Versión en lirismo libre: del italiano al español
Crucifijo minúsculo
No quiero renunciar a esta alegría
que demasiado pronto, en el secreto
de mis más íntimos, recónditos manejos
deshace el hielo del sudor, de las
intentonas fallidas... Ya conozco el juego:
¡no cambio gozo por remordimiento!
Y sin embargo hay veces en que siento
trabas, manos, represas que me oprimen...
¿Es Él? La ayuda Suya es que adivine
juego en el juego mío, fuego Suyo
dentro del fuego; inciso en que él incide.
¡Su designio sin dedo que designe!
En Él no pienso ni mi lengua dice
Su nombre, mas, de pronto, inesperados,
comparecen Sus ángeles extraños,
irrumpen en mi vida, en ella rompen
hilos cabales y destrozan lazos:
ríe mi presa, sin saberlo, a salvo.
(Aquel día su ángel era un manso
grave y serio campesino joven
QUE ME VIO; la otra vez era una torre
de viento atroz que me mantuvo FIRME.
Y fue otra vez la diminuta efigie
de un Cristo que toqué crucificado
en la tábula rasa ─cielo raso─
del pecho que palpaba con la mano.)
De Pier Paolo PASOLINI: L'usignolo de lla Chiesa Catolica [1958], sección III, Lingua [1947]. Torino. Einaudi. 1976. Pág. 68.
Pier Paolo Pasolini nació en Bologna en 1922, y murió ─lo murieron─ en Roma, 1975.