Lectura Bíblica

Mateo 28, 18-20

Jesús se acercó y les habló:

—Me han concedido plena autoridad en cielo y tierra. Vayan y hagan discípulos entre todos los pueblos, bautícenlos consagrándolos al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo, y enséñenles a cumplir todo lo que yo les he mandado. Yo estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.

Palabra del Señor.
Gloria a Ti, Señor Jesús.

Testimonio

Sara Vera Pérez, Capilla Nuestra Sra. del Pilar. Santiago.

Vivir el Evangelio y hacerlo vida, ha sido muy especial y difícil en mi existencia. Mi historia me ha llevado a ser catequista de CFIVE (Catequesis Familiar de Iniciación a la Vida Eucarística) y, luego, a ser catequista Bautismal. Por las necesidades pastorales de la Capilla en la que sirvo, tuve que salir de mi zona de confort. Sentí ese llamado especial que solo he sentido en algunas ocasiones a lo largo de mi vida, el llamado de anunciar con mayor fuerza el Evangelio.

Me encontré en un área en la que, paso a paso, he ido sintiendo que Jesús me ha tomando de la mano. No me ha soltado nunca en este nuevo desafío como catequista de preparación al bautismo.

Ha sido maravilloso poder acompañar y orientar a tantas personas que piden el bautismo para sus hijos e hijas, para iniciarlos en el camino de fe. Esa fe que sumerge en la muerte y resurrección del Señor Jesús, en su misterio pascual.

Jesús me guía, me envía y me pide que, a través de su Palabra, pueda ayudar a que muchas personas se decidan por un camino de vida renovada y consagrada en la luz y fuego del Espíritu que nos transforma. En mi vocación de catequista, contemplo la riqueza humana y espiritual del ser humano que está deseoso de una vida nueva. Muchas personas quieren ser renovadas en Cristo Jesús para que se vida reciba el sello indeleble de ser hijas e hijos adoptivos de Dios.

Intención del día

Oremos por todas las personas que inician el camino de la fe, para que puedan vivir plenamente su sacerdocio bautismal.
Que podamos acompañarles y compartir con ellas nuestra propia experiencia de ser hijos e hijas de Dios.

Con María, oremos al Señor.
Escúchanos, Señor te Rogamos.

(Se puede rezar el Padrenuestro)

Oración

Padre de la creación,
tú nos has llamado en el bautismo
a formar parte de tu pueblo santo.
Somos hijas e hijos en Cristo;
tenemos un sacerdocio bautismal
que nos permite llamarte "Padre"
y, tratarnos entre nosotros,
como hermanas y hermanos.
Ayúdanos a testimoniar
la alegría del Evangelio
en medio de nuestras ciudades.
Por Cristo, nuestro Señor.
Amén.