Nunca el Karma había sido tan contundente en su mensaje, y es que el resultado aplastante de la semana fue propinado por unos Quesobritas que están en una racha de victorias que no pareciera que pudiera llegar pronto a su fin.

Los Zorritos llegaron al encuentro plagado de bajas y ausencias por descansos pero aun así con lo suficiente para plantar cara y llevarse la victoria ante la más mínima oportunidad que se presentara.

Pero no sería así… empezaría la actividad hasta el domingo con los juegos de medio día ya que los movimientos en el calendario no nos dejaron un juego de jueves por la noche. Poco y nada pudieron hacer las zorritas enchiladas que nunca pudieron darle la vuelta a sus posibilidades y antes de llegar a las 3 pm ya depositaban todas sus esperanzas en el siempre confiable QB de Green Bay, pero… sorpresa jijuelaverga!!! Porque sería el muerto viviente de Gronk quien sumaría más para la causa que el mismísimo Maestro Rodgers que dejaría una puntuación de 1.80, sepultando de una vez por todas las miserables esperanzas de las zorras.

Secreto a voces fue el hecho que el GM de las zorritas solicitó ayuda con algún trade de último minuto, pero no hubo respuesta de ningún GM en la liga que quisiera echarle una mano o dos, y así con solo las 2 manos con la que ya contaba se tuvo que dar abasto para darle un peladón de reeata al Gerente de los Quesobritas de Pollo, el cuál por cierto se reporta estable con quemaduras de segundo grado.

Por parte de los Quesobritas, todo estuvo en sintonía y la alineación tuvo una actuación sólida sin contar a Jonu que sufrió una lesión temprana, pero tanto el novato cuerpo de receptores y de corredores se mantienen con gran paso. Los Residuos Lacteos con se preparan para otra semana que pinta sencilla contra los de peralvillo; y pensando ya en la semana 8, esperando poder contar con algunos JUGADORAZOS que han estado en IR las últimas semanas.

Por su parte, Las zorritas se enfrentan a unos Delfines que siguen sumando triunfos en su división compartiendo un triple empate entre los únicos 3 equipos de la división; el otro es de choco…late.

¿Es un pájaro? ¿Es un avión? Nooooo! (bueno si, pero no tendría chiste), es el señor Seahawk que viene en picada. Después de un inicio prometedor los halcones marinos del lago de Texcoco han despertado del sueño y siguen recibiendo más pepinazos que en la Central de Abastos.

Aunque su rendimiento esta semana mejoró sustancialmente con respecto de la funesta semana 5, fue hasta el final que una actuación fuera del libreto de Christian Kirk (86 yds, 2 TD) decoró el marcador que estaba decidido desde los primeros juegos del domingo.

Mahomes y Kelce, batallaron para dominar a los Bills, pero aun así lograron contribuir con 41 puntos fantasy entre los dos, que resultó ser lo mismo que contribuyó solito Justin Jefferson de Minnesotta, que aunque no pudo evitar la derrota frente a los Falcons si le dió un gran empujón a los Hijos del Salario Mínimo hacia la meta.

A partir de ahí todo fue cuesta arriba para los Seahawks de Peralvillo que aunque se alivianaron con la aportación estelar de D'Andre Swift (116 yds, 2 TD), ya no pudieron alcanzar a los bastardos del presupuesto.

Los Hijos del Salario Mínimo deberán lucir mejor para enfrentar a los Médulas que se están desconsolados tras haber perdido la cabeza de la liga a manos de los Espejitos, mientras que el señor Seahawk mantiene la esperanzas que Mr. Tanking vuelva a las andadas porque el infierno del fantasy quema muy gacho, pero dicen en la Lagunilla que si un pollo puede quemar un pájaro quema más.

En esperado duelo por la punta se enfrentaron Los Médulas y los Espejitos y ataviados con sus mejores galas venían dispuestos a darse con todo para convertirse en los poseedores únicos de la cabeza de la liga.

Los Espejitos se regocijaban con el regreso triunfal de Julio Jones (137 yds, 2 TD) que se destacó en la primera victoria de los Falcons de la campaña, pero la verdadera acción se produjo desde Tennessee cuando los Titanes se dieron sin lástima con los Texans que son otros desde que Bill O'Brien fue mandado por todo el refilón.

Mientras que los Titanes respaldaron su ataque en las piernas de Derrick Henry (212 yds, 2 TD) los Texans lo hicieron de la mano (o del brazo entero) de Deshaun Watson (335 yds, 4 TD) que montó su mejor actuación del año para extender el juego hasta tiempo.

A pesar de que los Espejitos siempre mantuvieron su ventaja durante el fin de semana, los Médulas respondieron con buenas actuaciones de Kenny Golladay (105 yds) y Calvin Ridley (61 yds, 1 TD) en los juegos del mediodía y se quedaron con el grito ahogado en la garganta cuando Miles Sanders (118 yds) perdió el ovoide a 5 yardas de coronar una escapada de más de medio campo que, probablemente, le hubiera asegurado el triunfo esta semana.

Durante los juegos vespertinos, Los Médulas celebraron el regreso de Deebo Samuel a la estelaridad con los 49s pero los Espejitos contraatacaron con un héroe inesperado cuando la defensa de los Cardinales destrozó el ataque de los Cowboys con todo y su arsenal ofensivo.

Ahora los Espejitos son los líderes únicos del torneo acumulando 5 victorias en 6 semanas, mientras que los Médulas perdieron hasta el liderato de su división que ahora tomaron los Garrobos.

En semana 7 los Médulas enfrentarán un oscuro panorama al visitar al Dr. Tinieblas, mientras que los Espejitos necesitarán brillo extra para competirle a los Garrobos tienen en la mira el campeonato.

Sálvense quién pueda gritan en la región Tumbapatos, que está el juegaral a todo lo que da. Ya acumulan cinco derrotas y lo que se esperaba como una temporada de ensueño se ha convertido en el mismísimo infierno para los tumbapatos que ya no ven lo duro sino lo tupido.

Esta semana no había margen de error y aunque Adrian Peterson (58 yds, 1 TD) sigue respondiendo, el resto del equipo no parece capaz de contribuir a mejorar la situación. Davante Adams regresó de la lesión pero justo en el peor partido de Aaron Rodgers en años y contra Thanos eso es prácticamente imperdonable.

Los Garrobos siguen dejando puntos en la banca y en el aire, pues esta semana volvieron a quedarse cortos de su proyección inicial pero ante la debilidad de su rival eso no fue realmente un problema,

Destacaron los aportes de Kyler Murray por aire (188 yds, 2 TD) pero, sobre todo, por tierra (74 yds, 1 TD), George Kittle (109 yds, 1 TD) y Amari Cooper (79 yds, 1 TD), que fue en tiempo basura pero igual cuenta.

Deberán preocuparse los Garrobos por la actuación de los jugadores de los Cowboys, porque sin Dak Prescott al mando parece que las cosas se pondrán difíciles.

Ahora enfrentarán la prueba más complicada del torneo cuando visiten el Parque Juárez para enfrentar a los Espejitos que confían en el apoyo de su fanaticada para llevarse este duelo, en venganza de la final del torneo pasada.

Durante la semana los Garrobos organizaron un negocio multimillonario con la Chapo Family para organizar la llegada de Saquon Barkley que aunque no lo podrán estrenar hasta 2021, ya están puliendo la gema para tenerla listo para la próxima temporada.

Los Tumbapatos enfrentarán a la Tabasco Tropical Force en un duelo de candidatos al torneo de consolación.

En lo que parecía una carrera de caracoles se convirtió este duelo entre dos aficionados a los delfines.

Consistentes con su gris historia reciente, estos equipos le hicieron los honores a sus admirados delfines con un duelo casi somnífero pero que, hay que rescatar lo bueno, se puso interesante al final cuando la tristísima exhibición de Andy Dalton en su primera salida como titular de los Cowboys parecía darle su segunda victoria a los parientes de la mafia.

Las alarmas siguen encendidas en el equipo del Chapo desde que Saquon se tronara la rodilla en aquella triste tarde de domingo llevándose con ella la temporada de los Gigantes y de los Chapos.

En caída libre como gorda en tobogán, la gerencia de la Familia apretó el botón de emergencia y sucumbir ante los deseos de su hermano gemelo malvado (no es gemelo pero si malvado) que le ofreció un paquete de ayuda más pobre que el le mandó a Evaristo a los vecinos de la ranchería el Chiflón y el Monal, lo que le ganó la cordial invitación para beberse una jarra de agua de mierda, como cariñosamente le decían los colonos.

Pues ante la inminente derrota el Chapo mayor decidió alinear a los recién desempacados Kupp y Henderson, pero parece que ni tiempo le dio de leer las instrucciones porque, como dijera célebre niño a los infames Pumas de la UNAM, no sirvieron pa' nada y perdieron igual, nomás que se quedaron más cerquita.

Los Delfines de Tabasco acumulan así otra victoria, que quién sabe cómo ya acumularon cuatro, y prometen acumular una quinta, contra los Zorritos que andan un poco golpeados después del vendaval de quesos que se llevó el fin de semana.

Chapo Family le hará los honores a los Bulleggs que vienen de obtener una agónica victoria en el milagro del lunes por la noche.

Los lunes se volvieron el día favorito para los Bulleggs, pues es ahí cuando han vivido sus grandes emociones durante esta campaña.

Esta vez le tocó decidir su duelo contra los Tabasco Tropical Force que ya se veían celebrando su victoria por las calles de Villahermosa hasta que una escapada de Kenyan Drake le quitó la sonrisa de la cara y los dejó con un récord de dos ganados y cuatro derrotas lejos de los puestos de privilegio.

Los tropicales invirtieron fuerte para tratar de cambiar el rumbo de su equipo, pues ante la baja por lesión de Austin Ekeler el panorama se ha puesto cada vez más sombrío para una franquicia que en 2018 compitió por el título contra el mismísimo Thanos.

Con un desembolso exorbitante por un jugador como Travis Fulgham, con poca fama pero que ha tomado el protagonismo entre los receptores de las Águilas de Filadelfia, además de la adquisición de un paquete promocional desde los Espejitos con Russell Gage y Frank Gore.

El duelo no pintaba mal para las tropicosas que bailaban felices al ritmo de "Pelotero a la bola" pero se les empezó a aguar la fiesta con las anotaciones tardías de Fuller y de Beasley que le permitieron recuperar el aliento a los Bulleggs y llegar al duelo del lunes con una pequeña posibilidad de llevarse el encuentro.

Y mientras una actuación discreta de Drake y de Edmonds mantenía una calma chicha, al final del partido cuando parecía que el daño estaba hecho y que los Cardenales ya podían dejar jugar a los suplentes, Drake atacó el hueco y se escapó para más de 50 yardas para rematar a los Cowboys y a miles de jugadores de fantasy de paso.

Entonces es cuando el manager de los tropichafas veía con nostalgia los puntos en la banca de la defensa de los Bucaneros y de A.J. Green que después de semanas desaparecido, tuvo una actuación de casi 100 yardas contra los Colts.