10- ABRIL- 2025
El Colegio Nebrixa revive la tradición con la exposición de “Pasitos de Semana Santa”, una iniciativa del área de religión con un enfoque artístico, cultural y solidario
El Colegio Nebrixa vuelve a llenar nuestro Hall de emoción, arte y tradición con la exposición anual de “Pasitos de Semana Santa”, una actividad impulsada desde el área de Religión por la maestra especialista Mariló. Esta entrañable iniciativa, que ya se ha consolidado como una cita esperada cada primavera, continúa creciendo y ganando reconocimiento por su valor educativo y humano.
En esta exposición, el alumnado presenta pequeñas recreaciones de pasos procesionales, elaborados con mimo, detalle y creatividad. Estos “pasitos” no solo representan escenas tradicionales de la Semana Santa, sino que también son una muestra del talento artístico y del trabajo colaborativo entre los estudiantes. Gracias a la dedicación de Mariló, esta muestra se ha convertido en un auténtico museo escolar que invita a conocer, desde la infancia, el patrimonio cultural de nuestra tierra.
Aunque la Semana Santa tiene raíces religiosas, la exposición va mucho más allá del hecho de la fe. Se trata de una actividad integradora que conecta al alumnado con el arte, la historia, la cultura popular y la tradición local, permite conocer una parte fundamental del patrimonio andaluz desde una perspectiva artística y pedagógica.
El proceso de creación de los pasitos estimula la creatividad, la expresión plástica, el trabajo en equipo y la sensibilidad estética, y ofrece una oportunidad única para que el alumnado se exprese a través de una tradición que forma parte del imaginario colectivo de nuestra comunidad.
Este año, muchos de los pasitos han sido prestados con orgullo a la Asociación de Alzheimer de nuestro pueblo, donde permanecerán expuestos durante toda la Semana Santa en su sede . Esta colaboración tiene un valor emocional incalculable tanto para los jóvenes creadores como para los usuarios del centro, que pueden disfrutar de estas pequeñas obras de arte cargadas de simbolismo y cariño.
“Para el alumnado es una enorme satisfacción saber que su trabajo está siendo contemplado y valorado fuera del colegio, especialmente en un lugar tan especial como el centro de Alzheimer, donde los pasitos despiertan recuerdos, emociones y conversación entre los mayores”, comenta Mariló con entusiasmo.
El éxito de esta exposición reside en su capacidad para unir generaciones, transmitir valores, conservar tradiciones y fomentar el arte desde edades tempranas. Con cada edición, el proyecto crece no solo en número de pasitos, sino también en ilusión, compromiso y participación.
Así, el Colegio Nebrixa demuestra, un año más, que educar también es celebrar lo que nos une: la creatividad, el respeto por la tradición, la solidaridad y el deseo de construir puentes entre pasado y presente. Porque en estos pequeños pasos, hay grandes lecciones.