30 de noviembre

Con María, acompañamos la vida creyente de las familias

Lectura Bíblica

Marcos 4, 26-29

El reino de Dios es como un hombre que sembró un campo: de noche se acuesta, de día se levanta, y la semilla germina y crece sin que él sepa cómo. La tierra por sí misma produce fruto: primero el tallo, luego la espiga, y después el grano en la espiga. En cuanto el grano madura, mete la hoz, porque ha llegado la cosecha.

Palabra del Señor.
Gloria a Ti, Señor Jesús.

Testimonio

Víctor Andrés Donoso Ortiz, catequista del Colegio Seminario San Rafael. Viña del Mar

En mi experiencia como catequista, en más de alguna ocasión he escuchado frases como las siguientes: “no tengo tiempo para ir a la Iglesia”, “no entiendo el evangelio”, "no voy a andar con la Biblia bajo el brazo".

La experiencia de fe, de cada persona, es algo íntimo, profundo; es un proceso. Tiene momentos y ritmos de práctica religiosa que se enmarcan en el contexto y las circunstancias de la vida. El Espíritu Santo hace lo suyo en cada persona y en cada comundiad. Muchas veces, despúes del tiempo de preperación a los Sacramentos de la Iniciación Cristiana he escuchado decir: “Me gusta ir a Iglesia”, “que bello es leer y entender el evangelio”, “Mientras camino por la calle llevo el evangelio en mi corazón”.

Intención del día

Oremos por todas las personas que trabajan en la catequesis y son testigos de la acción de Dios en muchas familias.
Que el Señor les ayude a cuidar la fe que nace y crece.

Con María, oremos al Señor. Escúchanos, Señor te Rogamos.
(Se puede rezar el Padrenuestro)

Oración

Padre de misericordia,
te damos gracias por el don de la fe
y por los procesos de conversión
que suscitas en nuestras comunidades.
Ayúdanos a tener inteligencia pastoral
para acompañar la vida espirtual
de tantas familias que se acercan a la Iglesia.
Por Jesucristo, nuestro, Señor.
Amén.