Sylvia Plath
Danzas de la noche
Una sonrisa cayó en la hierba.
¡Irremediable!
Y cómo van tus danzas de la noche
A perderse sobre sí. ¿En matemáticas?
Saltos y espirales tan puros—
Seguramente viajan
Por el mundo para siempre, no debería del todo
Sentarme vacía de bellezas, el regalo
De tu pequeña respiración, la hierba mojada
Huele a tu sueño, lirios, lirios.
Su carne no guarda relación.
Fríos pliegos de ego, la cala,
Y el tigre, embelesados de sí—
Manchas, y una diáspora de pétalos calientes.
Los cometas
Tienen tanto espacio que cruzar,
Tanta frialdad, desmemoria.
Así se descascaran tus gestos—
Tibio y humano, luego su luz rosa
Sangrando y pelándose
A través de las negras amnesias del Cielo.
Por qué me son entregadas
Estas lámparas, estos planetas
Que caen como bendiciones, como copos
De seis lados, blancos
En mis ojos, mis labios, mi pelo
Al tacto se derriten.
No hay adónde.