Micolash, o como algunos lo llaman "dejá de correr maricón", es el primer boss que te encontrás en la Pesadilla de Mensis.
Micolash en si no es necesariamente difícil, pero si muy molesto, y hasta puede ser muy frustrante. Al principio verás como escapa y mientras lo perseguís invoca a varios esqueletos por el camino, de los cuales es mejor no preocuparse. Lo mejor es concentrarte en perseguir a Micolash y tratar de pegarle cada vez que puedas (si le disparás se queda quieto unos instantes). Puede que te desorientes un poco al seguirlo, pero no deberías tener mayor problema en encontrarlo, cualquier intento de guiar puede ser peor.
Cuando llegues junto a él en una sala sin niebla comenzará la pelea de verdad, acá si conviene que te saques de encima primero dos esqueletos que aparecerán allí. El ataque de Micolash consistirá en el augurio de Ebrietas (esos tentáculos que le salen del pecho, al igual que a la falsa Iosefka y a la cazadora de Bygenwerth. Curioso, no? no?), pero que se evitan fácilmente centrando la cámara en él y esquivando hacia un lado. La estrategia aquí es básicamente el viejo y querido esquivar y contraatacar.
Cuando le hayas quitado la mitad de la vida, desaparecerá y de nuevo tendrás que perseguirlo. Aquí se abre una nueva posibilidad de liquidarlo: hay un momento en que irá a una sala que está debajo de donde te econtrás y lo verás por un agujero en el piso. Desde ahí le podés tirar con todo lo que tengas, en lo posible cuchillos envenenados, ya que desaparecerá y volverá a aparecer ahí una y otra vez. Así le podés dar hasta matarlo, o hasta que te quedes sin proyectiles.
Si bajás a pegarle vovlerá a correr, hasta un momento en que entra a una sala y cierra la puerta tras él impidiéndote el paso. Tendrás que subir de nuevo hasta la cima y tirarte por un hueco del suelo. Nuevamente es mejor no intentar dar explicaciones que solo te pueden complicar más. Mejor buscá en el canal de youtube la pelea contra él y guiate de ahí. El problema es que ahora además del augurio de Ebrietas va a utilizar también una llamada del mas allá (unas luces explosivas que abarcan casi la totalidad de la pantalla), que son bastante difíciles de esquivar (podés probar esquivando hacia adelante, o hacia adelante pero en diagonal), aunque la mejor estrategia es no despegarte nunca de él para que no las tire, esquivando el augurio de Ebrietas y pegándole después.