En 1852 se aprobó el proyecto de la primera estación de Jerez. Era un pequeño edificio de madera y ladrillo, más parecido a una simple cubierta o templete, con un edificio para pasajeros que entraban por los laterales, ya que el centro se reservaba para carruajes. En el interior, había salas de espera diferenciadas (1ª y 2ª clases, y 3ª), zona de mercancías, apeadero, taquilla y casa del guarda.
La estación original, situada en El Ejido (cercana a la actual plaza Madre de Dios), pasó a ser solo de mercancías con la llegada de la conexión a Sevilla; los pasajeros usaban el actual andén. A partir de 1870 sirvió de estación de mercancías del tren urbano. El cambio de ubicación se debió a que Ferrocarriles Andaluces adquirió la línea Jerez - Trocadero y la conectó con la de Sevilla, dejando la estación de El Ejido en un lugar inconveniente.