidad cultural de la península Ibérica

Todas las influencias que hemos visto nos hacen ver que España tiene una gran riqueza cultural, pero los conceptos español y castellano se suelen confundir y conviene aclarar que en la península ibérica, además de Portugal, conviven muchas culturas, no solo la castellana. Castilla es solo uno de los muchos reinos, de los más pequeños en su origen, pero que llegó a expandirse por casi toda la península, especialmente durante la reconquista, pero no es la única identidad ni la única lengua de España. Al decir español habría que incluir a todas las culturas que forman hoy la geografía de España. Esa es la intención de la Constitución española que estudiaremos en otro tema, reconocer la variedad y riqueza cultural de España otorgando el derecho de autonomía a las 17 regiones de España. De todas ellas, las que más arraigado tienen el sentimiento nacionalista son: Catalanes; Vascos; y Gallegos.  En el siguiente tema estudiaremos con más detalle las autonomías y nacionalismos de España.

En la serie de la BBC, Una España, culturas diferentes, podemos ver un breve resumen de diferentes regiones con grabaciones sonoras para cada una.

 

Preguntas de comprensión.  Di si son verdad las siguientes afirmaciones y corrígelas si no lo son:

1. Los celtas estaban más desarrollados que los iberos.

2. Fenicios y griegos se esparcieron por toda la península.

3. Los romanos conquistaron Hispania en poco tiempo.

4. Los visigodos vencieron a los romanos y se apoderaron de Hispania.

5. Los musulmanes no pudieron conquistar Hispania por lo que intentaron conquistar Francia.

6. Los judíos apenas influyeron en España.

 

Preguntas de opinión.  Expresa tu opinión sobre los siguientes temas:

1. ¿Qué pueblo ejerció una mayor influencia en la formación del carácter español? ¿Por qué?

2. ¿Cuál es el principal legado de los romanos?

3. ¿Podríamos considerar a los visigodos como el embrión de la futura España?

4. ¿Cuál es la influencia más importante de los árabes en España?

5. ¿Qué otras culturas influyeron en la española?

Expansión:

Haz un resumen de cada uno de los puntos de este tema. Usa también los artículos y videos online.

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