Grabado de la isla de El Trocadero conla vía férrea y el astillero de la Compañía Trasatlántica
El antiguo ferrocarril Jerez-Trocadero, desde Puerto Real, estuvo abandonado durante años. A pesar de la importancia industrial de la zona las vías solo se mantuvieron operativas hasta las factorías de Airbus (antes Construcciones Aeronáuticas) y General Motors, donde terminaba el recorrido, entre la autovía a Cádiz y el caño del Trocadero,
El creciente tráfico de graneles en el puerto de Cádiz generó quejas vecinales por la suciedad y problemas respiratorios causados por la polvareda y el viento. Por ello, el atraque de estos buques se reubicó gradualmente al muelle de la Cabezuela, también de la autoridad portuaria y cercano a Dragados y Navantia.
Esta decisión obligó a retomar la idea de rehabilitar la antigua línea del Trocadero hasta el muelle. Es necesario destacar que Navantia tiene en su interior preparadas las vías desde hace décadas para cuando fuera posible esta conexión.
Pruebas de circulación por el interior de La Cabezuela
A la fecha de la revisión de este trabajo las obras del viaducto sobre el entramado de carreteras se encuentran muy avanzadas, efectuadas las pruebas de carga y especulándose ya sobre posibles fechas de entrada en funcionamiento. En el interior de La Cabezuela también se han realizado los llamados "recorridos de fiabilidad".
Dentro del complejo portuario e industrial, la infraestructura ferroviaria está diseñada para manejar volúmenes considerables de tráfico de carga. La red de vías internas presenta diferencias en su capacidad de almacenamiento y maniobra según la ubicación:
Muelle Sur: Las vías de este muelle están preparadas para albergar composiciones ferroviarias de gran longitud, alcanzando un máximo de 750 metros. Esta capacidad es fundamental para optimizar las operaciones de carga y descarga de trenes completos, típicas del tráfico marítimo-terrestre.
Muelle Oeste: En contraste, las vías operativas en el Muelle Oeste pueden alojar trenes con una longitud máxima de 500 metros. Aunque menor que la del Muelle Sur, esta longitud sigue siendo adecuada para el manejo de tráficos específicos y complementarios dentro del recinto portuario.